La Secretaría de Infraestructura Departamental declaró que no recibirá el escenario hasta tanto no se ha terminado por el consorcio GMP construcciones y Grupo Capitol.
Lo que inició como un sueño pasó a ser una pesadilla para el deporte en el Cesar. El estadio de fútbol Armando Maestre Pavajeau está a punto de ser entregado por el consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol a la Gobernación aunque la estructura presenta fallas que quedaron al descubierto con el apagón de las luminarias el jueves 30 de julio, así como la filtración de aguas lluvias en las tribunas durante el partido el domingo anterior.
Los más de 50.000 millones de pesos destinados para la construcción de esta mega obra en el gobierno de Luis Alberto Monsalvo no han sido suficientes para que Valledupar cuente con un escenario de fútbol de talla nacional e internacional.
El 27 de diciembre de año 2013, Consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol, conformado por Grupo Empresarial Capitol (40 %), Estela María Coneo Piñerez (35 %) y José Francisco Hernández Madera (25 %), ganó la licitación pública hecha por la Gobernación del Cesar para la construcción, ampliación y/o remodelación del estadio de fútbol Armando Maestre Pavajeau. Fue una obra inicialmente contratada por 33 mil 386 millones de pesos, con un tiempo de 18 meses de ejecución. La fecha de inicio del contrato es del 20 de enero de 2014 y en octubre de ese mismo año la administración departamental le adicionó recursos por el orden de 16 mil 671 millones de pesos, es decir que los recursos ascendieron a más de 50 mil 016 millones de pesos.
La obra debía ser entregada en julio de 2015 porque Consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol pidió dos prórrogas; la primera de dos meses y una última de 30 días. En total el contrato tenía que culminarse en 21 meses, que contando desde enero de 2014, la fecha estipulada era el 27 de noviembre de 2015 (hubo además una suspensión por el Sudamericano Sub-15 desarrollado del 21 de noviembre al 6 de diciembre de 2015).
Hoy el escenario deportivo no ha sido entregado por los constructores a la Secretaría de Infraestructura del Cesar, que ayer visitó la estructura y entregó un diagnóstico, no muy alentador, cuando se habló que a partir del lunes 8 de agosto iniciará el proceso de entrega de las obras.
El objeto inicial del contrato hablaba de capacidad para cinco mil espectadores en la gradería occidental del estadio, algo que consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol prometió ampliar a 10 mil aficionados con la adición presupuestal de $16.671.642.643 que hizo la Gobernación del Cesar.
“Las cláusulas de la adición dicen que el contratista le presentó al gobierno departamental la posibilidad de que se podía llegar con la primera etapa a 10.000 espectadores. Encontramos que existe una obra desfinanciada como todas las analizadas en el Cesar como son el hospital de Aguachica, la Universidad Nacional y otros hospitales que se están construyendo. Tenemos alrededor de 23 obras que vienen con fallas para la terminación”, declaró el diputado Julio Casadiegos Navarro.
El representante del partido Cambio Radical en la Asamblea del Cesar, aseguró que luego de una investigación a las obras mencionadas anteriormente encontró a los contratistas con la respuesta de tener desfinanciación para culminarlas.
“No quiero imaginarme lo que se viene comentando en todos los rincones del departamento, que estábamos frente a un gobierno que solicitaba o trabajaba a través de las coimas y eso era lo que desfinanciaba a los contratistas. Todas las obras tienen fallas, atrasos, prorrogas y adiciones. Nunca vimos a una Secretaría de Infraestructura realizando el debido control”, acotó Casadiegos Navarro.
Adicionalmente el diputado advirtió que el contrato para intervenir el estadio de fútbol tiene vicios de corrupción porque “el contrato lo proyectó José Julián Vásquez Buelvas, quien es conocido como el zar de las licitaciones públicas en la costa Caribe”.
EL PILÓN encontró que a José Julián Vásquez Buelvas sobre quien hace referencia el diputado Julio Casadiegos, la Procuraduría General de la Nación lo ha vinculado con posibles irregularidades presentadas en las etapas precontractual y contractual de cinco procesos licitatorios suscritos en el 2010 en el departamento del Bolívar, en su calidad de director del Departamento Administrativo Jurídico. Asimismo fue sancionado a 11 años, en fallo de primera instancia (2014), por incrementar injustificadamente el patrimonio de un tercero en la Gobernación de Bolívar en su condición de gobernador (e).
Falencias en el fluido eléctrico y la lluvia que traspasó la cubierta de la tribuna occidental fueron puntos que generaron molestia entre los aficionados que asisten al estadio Armando Maestre Pavajeau.
