Los participantes son apoyados por sus familiares y amigos en cada presentación.
Como todos los años en el Festival de la Leyenda Vallenata se inscriben talentosos participantes que buscan alcanzar una corona de Rey Vallenato en alguna de las categorías. Acordeonero Infantil, Juvenil y Aficionado, Acordeonera Menor y Mayor, Piqueria Infantil y Adulto, canción inédita y, quizás la más anhelada, Rey Profesional.
Sin embargo, cada concursante no llega solo a las presentaciones, es un largo camino que recorren junto a sus familiares, profesores y amigos para estar en las tarimas. Muchos durante todo un año realizan diferentes actividades como venta de pasteles, rifas, bingos, entre otras, para poder costear los gastos y asistir a la capital del vallenato, esto incluye pasajes, comidas, hoteles, camisetas, gorras, pendones y todo lo que se requiera.
Este año en la versión 56 del Festival Vallenato en homenaje al maestro Luis Enrique Martínez, una vez más participan los niños y jóvenes de la escuela de música Amigos del Arte, oriundos de Turbaco y Arjona, Bolívar, dirigidos por el profesor Jaime Arrieta.
Contaron que los padres de familia son organizados para durante todo un año y reuniendo el dinero suficiente para estar los días que duran las competencias y que a los participantes no les falte nada y se sientan cómodos.
“Llevamos más de 30 años de estar participando en el Festival a través de la escuela ya con varios reyes como Yosimar Rodríguez y otros. Los padres de familia son los que se encargan de toda la logística; no hemos tenido apoyo de la Alcaldía de Arjona”, dijo el profesor Jaime Arrieta.
La escuela Amigos del Arte trajo para este certamen participantes en las categorías de acordeón infantil, juvenil, aficionado y profesional.
Otra de las familias que se preparó con recursos propios fue la de Andrés Camilo Escalante Cermeño, oriundos de Barranquilla, quienes con esfuerzo están apoyando a este joven en la categoría juvenil. Sus padres Andrés David Escalante y Kety Cermeño, sin dejar a un lado a su abuela Candy Barrios Ortega, quien contó que al ver el talento de su nieto no dudó en aportar los recursos necesarios.
En este concurso participa Douglas Jefrey González Bonilla, llegó desde Musa, Boyacá, acompañado de su familia, principalmente de su padre quien ha sido un pilar en todo este proceso para llegar a coronarse Rey Vallenato Juvenil. Recorrieron más de 30 horas para llegar a Valledupar por tercera vez a la competencia.
“Venimos en carro recorriendo un largo camino, ha sido ir a un lado y otro recogiendo fondos para traerlo a participar porque no es fácil sacar 10 millones de pesos y traer al pelao a participar, vengo porque sé que tengo un buen muchacho y tiene talento con apenas 15 años. Hace cuatro años y medio noté que tenía la chispa para el acordeón, compré el instrumento para mí, yo no pude aprenderlo y lo hizo él. El apoyo ha sido toda la familia y todo mi pueblo Musa”, dijo Milton González, padre de Douglas.
En este concurso se ven comitivas de todos los participantes quienes los apoyan en cada presentación con pitos, arengas y aplausos, no solo a los acordeoneros sino también a cajeros, guacharaqueros y cantantes.
REDACCIÓN/EL PILÓN
Los participantes son apoyados por sus familiares y amigos en cada presentación.
Como todos los años en el Festival de la Leyenda Vallenata se inscriben talentosos participantes que buscan alcanzar una corona de Rey Vallenato en alguna de las categorías. Acordeonero Infantil, Juvenil y Aficionado, Acordeonera Menor y Mayor, Piqueria Infantil y Adulto, canción inédita y, quizás la más anhelada, Rey Profesional.
Sin embargo, cada concursante no llega solo a las presentaciones, es un largo camino que recorren junto a sus familiares, profesores y amigos para estar en las tarimas. Muchos durante todo un año realizan diferentes actividades como venta de pasteles, rifas, bingos, entre otras, para poder costear los gastos y asistir a la capital del vallenato, esto incluye pasajes, comidas, hoteles, camisetas, gorras, pendones y todo lo que se requiera.
Este año en la versión 56 del Festival Vallenato en homenaje al maestro Luis Enrique Martínez, una vez más participan los niños y jóvenes de la escuela de música Amigos del Arte, oriundos de Turbaco y Arjona, Bolívar, dirigidos por el profesor Jaime Arrieta.
Contaron que los padres de familia son organizados para durante todo un año y reuniendo el dinero suficiente para estar los días que duran las competencias y que a los participantes no les falte nada y se sientan cómodos.
“Llevamos más de 30 años de estar participando en el Festival a través de la escuela ya con varios reyes como Yosimar Rodríguez y otros. Los padres de familia son los que se encargan de toda la logística; no hemos tenido apoyo de la Alcaldía de Arjona”, dijo el profesor Jaime Arrieta.
La escuela Amigos del Arte trajo para este certamen participantes en las categorías de acordeón infantil, juvenil, aficionado y profesional.
Otra de las familias que se preparó con recursos propios fue la de Andrés Camilo Escalante Cermeño, oriundos de Barranquilla, quienes con esfuerzo están apoyando a este joven en la categoría juvenil. Sus padres Andrés David Escalante y Kety Cermeño, sin dejar a un lado a su abuela Candy Barrios Ortega, quien contó que al ver el talento de su nieto no dudó en aportar los recursos necesarios.
En este concurso participa Douglas Jefrey González Bonilla, llegó desde Musa, Boyacá, acompañado de su familia, principalmente de su padre quien ha sido un pilar en todo este proceso para llegar a coronarse Rey Vallenato Juvenil. Recorrieron más de 30 horas para llegar a Valledupar por tercera vez a la competencia.
“Venimos en carro recorriendo un largo camino, ha sido ir a un lado y otro recogiendo fondos para traerlo a participar porque no es fácil sacar 10 millones de pesos y traer al pelao a participar, vengo porque sé que tengo un buen muchacho y tiene talento con apenas 15 años. Hace cuatro años y medio noté que tenía la chispa para el acordeón, compré el instrumento para mí, yo no pude aprenderlo y lo hizo él. El apoyo ha sido toda la familia y todo mi pueblo Musa”, dijo Milton González, padre de Douglas.
En este concurso se ven comitivas de todos los participantes quienes los apoyan en cada presentación con pitos, arengas y aplausos, no solo a los acordeoneros sino también a cajeros, guacharaqueros y cantantes.
REDACCIÓN/EL PILÓN