En todas las encuestas previas a las elecciones de octubre de 2019, Ernesto Orozco figuraba como el candidato favorito a ganar las elecciones. En algunas mediciones, la diferencia alcanzaba los 10 puntos porcentuales respecto al segundo.  

Sin embargo, llegaron las elecciones y Mello Castro fue elegido como alcalde de Valledupar. Ernesto no aceptó su cargo en el Concejo y se fue como gerente a Bogotá. El año pasado volvió a Valledupar con el objetivo de ser candidato a la Alcaldía nuevamente.

Esta vez, también parte como favorito, sin embargo, en la campaña esperan no repetir los errores del pasado y sufrir otra derrota sorpresiva. EL PILÓN consultó a fuentes internas para conocer qué cambiaron a nivel interno.

ANILLO DE CONFIANZA

Dentro de la reestructuración hubo cambios en el primer círculo que rodea a Ernesto Orozco. Estarán los concejales Guido Castilla y Jorge Pérez, quienes por cosas personales no serán candidatos para centrarse totalmente en la campaña. También estarán líderes de juventudes, y asesores cercanos al congresista Ape Cuello, quien es el padrino de esta candidatura. 

ENFERMEDAD 

El factor que más golpeó la candidatura de Orozco fue su operación a corazón abierto, que lo obligó a salir de los escenarios y dejar de recorrer las calles de Valledupar, mientras Mello Castro dormía en los barrios. En la actual campaña, casi todas las publicaciones en las redes sociales del candidato son de visitas en los barrios de la ciudad. Incluso, fue el primero en salir al ruedo. 

Dentro de la campaña también quieren evitar intermediarios entre los líderes y el candidato. “Entre más roce haya entre Ernesto y los líderes que mueven a la gente habrá mayor confianza. Esos son los que conocen los barrios”, contó una fuente de la campaña a EL PILÓN. 

MENOS TIBIEZA

Hace cuatro años, la cercanía con el exalcalde Augusto Ramírez Uhía le representó críticas y lo limitó como un candidato tibio ante los problemas de la ciudad. Contrario, para estas elecciones su oposición al alcalde Mello Castro sería una de sus banderas. “Lo más fácil que hay es hacer oposición”, contó un líder.

Y la diferencia se ve en sus mensajes publicados en redes sociales. Mientras hace cuatro años el mensaje era moderado, ahora Ernesto habla de que “se perratearon a Valledupar”, “Valledupar en caos”, “prometieron el orden de la ciudad y hoy está invivible”, en clara oposición a Mello Castro. 

EL VOTO DE OPINIÓN 

Sin embargo, uno de los mayores desafíos será el voto de opinión. Lejos de alejarse de sus padrinos políticos, Ernesto se ha mostrado orgulloso del apoyo del representante Ape Cuello y el senador Didier Lobo. Incluso, la semana pasada confirmó lo obvio: el apoyo del senador Lobo a su campaña. 

Ape Cuello es, quizás, una de los políticos más poderosos del departamento, pero a la vez uno de los más cuestionados. Y en esa cercanía se basan sus opositores para cuestionar a Ernesto. Por eso esta relación es de suma y resta: resta votos de opinión, pero suma una maquinaria sólida, quizás la más fuerte de la capital del departamento.