Este 23 de abril se conmemoraron  24 años de la primera masacre en la vereda El Toco, cuando en 1997 paramilitares del frente Juan Andrés Álvarez del Bloque Norte de las Autodefensas, comandado por Jhon Jairo Esquivel Cuadrado, alias ‘El Tigre’,  incursionaron en esta población perteneciente al corregimiento Los Brasiles, jurisdicción del municipio de San Diego, al norte del Cesar, y asesinaron a dos líderes de esta comunidad que adelantaban acciones para dignificar su territorio; al mismo tiempo ordenaron desocupar las tierras, produciendo el desplazamiento forzado.

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Casi un mes después del mismo año, el 19 de mayo, los paramilitares asesinaron a ocho campesinos, identificados como: Víctor Plata, José Yance, Daniel Plata, Hernán Pinedo, Joaquín Gaviria, Lenis Álvarez Mejía, Edgar Vásquez Mejía Barona y Daniel Quintana.

Casi todas las 80 familias que habitaban en El Toco  tuvieron que salir de sus casas huyendo del conflicto armado.

Un líder de esta comunidad, Miguel Antonio Serna, recordó que el día de los hechos en la comunidad hubo un caos total, a todos por general los trataron como guerrilleros y subversivos, sin saber ellos qué grupo era el que los estaba atacando. Hasta las 8:00 de la mañana del siguiente día se enteraron que eran miembros de las AUC.

“Estos actos de violencia dividieron en dos la historia de El Toco.  Nosotros llegamos a este lugar un 12 de mayo de 1991, empezamos a trabajar por la tierra, logramos dos escuelas, un puesto de salud, un territorio con tejido social con 80 familias, luego quedaron 50 y posteriormente 25. Entonces ese 23 de abril esperando atención del Estado nos llegó la guerra“, dijo Serna.

Manifestó que luego de todo este tiempo siguen esperando una atención integral por parte del Estado, en la que se les dignifique su calidad de vida, partiendo desde la restitución de tierras y la dignificación de los derechos humanos.

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“Seguimos pasando necesidad, ya no por culpa del conflicto armado sino por la institucionalidad. Estamos recordando la injusticia hacia una comunidad que se hizo sola en un territorio de logros por una vía de hecho.  Llevamos 24 años demostrando al país que no somos agresivos“, refirió el líder social.

Asimismo  dijo que seguirán pidiendo justicia con verdad, con reconocimiento integral de las víctimas desde un escenario de paz.

Estas masacres golpearon de manera agresiva a todos los habitantes de Los Brasiles, quienes se vieron forzados a salir de sus tierras; en ese entonces solo quedaron en todo el corregimiento cerca de 100 familias que se resistieron a salir de su territorio, quedando un ‘pueblo fantasma’.

POR REDACCIÓN EL PILÓN.