Primero fue en el partido contra Independiente Medellín, el jueves 30 de julio, por la Copa Águila; en cinco oportunidades el estadio quedó a oscuras y el juez del partido prolongó el tiempo más de 45 minutos. Finalmente, el domingo anterior las personas que regresaron a la gradería presenciaron la falta de garantías que hoy tiene el principal escenario deportivo del departamento al mojarse ellos, ver a las cabinas para locutores, camerinos y la mayoría de sitios cerrados en el estadio llenos de agua.
En mayo del año anterior, el Departamento Nacional de Planeación en cabeza del ingeniero Fabián Mahecha aseguró que la obra cumplía con los requisitos impuestos y con los plazos previstos. Para esa fecha tenía un avance físico de 41 % y al 30 de marzo de un 43 %.
La remodelación del Armando Maestre consiste en dos etapas. La primera de ellas incluye: construcción cancha de juego completa con gramado, sistema de riego y drenaje, construcción de tribuna occidental hasta el nivel de placa acceso a preferencial 14.56 metros; zona de camerinos a y b, oficina para comisarios de partidos, corredor circulación interna, cuarto de árbitros, control dopaje, sala primeros auxilios, zona de mercadotécnica y área de circulación, zona de circulación y acceso a tribuna preferencial, baterías sanitarias, subestación eléctrica, dos ascensores, dos escaleras auxiliares en contrato y seis escalera metálicas de acceso a graderías, áreas exteriores con obras de urbanismo que incluyen plazoleta de acceso en adoquín de concreto, zona de taquillas con sus torniquetes en acero inoxidable, iluminación interna y externa, paisajismo (160 árboles y contenedores de raíces), cerramiento exterior, cubierta en lona soportada en estructura metálica, cubierta para los espectadores, asientos individuales para los espectadores, seguridad estructural, sala de control de seguridad, sistema de vigilancia por circuito cerrado, sala de conferencias de prensa y salas de primeros auxilios para el público.
“Esperamos se entregue la obra y eso no ha pasado, evidentemente hay cosas por mejorar. Entiendo que el contratista como la gobernación se sentarán a analizar lo que ha pasado”, sostuvo el presidente de Valledupar Fútbol Club, José Antonio Larrazábal.
El dirigente en diálogo telefónico con este medio explicó que el gobernador Francisco Ovalle Angarita tiene la idea de que el equipo o a través de la fundación Ponte la Camiseta se coordine la administración del estadio.
Una vez la comunidad de Valledupar criticó la obra del estadio de fútbol, la Gobernación del Cesar por medio de la Secretaría de Infraestructura visitó el escenario y entregó una rueda de prensa.
El secretario de Infraestructura, Omar Maestre Vélez, dijo que el tema de fluido eléctrico está basado en una planta de la empresa Stewart &-Stevenson que presentó problemas el jueves anterior.
“La empresa trajo el software para mirar con un computador las posibles fallas o deficiencias de la planta. Stewart &-Stevenson es una empresa conocida, no es de garaje y por eso están aquí. Ellos dieron unas recomendaciones de tipo constructivo y técnico; el interventor ha pedido una prueba de 24 horas para la planta que se hará este sábado con presencia de los medios de comunicación y la comunidad”, indicó Maestre Vélez.
El funcionario además explicó que los operarios advirtieron un “atrapamiento de gases mecánicos” que generaba recalentamiento en la planta eléctrica y por eso instalaran un ducto de ventilación. En caso de no tener respuesta positiva, Maestre afirmó que no recibirán el aparato electrónico.
Con respecto al avance de las obras, el funcionario aseguró que están terminadas en un cien por ciento y el lunes 8 de agosto comenzarán a recibir la primera fase que financiada con recursos provenientes de las regalías del carbón.
“Las prórrogas ya vencieron, estamos en el proceso de sincronización y revisión, hay otros detalles como el de la cubierta y por eso la administración departamental decidió no recibirla hasta tanto ellos (contratista) no hagan los ajustes pertinentes del caso. Cuando tengamos la satisfacción al cien por ciento entraremos a recibirla”, argumentó Omar Maestre.
El secretario de Infraestructura tocó también el tema de un posible saboteo en la parte del contratista. “Ellos deben aclarar esa situación porque cuando el río suena algo trae”.
Agregó que el proyecto está blindado por pólizas de cumplimiento, calidad, prestaciones, anticipo y de estabilidad, esta última tiene un tiempo determinado de cinco años desde el recibido de la obra y hasta ahora la Gobernación no la ha recibido.
