Reflexiones de Tío Chiro y Tío Nan Por: Aquilino Cotes Zuleta Transcribo hoy la tertulia que tuvieron mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan, con motivo del foro sobre Escalona que se desarrolló en Valledupar la semana anterior. “Yo no entiendo por qué tuvimos que esperar que se murieran Luís Enrique Martínez, “Colacho” Mendoza, […]
Reflexiones de Tío Chiro y Tío Nan
Por: Aquilino Cotes Zuleta
Transcribo hoy la tertulia que tuvieron mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan, con motivo del foro sobre Escalona que se desarrolló en Valledupar la semana anterior.
“Yo no entiendo por qué tuvimos que esperar que se murieran Luís Enrique Martínez, “Colacho” Mendoza, “El Debe” López, “Alejo” Durán, Freddy Molina, Jaime Molina, Octavio Daza, “Juancho” Rois, Emiliano Zuleta Baquero, “Toño” Salas, “Poncho” Cotes, Rafael Orozco, Rafael Escalona Martínez y otro puñado más de músicos para brindarles homenajes”, expresó Tío Chiro.
“Cada vez que esa desafortunada situación ocurre, sociólogos, antropólogos, investigadores, sicólogos, vallenatologos (pido excusa a mis estudiantes por el término), escritores, filólogos, etc., llegan de todas partes a Valledupar a disertar ponencias de los cantautores: de sus cantos, de sus notas, de sus aires o melodías musicales y de sus narrativas literarias”, agregó Tío Nan.
“Entonces pasa lo que pasa, lo digo porque muchos no entienden que Emiliano Zuleta Baquero era hermano de “Toño” Salas, porque sus apellidos no son iguales (hijos de la Vieja Sara) o quedan desconcertados porque el papá de “El Cocha” Molina era Arturo Molina hermano de Evaristo Gutiérrez. “El Cocha” debería ser Gutiérrez, primo hermano del compositor Gustavo Gutiérrez Cabello”, aseguró Tío Chiro.
“Qué bueno sería tener aquí a nuestro amadísimo cronista costeño Alberto Salcedo Ramos, disertando sobre la obra de Leandro Díaz; al “Turco” Pavajeau conferenciando sobre “Poncho” Zuleta; a Félix Carrillo Hinojoza exponiendo sus escritos sobre Diomedes Díaz, a Ernesto Maccausland narrando sus crónicas sobre Jorge Oñate; al Decano de la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional Fabián Sanabria, entregando el contenido sociológico de la obra de Calixto Ochoa y a Darío Pavajeau Molina contando las anécdotas de Emilianito Zuleta Díaz y “Chema” Ramos”, precisó Tío Nan.
“Nos corresponde a nosotros crear un frente común para resarcir a cada uno de los músicos vallenatos que están tejiendo la historia de un folclor que pronto será primero en el continente. Tenemos que recoger sus memorias en vida”, exclamó Tío Chiro.
“Resaltamos que la Universidad Popular del Cesar en la Escuela de Bellas lidere, a instancia de la Fundación Festival Vallenato, un foro sobre Escalona, el cultor de la música vallenata más importante libra por libra”, dijo Tío Nan.
“Fue un foro lleno de mucha emotividad, de júbilos y felicidades. Con un escenario repleto de lo más granado del folclor tanto conferenciantes como espectadores, con temas académicos e informativos sobre Escalona. Fue acogedor estar ahí”, añadió Tío Chiro.
“El Decano de la Facultad de Bellas Artes y Folclor de la Universidad Popular del Cesar, Efraín Quintero Molina, logró que cientos de personas pudieran sentir en carne propia la existencia material y espiritual de Rafael Escalona con sus canciones y sus expresiones, se plantearon innumerables contenidos de su obra”, asintió Tío Nan.
“Oiga compadre, lo que reclamamos es que los homenajes y los foros sobre los cantautores vallenatos se hagan con ellos vivos, para que sean ellos mismos participes y cultivadores del patrimonio musical que tenemos”, aclaró Tío Chiro.
“En un homenaje en vida le hubiésemos preguntado a Escalona por qué sus apellidos no eran Lavarcés Martínez, en vez de Escalona Martínez. Estoy seguro, hubiera contado que sus abuelos maternos y paternos fueron: José Sebastian Martínez Daza y Rosa Manuela Celedón, y Francisco Lavarcés y Justa Escalona. Pero su papá Clemente se puso los apellidos Escalona Lavarcés. Su mamá era Margarita Martínez Celedón, como me lo contó el docente universitario Enrique Meza Daza en un árbol genealógico que él elaboró denominado “Escalona un Daza por antonomasia” construido del libro “Aquel Corral de Piedra”, escrito por el Ingeniero Jorge González Cuello”, Afirmó Tío Chiro.
“Qué bueno que él (Escalona) nos hubiese contado –en un foro- la verdad sobre “La Brasilera” y su visión sobre la música vallenata en el año 2030”, concluyó Tío Nan. Hasta la próxima semana.
