Para conocer el estado del árbol de mango ubicado en la plaza Alfonso López, funcionarios de Corpocesar visitaron el lugar y realizaron una inspección visual al árbol.

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El técnico de apoyo a la Subdirección de Gestión Ambiental, Carlos Andrade, reconoció que el árbol de mango se encuentra en regular estado fitosanitario, presentando un color verde oscuro y turgencia en su follaje. El informe indica que el árbol se encuentra en la etapa de senescencia temprana (proceso iniciado como respuesta al estrés y daño ocurrido en una célula), por lo que se muestran indicios de “atrincheramiento” de la copa.

“Se nota que la copa viva se contrae, se observa que aumenta la vitalidad vegetativa en la parte más baja de la copa; sin embargo, no se notó aumento de la actividad fúngica ni el deterioro de la madera de los tallos como tampoco presencia o colonización de flora y fauna saproxylica”, subrayó el experto.

Es de indicar que se produce pérdida de raíces a su alrededor, que se han eliminado luego de las intervenciones. “Este árbol ha sufrido porque durante las continuas transformaciones que se han hecho a la plaza se le ha intervenido gran parte del tapete radicular y eso va ocasionando un efecto acumulativo, lo que demuestra que en la parte de arriba veamos puntas secas porque hay daños que se dan en el conducto del xilema que transporta elementos esenciales para el proceso fotosintético”, aseguró Andrade.

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RECOMENCACIONES

De acuerdo a la visita de inspección, otro de los aspectos que ha ocasionado deterioro es la elevación del nivel del suelo que se le ha hecho al árbol con la construcción de una jardinera a su alrededor, lo que según el funcionario, ha ocasionado “estrés por falta de oxígeno en el sistema radicular”, por lo que recomendó retirar un poco el área dura o de cemento, lo que redundaría en su beneficio y bajar los niveles del suelo que se subieron por exceso de abono.

“No sabemos si antes de ser abonado se hizo algún tipo de análisis de suelo para conocer con exactitud los elementos esenciales ausentes en el suelo que en su momento necesitaba el árbol porque el exceso produce acidez y tampoco es bueno para el árbol”, acotó.

El resultado de la visita arroja que el árbol necesitaría un tratamiento especializado de bio-estimulación, a través de una mezcla microbiana conformada por 25 géneros de microorganismos entre bacterias y hongos, que permitan rápidamente la reconstrucción del sistema radicular con la aplicación al suelo de microorganismos especializados en solubilización de nutriente para el pronto restablecimiento y reproducción del sistema radicular del árbol y mejorar así sus condiciones.