“La obra está terminada, ahora iniciará la entrega y los ajustes, es una obra muy compleja con casi 70.000 millones de pesos invertidos, son recursos públicos y tenemos que garantizar la inversión, existen pólizas de por medio. La ciudadanía puede estar tranquila porque la Gobernación no va a recibir una obra que no cumpla con los estándares de calidad y las especificaciones del caso”, concluyó.
El representante de la empresa Stewart & Stevenson, Antonio De la Hoz, dijo a EL PILÓN que un técnico especialista estudiaba la planta eléctrica para determinar las causas de los apagones el pasado jueves 30 de julio.
“Hemos mirado que hay un ambiente de encerramiento que no estaba cuando llegó el equipo a Valledupar, hemos analizado la opción de hacer un direccionamiento de aire caliente hacia las afueras del estadio porque el equipo se protege cuando tiene una falla pequeña (…) Venimos a dar soluciones, Stewart &-Stevenson vende equipos nuevos, por ningún motivo los que comercializamos son de segunda o repontecializados. Estamos haciendo las revisiones y si el problema lo tiene la planta la compañía responde. Estamos aquí el tiempo que se necesite”, indicó De la Hoz quien recalcó que la compañía tiene 110 años en el mercado y 35 de ellos en Colombia.
24 de septiembre de 2013
27 de diciembre de 2013 (Consorcio GMP construcciones y grupo Capitol)
29 de octubre de 2014
Tres = tres meses
$50.016.816.967 pesos
Por Carlos Mario Jiménez
[email protected]
La Secretaría de Infraestructura Departamental declaró que no recibirá el escenario hasta tanto no se ha terminado por el consorcio GMP construcciones y Grupo Capitol.
Lo que inició como un sueño pasó a ser una pesadilla para el deporte en el Cesar. El estadio de fútbol Armando Maestre Pavajeau está a punto de ser entregado por el consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol a la Gobernación aunque la estructura presenta fallas que quedaron al descubierto con el apagón de las luminarias el jueves 30 de julio, así como la filtración de aguas lluvias en las tribunas durante el partido el domingo anterior.
Los más de 50.000 millones de pesos destinados para la construcción de esta mega obra en el gobierno de Luis Alberto Monsalvo no han sido suficientes para que Valledupar cuente con un escenario de fútbol de talla nacional e internacional.
El 27 de diciembre de año 2013, Consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol, conformado por Grupo Empresarial Capitol (40 %), Estela María Coneo Piñerez (35 %) y José Francisco Hernández Madera (25 %), ganó la licitación pública hecha por la Gobernación del Cesar para la construcción, ampliación y/o remodelación del estadio de fútbol Armando Maestre Pavajeau. Fue una obra inicialmente contratada por 33 mil 386 millones de pesos, con un tiempo de 18 meses de ejecución. La fecha de inicio del contrato es del 20 de enero de 2014 y en octubre de ese mismo año la administración departamental le adicionó recursos por el orden de 16 mil 671 millones de pesos, es decir que los recursos ascendieron a más de 50 mil 016 millones de pesos.
La obra debía ser entregada en julio de 2015 porque Consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol pidió dos prórrogas; la primera de dos meses y una última de 30 días. En total el contrato tenía que culminarse en 21 meses, que contando desde enero de 2014, la fecha estipulada era el 27 de noviembre de 2015 (hubo además una suspensión por el Sudamericano Sub-15 desarrollado del 21 de noviembre al 6 de diciembre de 2015).
Hoy el escenario deportivo no ha sido entregado por los constructores a la Secretaría de Infraestructura del Cesar, que ayer visitó la estructura y entregó un diagnóstico, no muy alentador, cuando se habló que a partir del lunes 8 de agosto iniciará el proceso de entrega de las obras.
El objeto inicial del contrato hablaba de capacidad para cinco mil espectadores en la gradería occidental del estadio, algo que consorcio GMP Construcciones y Grupo Capitol prometió ampliar a 10 mil aficionados con la adición presupuestal de $16.671.642.643 que hizo la Gobernación del Cesar.
“Las cláusulas de la adición dicen que el contratista le presentó al gobierno departamental la posibilidad de que se podía llegar con la primera etapa a 10.000 espectadores. Encontramos que existe una obra desfinanciada como todas las analizadas en el Cesar como son el hospital de Aguachica, la Universidad Nacional y otros hospitales que se están construyendo. Tenemos alrededor de 23 obras que vienen con fallas para la terminación”, declaró el diputado Julio Casadiegos Navarro.
