Ante las autoridades se entregó el exalcalde de Pueblo Bello, Javier Landazábal Gómez, condenado a cinco años y tres meses de prisión por actos de corrupción durante su periodo de gobierno entre los años 2012 – 2015.

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Su presentación se produjo en la tarde de este lunes festivo en la Clínica Santa Isabel donde se encuentra recluido por presuntos quebrantos de salud. EL PILÓN conoció que el exfuncionario deberá ser dejado a disposición de un juez de ejecución de penas y medidas de seguridad de Valledupar.

Landazábal Gómez se encontraba prófugo de la justicia desde el 23 de octubre del año pasado que fue condenado por el Juzgado Tercero Penal del Circuito con Funciones de Conocimiento de Valledupar por el delito de celebración de contrato sin cumplimiento de requisitos legales.

Esta sentencia fue apelada pero el Tribunal Superior del Distrito Judicial de la capital del Cesar la confirmó en el mes de diciembre de 2019.

A su vez la defensa interpuso recurso de casación y la determinación nuevamente será valorada por la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia.

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El proceso en contra del exalcalde inició por las irregularidades presentadas en un convenio que el exmandatario realizó el 17 de octubre de 2014 con la fundación sin ánimo de lucro ‘Semillas de amor y esperanza’, en virtud de fomentar proyectos productivos durante un periodo de dos meses. En el contrato al municipio le correspondió el aporte de $90.000.000 y a la fundación la suma de $8.000.000 representados en bienes y servicios.

Pero según las indagaciones, no cumplió con los principios de transparencia porque no publicó el contrató en las plataformas oficiales del ente territorial tal como lo indica el enciso 2 del artículo 1 del Decreto 777 de 1992, para los convenios cuya suma sean igual o superior a 100 salarios mínimos legales mensuales vigentes.

Además para la Fiscalía la fundación no era la más idónea para llevar a cabo los objetivo del convenio dado que carecía de especialidad y tenía un amplio objeto social, al parecer, con el fin de acceder a las contrataciones públicas.

El ente investigador pudo establecer que la entidad tenía menos de un mes de haber sido creada e inscrita en la Cámara de Comercio cuando suscribió el convenio, lo que significaba que no contaba con los cinco años de experiencia idóneos para materializarlo.

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Finalmente, las autoridades determinaron que el exalcalde no fue objetivo al elegir al contratista además las metas trazadas no fueron cumplidas porque se basó en la entrega de productos y no en la capacitación, entre otros.