Hay empresas de ciertos sectores de la economía que podrían verse expuestos a sanciones del Ministerio de Trabajo por no cumplir con la normatividad vigente para contratar a ciudadanos venezolanos que han llegado a Colombia en búsqueda de un mejor futuro.
Esta es la quinta entrega de ‘Del otro lado de la frontera’, serie que semanalmente presenta el diario EL PILÓN. Se trata de un trabajo periodístico que busca visibilizar, explicar y contar a través de crónicas, reportajes, perfiles y entrevistas la situación de los migrantes venezolanos en Colombia a raíz de la crisis en ese país.
El sector de la construcción es uno de los que más ha cobijado a ciudadanos venezolanos que han llegado a esta zona de Colombia en búsqueda de un mejor futuro, pero la mayoría son indocumentados y por ende no tienen garantías laborales, según lo ha establecido el Ministerio de Trabajo.
“Hemos recibidos noticias de algunos ciudadanos de nacionalidad colombiana frente a que la mano de obra trabajadora de origen venezolano se está vendiendo hoy por unos precios muy irrisorios, inclusive por debajo de los estándares mínimos que establece la normatividad nacional colombiana”, indicó Jorge Luis Arzuaga Martínez, director del Ministerio de Trabajo Territorial Cesar.
El funcionario explicó que otros sectores en los que se ha conocido que hay mano de obra venezolana, sin el cumplimiento de la normatividad laboral colombiana, son: restaurantes, lavautos y servicio doméstico.
“Hemos programado desde la Territorial Cesar del Ministerio de Trabajo, para el segundo semestre de este año, una jornada de inspección vigilancia y control en la que vamos a llegar a todos estos sectores. En la medida que haya sido una realidad iniciaremos los procesos, pondremos en conocimiento de las demás autoridades aliadas en este sentido y si es del caso impondremos las sanciones que corresponden a aquellos empleadores que estén violando la normatividad laboral, la seguridad y salud en cuanto a estos trabajadores de origen venezolano”, precisó Arzuaga.
Además señaló que las sanciones van desde cinco mil salarios mínimos legales mensuales vigentes y por violación al Sistema de Riesgos Laborales, de Seguridad y Salud en el Trabajo ascienden hasta mil salarios mínimos legales mensuales vigentes.
Eider Páez López, es un joven de 27 años que ha trabajado casi toda su vida en la albañilería, aseguró que como obrero local ha sentido en el bolsillo la competencia extranjera que incrementó con la crisis en Venezuela.
“Los maestros de obra aquí cobran 60 mil pesos el día de trabajo, los ayudantes 35 mil y a los venezolanos les pagan a unos a veces hasta 20 mil pesos el día de trabajo”, afirmó el constructor.
Como en otras ciudades del país, en la capital del Cesar se ha vuelto común encontrar venezolanos rebuscándose en semáforos, venta ambulante y otros en mendicidad.
“Nosotros vendemos semillas de marañón para poder sobrevivir. Con las ventas de acá nosotros por lo menos pagamos la habitación, alcanza para las comidas, cosa que allá en Venezuela no se ve; con el sueldo de Venezuela se trabaja una semana completa y te alcanza para comer dos días”, dijo uno de los vendedores ambulantes ubicados en inmediaciones de la glorieta Pedazo de Acordeón, en el norte de la capital del Cesar.
Según la oficina de Migración en Valledupar, 193 venezolanos han sido deportados y cinco más sido expulsados en lo que va del año, hasta el 2 de agosto, pero se estima que de los más de dos mil ciudadanos de ese país que se encuentran en la ciudad, el 80 por ciento no tiene pasaporte y por lo tanto no son beneficiarios del permiso especial de permanencia de dos años que otorga el gobierno colombiano desde el pasado 3 de agosto.
Desde esa fecha, los ciudadanos de nacionalidad venezolana que ingresaron al país por un puesto de control autorizado, con pasaporte sellado y que en la actualidad tengan vencido el permiso para permanecer en Colombia, podrán tramitar el permiso especial de permanencia en el Centro Facilitador de Servicios Migratorios de Migración Colombia en la capital del Cesar, ubicado en la carrera 8 No 15ª-19.
Como también lo podrán tramitar ingresando a la página web de migracióncolombia.gov.co, diligenciado un formulario con toda la información requerida, la cual les garantizará un documento especial que les permitirá estar en Colombia de manera regular.
Este Permiso Especial de Permanencia, PEP, solo lo pueden obtener exclusivamente los venezolanos que entraron por los puestos de control, que no tengan antecedentes judiciales, ni que hayan sido deportados o expulsados, no tiene costo alguno y aplicará únicamente para quienes en el momento de expedición de la resolución del 28 de julio del presente año se encontraban en Colombia.
Además, el permiso especial de permanencia, no remplazará el pasaporte, ni será un documento válido para viajes, pero si les permitirá estudiar, trabajar y afiliarse al sistema de seguridad social, sea como trabajador independiente o dependiente.
El trámite para el permiso especial de permanencia es desde el 3 de agosto hasta 90 días para los ciudadanos que estén interesados en regularizar su situación en Colombia, previa verificación del cumplimiento de los requisitos por parte de Migración Colombia, la entidad del control migratoria en el país.
Según Mintrabajo, además de la construcción hay otros sectores en los que se ha conocido hay mano de obra venezolana, sin el cumplimiento de la normatividad laboral colombiana, son: restaurantes, lavautos y servicio doméstico.
