Los directivos de Drummond enfatizaron su responsabilidad y obligación en el cuidado del medio ambiente durante las operaciones mineras al elaborar una ruta hacía la carbono-neutralidad en el Cesar, en donde trabaja una gran población en esta empresa. 

Según Ricardo Urbina Aroca, Vicepresidente de Recursos Humanos de Drummond, solo en el sector de minería tiene aproximadamente 5.200 empleados directos en nómina y por los menos seis mil más directos en contratistas que trabajan en diferentes áreas de la empresa. 

Es decir, se habla de más de once mil empleos directos e indirectos y por lo menos 30 mil indirectos. Incluso, se afirma que el 40% del Producto Interno Bruto (PIB) proviene de la minería y más del 30% lo concibe Drummond. De allí proceden muchos recursos para las obras de los municipios.

La salida del país de Drummond, como hipotéticamente lo plantean algunos, sería funesta para la economía del Cesar porque ya está muy golpeada con la salida de Prodeco. La capacidad de Drummond es tres veces más grande, miles de personas quedarían cesantes.

Pero, el futuro es de mucha incertidumbre en gran parte por el Gobierno nacional. Porque se escuchan iniciativas que podrían golpear a la empresa, como la reforma tributaria que ya pasó, pero por el momento permite mantenerse el tiempo de bonanza. Sin embargo, Urbina Aroca asegura que Drummond está muy fuerte, muy sólida a pesar de la incertidumbre, la compañía sigue trabajando.

Entre tanto, en Valledupar, Drummond presentó su hoja de ruta hacia la carbono-neutralidad. Con la conexión a la red nacional, la construcción de plantas solares fotovoltaicas, soluciones basadas en la naturaleza, y el uso de combustibles bajos en emisiones, entre otras acciones. 

La funcionaria Carolina Riaño, hizo énfasis en que la estrategia de transición debe ir de la mano de una estrategia de transformación fiscal y socioeconómica basada en cuatro ejes fundamentales. 

La ruta hacia la carbono-neutralidad que anunció Drummond se sustenta en la reducción de GEI, implementar estrategias de compensación y la gestión de emisiones indirectas en toda la cadena de suministros incluyendo proveedores de bienes y servicios y clientes. Uno de los hitos iniciales de la estrategia es la reducción del 30% de las emisiones directas de CO2 a 2030.

La compañía promete, y eso debe vigilarse, no solo reducir sus emisiones de gases efecto invernadero (GEI), sino que “le apuesta a liderar la transición energética y productiva en el sector minero, y crea un nuevo portafolio de inversiones que aumentan la confiabilidad energética del país”.

“En esa misión hemos trabajado desde hace varios años, y esta hoja de ruta evidencia este compromiso”, dijo José Miguel Linares, presidente de Drummond. 

Alberto García, expresó que “ante el desafío del cambio climático y para poder avanzar hacia un futuro de menores emisiones, en Drummond han adoptado una estrategia para alcanzar la carbono-neutralidad en el año 2050. Esta estrategia incluye la implementación de tecnologías y soluciones para reducir y compensar las emisiones directas de CO2 en las operaciones de todas nuestras unidades de negocio”. 

El presidente de Drummond, José Miguel Linares, precisó que la compañía comprende la transición como un proceso integral, progresivo y colaborativo, que construya una visión compartida de futuro, a partir del aprovechamiento de las posibilidades del presente. 

“Toda esta estrategia busca una alineación y coordinación de esfuerzos e iniciativas con el Estado colombiano, en las que desde nuestro rol y capacidades como compañía podamos construir alternativas reales, pertinentes, basadas en las características y necesidades del territorio, en beneficio de las comunidades y del país”, concluyó. Ojalá esta propuesta se convierta en realidad para el bien de todos. Hasta la próxima semana. [email protected]   @tiochiro.