Curumaní, municipio del centro del Cesar, impulsa la modernización de su infraestructura de servicios esenciales con la construcción de siete obras de saneamiento básico en la cabecera municipal y sus siete corregimientos.
Gracias a la Gobernación del Cesar se entregó la Línea de Conducción en la cabecera municipal, con la instalación de 405 kilómetros de tuberías que garantizan una presión adecuada en el suministro de agua potable en las zonas altas del municipio. Esta obra tuvo una inversión de más de $3.500 millones.
De la mano de la Empresa de Servicios Públicos Acuacur, actualmente se ejecuta la sectorización y optimización del sistema de acueducto, que contempla la instalación de 23.976 metros de tuberías, cinco macro medidores y 7.613 micro medidores.
Asimismo, se invierten $1.300 millones del Sistema General de Regalías en la optimización y reposición del alcantarillado sanitario de la cabecera municipal, además de la construcción de un tanque elevado y un pozo subterráneo en el corregimiento de San Sebastián, con una inversión de más $2.600 millones.
Los corregimientos de Curumaní avanzan
El gobierno del alcalde Hermes Martínez Úrsula también ha puesto su mirada en San Roque, el corregimiento más grande del municipio y el segundo más extenso del departamento. Allí se construyó el Sistema de Tratamiento de Aguas Residuales con una inversión superior a los $2.100 millones.
Esta obra, que cumple con altos estándares de calidad y sostenibilidad, contribuirá a la salud pública al reducir el riesgo de enfermedades por manejo inadecuado de aguas residuales, además de mejorar el entorno para sus habitantes.
En la zona rural del municipio, específicamente en los corregimientos de Sabanagrande y Champán, ubicados en el sector conocido como los países bajos, se ejecutan dos proyectos de infraestructura que permitirán a estas comunidades contar con un suministro de agua potable continuo y de óptima calidad. La inversión en estas obras supera los $2.346 millones.
