Por Martín Elías Mendoza
Hay empresas de ciertos sectores de la economía que podrían verse expuestos a sanciones del Ministerio de Trabajo por no cumplir con la normatividad vigente para contratar a ciudadanos venezolanos que han llegado a Colombia en búsqueda de un mejor futuro.
Esta es la quinta entrega de ‘Del otro lado de la frontera’, serie que semanalmente presenta el diario EL PILÓN. Se trata de un trabajo periodístico que busca visibilizar, explicar y contar a través de crónicas, reportajes, perfiles y entrevistas la situación de los migrantes venezolanos en Colombia a raíz de la crisis en ese país.
El sector de la construcción es uno de los que más ha cobijado a ciudadanos venezolanos que han llegado a esta zona de Colombia en búsqueda de un mejor futuro, pero la mayoría son indocumentados y por ende no tienen garantías laborales, según lo ha establecido el Ministerio de Trabajo.
“Hemos recibidos noticias de algunos ciudadanos de nacionalidad colombiana frente a que la mano de obra trabajadora de origen venezolano se está vendiendo hoy por unos precios muy irrisorios, inclusive por debajo de los estándares mínimos que establece la normatividad nacional colombiana”, indicó Jorge Luis Arzuaga Martínez, director del Ministerio de Trabajo Territorial Cesar.
El funcionario explicó que otros sectores en los que se ha conocido que hay mano de obra venezolana, sin el cumplimiento de la normatividad laboral colombiana, son: restaurantes, lavautos y servicio doméstico.
“Hemos programado desde la Territorial Cesar del Ministerio de Trabajo, para el segundo semestre de este año, una jornada de inspección vigilancia y control en la que vamos a llegar a todos estos sectores. En la medida que haya sido una realidad iniciaremos los procesos, pondremos en conocimiento de las demás autoridades aliadas en este sentido y si es del caso impondremos las sanciones que corresponden a aquellos empleadores que estén violando la normatividad laboral, la seguridad y salud en cuanto a estos trabajadores de origen venezolano”, precisó Arzuaga.
Además señaló que las sanciones van desde cinco mil salarios mínimos legales mensuales vigentes y por violación al Sistema de Riesgos Laborales, de Seguridad y Salud en el Trabajo ascienden hasta mil salarios mínimos legales mensuales vigentes.
Eider Páez López, es un joven de 27 años que ha trabajado casi toda su vida en la albañilería, aseguró que como obrero local ha sentido en el bolsillo la competencia extranjera que incrementó con la crisis en Venezuela.
“Los maestros de obra aquí cobran 60 mil pesos el día de trabajo, los ayudantes 35 mil y a los venezolanos les pagan a unos a veces hasta 20 mil pesos el día de trabajo”, afirmó el constructor.
Como en otras ciudades del país, en la capital del Cesar se ha vuelto común encontrar venezolanos rebuscándose en semáforos, venta ambulante y otros en mendicidad.
“Nosotros vendemos semillas de marañón para poder sobrevivir. Con las ventas de acá nosotros por lo menos pagamos la habitación, alcanza para las comidas, cosa que allá en Venezuela no se ve; con el sueldo de Venezuela se trabaja una semana completa y te alcanza para comer dos días”, dijo uno de los vendedores ambulantes ubicados en inmediaciones de la glorieta Pedazo de Acordeón, en el norte de la capital del Cesar.
Según la oficina de Migración en Valledupar, 193 venezolanos han sido deportados y cinco más sido expulsados en lo que va del año, hasta el 2 de agosto, pero se estima que de los más de dos mil ciudadanos de ese país que se encuentran en la ciudad, el 80 por ciento no tiene pasaporte y por lo tanto no son beneficiarios del permiso especial de permanencia de dos años que otorga el gobierno colombiano desde el pasado 3 de agosto.
Desde esa fecha, los ciudadanos de nacionalidad venezolana que ingresaron al país por un puesto de control autorizado, con pasaporte sellado y que en la actualidad tengan vencido el permiso para permanecer en Colombia, podrán tramitar el permiso especial de permanencia en el Centro Facilitador de Servicios Migratorios de Migración Colombia en la capital del Cesar, ubicado en la carrera 8 No 15ª-19.
Como también lo podrán tramitar ingresando a la página web de migracióncolombia.gov.co, diligenciado un formulario con toda la información requerida, la cual les garantizará un documento especial que les permitirá estar en Colombia de manera regular.
Este Permiso Especial de Permanencia, PEP, solo lo pueden obtener exclusivamente los venezolanos que entraron por los puestos de control, que no tengan antecedentes judiciales, ni que hayan sido deportados o expulsados, no tiene costo alguno y aplicará únicamente para quienes en el momento de expedición de la resolución del 28 de julio del presente año se encontraban en Colombia.
Además, el permiso especial de permanencia, no remplazará el pasaporte, ni será un documento válido para viajes, pero si les permitirá estudiar, trabajar y afiliarse al sistema de seguridad social, sea como trabajador independiente o dependiente.
El trámite para el permiso especial de permanencia es desde el 3 de agosto hasta 90 días para los ciudadanos que estén interesados en regularizar su situación en Colombia, previa verificación del cumplimiento de los requisitos por parte de Migración Colombia, la entidad del control migratoria en el país.
Según Mintrabajo, además de la construcción hay otros sectores en los que se ha conocido hay mano de obra venezolana, sin el cumplimiento de la normatividad laboral colombiana, son: restaurantes, lavautos y servicio doméstico.
Por Martín Elías Mendoza