Reflexiones de Tío Chiro y Tío Nan Por: Aquilino Cotes Zuleta Transcribo hoy la tertulia que tuvieron mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan, con motivo del foro sobre Escalona que se desarrolló en Valledupar la semana anterior. “Yo no entiendo por qué tuvimos que esperar que se murieran Luís Enrique Martínez, “Colacho” Mendoza, […]
Reflexiones de Tío Chiro y Tío Nan
Por: Aquilino Cotes Zuleta
Transcribo hoy la tertulia que tuvieron mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan, con motivo del foro sobre Escalona que se desarrolló en Valledupar la semana anterior.
“Yo no entiendo por qué tuvimos que esperar que se murieran Luís Enrique Martínez, “Colacho” Mendoza, “El Debe” López, “Alejo” Durán, Freddy Molina, Jaime Molina, Octavio Daza, “Juancho” Rois, Emiliano Zuleta Baquero, “Toño” Salas, “Poncho” Cotes, Rafael Orozco, Rafael Escalona Martínez y otro puñado más de músicos para brindarles homenajes”, expresó Tío Chiro.
“Cada vez que esa desafortunada situación ocurre, sociólogos, antropólogos, investigadores, sicólogos, vallenatologos (pido excusa a mis estudiantes por el término), escritores, filólogos, etc., llegan de todas partes a Valledupar a disertar ponencias de los cantautores: de sus cantos, de sus notas, de sus aires o melodías musicales y de sus narrativas literarias”, agregó Tío Nan.
“Entonces pasa lo que pasa, lo digo porque muchos no entienden que Emiliano Zuleta Baquero era hermano de “Toño” Salas, porque sus apellidos no son iguales (hijos de la Vieja Sara) o quedan desconcertados porque el papá de “El Cocha” Molina era Arturo Molina hermano de Evaristo Gutiérrez. “El Cocha” debería ser Gutiérrez, primo hermano del compositor Gustavo Gutiérrez Cabello”, aseguró Tío Chiro.
“Qué bueno sería tener aquí a nuestro amadísimo cronista costeño Alberto Salcedo Ramos, disertando sobre la obra de Leandro Díaz; al “Turco” Pavajeau conferenciando sobre “Poncho” Zuleta; a Félix Carrillo Hinojoza exponiendo sus escritos sobre Diomedes Díaz, a Ernesto Maccausland narrando sus crónicas sobre Jorge Oñate; al Decano de la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional Fabián Sanabria, entregando el contenido sociológico de la obra de Calixto Ochoa y a Darío Pavajeau Molina contando las anécdotas de Emilianito Zuleta Díaz y “Chema” Ramos”, precisó Tío Nan.
“Nos corresponde a nosotros crear un frente común para resarcir a cada uno de los músicos vallenatos que están tejiendo la historia de un folclor que pronto será primero en el continente. Tenemos que recoger sus memorias en vida”, exclamó Tío Chiro.
“Resaltamos que la Universidad Popular del Cesar en la Escuela de Bellas lidere, a instancia de la Fundación Festival Vallenato, un foro sobre Escalona, el cultor de la música vallenata más importante libra por libra”, dijo Tío Nan.
“Fue un foro lleno de mucha emotividad, de júbilos y felicidades. Con un escenario repleto de lo más granado del folclor tanto conferenciantes como espectadores, con temas académicos e informativos sobre Escalona. Fue acogedor estar ahí”, añadió Tío Chiro.
“El Decano de la Facultad de Bellas Artes y Folclor de la Universidad Popular del Cesar, Efraín Quintero Molina, logró que cientos de personas pudieran sentir en carne propia la existencia material y espiritual de Rafael Escalona con sus canciones y sus expresiones, se plantearon innumerables contenidos de su obra”, asintió Tío Nan.
“Oiga compadre, lo que reclamamos es que los homenajes y los foros sobre los cantautores vallenatos se hagan con ellos vivos, para que sean ellos mismos participes y cultivadores del patrimonio musical que tenemos”, aclaró Tío Chiro.
“En un homenaje en vida le hubiésemos preguntado a Escalona por qué sus apellidos no eran Lavarcés Martínez, en vez de Escalona Martínez. Estoy seguro, hubiera contado que sus abuelos maternos y paternos fueron: José Sebastian Martínez Daza y Rosa Manuela Celedón, y Francisco Lavarcés y Justa Escalona. Pero su papá Clemente se puso los apellidos Escalona Lavarcés. Su mamá era Margarita Martínez Celedón, como me lo contó el docente universitario Enrique Meza Daza en un árbol genealógico que él elaboró denominado “Escalona un Daza por antonomasia” construido del libro “Aquel Corral de Piedra”, escrito por el Ingeniero Jorge González Cuello”, Afirmó Tío Chiro.
“Qué bueno que él (Escalona) nos hubiese contado –en un foro- la verdad sobre “La Brasilera” y su visión sobre la música vallenata en el año 2030”, concluyó Tío Nan. Hasta la próxima semana.