Por múltiples situaciones en el día a día se pueden llegar a ocasionar dolores cervicales. Expertos en el tema insisten en la importancia de hacer pausas activas al menos cada 2 horas con el fin de estirar los músculos.

Ya sea en la oficina o en casa es recomendable levantarse para estirar las piernas, andar un poco y realizar algunos ejercicios de estiramientos como los siguientes:

Girar la cabeza: se recomienda hacerlo lentamente, a un lado y luego a otro.
Elevar los hombros: encójalos y vuelva a bajarlos.
Intenta juntar los omoplatos: el objetivo es llevar los hombros hacia atrás.
Levantar un brazo y dejarlo caer por detrás de la cabeza: la idea de este movimiento es dejar que la mano se pose en las cervicales.

Estirar bien los brazos por delante: estire los brazos a la altura del pecho, con los dedos de ambas manos enlazados.
Siéntese en una silla y doble una pierna sobre la otra: se recomienda que al estar en dicha posición se gire el tronco, el cuello y la cabeza en sentido opuesto a la pierna que está encima.

Siéntese con ambos pies en el suelo y las piernas juntas: en esta posición deberá doblar el tronco sobre sus muslos y tocar con los dedos las puntas de los pies.
Además de los anteriores ejercicios en cada pausa que pueda realizar es importante adoptar posturas saludables en el día a día para evitar dolores musculares.

Algunos consejos para ello son:
Es indispensable que al caminar apriete un poco el abdomen y eleve ligeramente el pecho, así logrará llevar la espalda recta de forma natural.

Cuando se encuentre de pie: esto lo podrá realizar mientras está a la espera en una fila, por ejemplo, separe un poco los pies, mantenga las rodillas ligeramente flexionadas y reparta el peso entre las dos piernas.

Al momento de dormir: la mejor posición para una dormida correctamente es de lado y con las rodillas flexionadas. Si suele dormir boca arriba, coloque una almohada debajo de las rodillas para que la zona lumbar no sufra.

Cuando se encuentre sentado: en dicha posición evite en lo posible estar inclinado hacia delante, sobre la mesa, ni sentado en el borde de la silla y tirado hacia atrás. La postura correcta y saludable para estar sentado es apoyar bien la espalda en el respaldo de la silla, mantener la cabeza erguida y situar las rodillas un poco más altas que la cadera utilizando un reposapiés.