Un veterinario de Valledupar atribuye a una intervención divina y a su fe inquebrantable la supervivencia a una cirugía.
Hace cuatro años, el 16 de julio, Orlando Andrade, un veterinario de Valledupar, vivió una experiencia asombrosa durante su lucha contra una diverticulitis y peritonitis que requirieron una cirugía de alto riesgo.
Para él, su supervivencia sin complicaciones se atribuye a una intervención divina y a su fe inquebrantable en Dios y la Virgen del Carmen.
Durante su proceso de recuperación, Orlando relata haber tenido un encuentro espiritual en el que asegura haber visto una figura misteriosa a tres metros de distancia, a la que describe como “el diablo”.
En ese momento, invocó la ayuda de la Virgen del Carmen, reafirmando su fe y su negativa a sucumbir ante cualquier influencia ‘diabólica’.
Conforme la figura se acercaba cada vez más, Orlando continuaba suplicando protección divina. “‘Yo contigo no me voy’. Después volvió más cerca… La tercera vez ya estaba al lado mío, yo dije: ‘Dios mío, Virgen, ayúdame’”, contó.
En un giro sorprendente de la historia, la figura se transformó en tres personajes vestidos como personajes bíblicos: un señor, la Virgen y un niño. Según relata, el señor recogió un oráculo y lo señaló a él, al igual que la Virgen.
En ese instante, Orlando asegura que experimentó una sensación de paz y alivio, sin sentir dolor a pesar de su estadía en la Unidad de Cuidados Intensivos durante dos días.
“Cuando se fueron me empecé a sentir tan bien que quería pararme. Aunque estaba entubado, ya por dentro quería pararme, irme, una sensación espiritual muy grande desde el momento en que ellos me señalaron con el oráculo, desde ahí no sentí dolor, a pesar que duré dos días en UCI, no me sentía nada, me sentía bien. Nada más me lavaron una vez, no me dio dolor, Gracias a la Virgen; los que saben dicen que me salió la Virgen José y el Divino Niño’”, explicó Andrade.
Orlando destaca la importancia de su fe en la Virgen del Carmen, una devoción que ha acompañado a su familia a lo largo de su vida. Continúa orando en diferentes lugares sagrados asociados con la Virgen y considera su encuentro con la divinidad como una señal de bendición.
La historia de Orlando se suma a la lista de testimonios que resaltan la importancia de la espiritualidad en la vida de las personas.
En el Día de la Virgen del Carmen, celebrado a nivel nacional el pasado domingo, se conmemora a la santa patrona de los conductores, bomberos y la reina de las Fuerzas Armadas en Colombia.
Esta fecha, elegida debido a una aparición de la Virgen a San Simón Stock en 1251, se celebra cada año con procesiones y misas en honor a la Virgen del Carmen.
Un veterinario de Valledupar atribuye a una intervención divina y a su fe inquebrantable la supervivencia a una cirugía.
Hace cuatro años, el 16 de julio, Orlando Andrade, un veterinario de Valledupar, vivió una experiencia asombrosa durante su lucha contra una diverticulitis y peritonitis que requirieron una cirugía de alto riesgo.
Para él, su supervivencia sin complicaciones se atribuye a una intervención divina y a su fe inquebrantable en Dios y la Virgen del Carmen.
Durante su proceso de recuperación, Orlando relata haber tenido un encuentro espiritual en el que asegura haber visto una figura misteriosa a tres metros de distancia, a la que describe como “el diablo”.
En ese momento, invocó la ayuda de la Virgen del Carmen, reafirmando su fe y su negativa a sucumbir ante cualquier influencia ‘diabólica’.
Conforme la figura se acercaba cada vez más, Orlando continuaba suplicando protección divina. “‘Yo contigo no me voy’. Después volvió más cerca… La tercera vez ya estaba al lado mío, yo dije: ‘Dios mío, Virgen, ayúdame’”, contó.
En un giro sorprendente de la historia, la figura se transformó en tres personajes vestidos como personajes bíblicos: un señor, la Virgen y un niño. Según relata, el señor recogió un oráculo y lo señaló a él, al igual que la Virgen.
En ese instante, Orlando asegura que experimentó una sensación de paz y alivio, sin sentir dolor a pesar de su estadía en la Unidad de Cuidados Intensivos durante dos días.
“Cuando se fueron me empecé a sentir tan bien que quería pararme. Aunque estaba entubado, ya por dentro quería pararme, irme, una sensación espiritual muy grande desde el momento en que ellos me señalaron con el oráculo, desde ahí no sentí dolor, a pesar que duré dos días en UCI, no me sentía nada, me sentía bien. Nada más me lavaron una vez, no me dio dolor, Gracias a la Virgen; los que saben dicen que me salió la Virgen José y el Divino Niño’”, explicó Andrade.
Orlando destaca la importancia de su fe en la Virgen del Carmen, una devoción que ha acompañado a su familia a lo largo de su vida. Continúa orando en diferentes lugares sagrados asociados con la Virgen y considera su encuentro con la divinidad como una señal de bendición.
La historia de Orlando se suma a la lista de testimonios que resaltan la importancia de la espiritualidad en la vida de las personas.
En el Día de la Virgen del Carmen, celebrado a nivel nacional el pasado domingo, se conmemora a la santa patrona de los conductores, bomberos y la reina de las Fuerzas Armadas en Colombia.
Esta fecha, elegida debido a una aparición de la Virgen a San Simón Stock en 1251, se celebra cada año con procesiones y misas en honor a la Virgen del Carmen.