El representante del partido Cambio Radical en la Asamblea del Cesar, aseguró que luego de una investigación a las obras mencionadas anteriormente encontró a los contratistas con la respuesta de tener desfinanciación para culminarlas.
“No quiero imaginarme lo que se viene comentando en todos los rincones del departamento, que estábamos frente a un gobierno que solicitaba o trabajaba a través de las coimas y eso era lo que desfinanciaba a los contratistas. Todas las obras tienen fallas, atrasos, prorrogas y adiciones. Nunca vimos a una Secretaría de Infraestructura realizando el debido control”, acotó Casadiegos Navarro.
Adicionalmente el diputado advirtió que el contrato para intervenir el estadio de fútbol tiene vicios de corrupción porque “el contrato lo proyectó José Julián Vásquez Buelvas, quien es conocido como el zar de las licitaciones públicas en la costa Caribe”.
EL PILÓN encontró que a José Julián Vásquez Buelvas sobre quien hace referencia el diputado Julio Casadiegos, la Procuraduría General de la Nación lo ha vinculado con posibles irregularidades presentadas en las etapas precontractual y contractual de cinco procesos licitatorios suscritos en el 2010 en el departamento del Bolívar, en su calidad de director del Departamento Administrativo Jurídico. Asimismo fue sancionado a 11 años, en fallo de primera instancia (2014), por incrementar injustificadamente el patrimonio de un tercero en la Gobernación de Bolívar en su condición de gobernador (e).
Falencias en el fluido eléctrico y la lluvia que traspasó la cubierta de la tribuna occidental fueron puntos que generaron molestia entre los aficionados que asisten al estadio Armando Maestre Pavajeau.
Primero fue en el partido contra Independiente Medellín, el jueves 30 de julio, por la Copa Águila; en cinco oportunidades el estadio quedó a oscuras y el juez del partido prolongó el tiempo más de 45 minutos. Finalmente, el domingo anterior las personas que regresaron a la gradería presenciaron la falta de garantías que hoy tiene el principal escenario deportivo del departamento al mojarse ellos, ver a las cabinas para locutores, camerinos y la mayoría de sitios cerrados en el estadio llenos de agua.
En mayo del año anterior, el Departamento Nacional de Planeación en cabeza del ingeniero Fabián Mahecha aseguró que la obra cumplía con los requisitos impuestos y con los plazos previstos. Para esa fecha tenía un avance físico de 41 % y al 30 de marzo de un 43 %.
La remodelación del Armando Maestre consiste en dos etapas. La primera de ellas incluye: construcción cancha de juego completa con gramado, sistema de riego y drenaje, construcción de tribuna occidental hasta el nivel de placa acceso a preferencial 14.56 metros; zona de camerinos a y b, oficina para comisarios de partidos, corredor circulación interna, cuarto de árbitros, control dopaje, sala primeros auxilios, zona de mercadotécnica y área de circulación, zona de circulación y acceso a tribuna preferencial, baterías sanitarias, subestación eléctrica, dos ascensores, dos escaleras auxiliares en contrato y seis escalera metálicas de acceso a graderías, áreas exteriores con obras de urbanismo que incluyen plazoleta de acceso en adoquín de concreto, zona de taquillas con sus torniquetes en acero inoxidable, iluminación interna y externa, paisajismo (160 árboles y contenedores de raíces), cerramiento exterior, cubierta en lona soportada en estructura metálica, cubierta para los espectadores, asientos individuales para los espectadores, seguridad estructural, sala de control de seguridad, sistema de vigilancia por circuito cerrado, sala de conferencias de prensa y salas de primeros auxilios para el público.
“Esperamos se entregue la obra y eso no ha pasado, evidentemente hay cosas por mejorar. Entiendo que el contratista como la gobernación se sentarán a analizar lo que ha pasado”, sostuvo el presidente de Valledupar Fútbol Club, José Antonio Larrazábal.
El dirigente en diálogo telefónico con este medio explicó que el gobernador Francisco Ovalle Angarita tiene la idea de que el equipo o a través de la fundación Ponte la Camiseta se coordine la administración del estadio.
Una vez la comunidad de Valledupar criticó la obra del estadio de fútbol, la Gobernación del Cesar por medio de la Secretaría de Infraestructura visitó el escenario y entregó una rueda de prensa.
El secretario de Infraestructura, Omar Maestre Vélez, dijo que el tema de fluido eléctrico está basado en una planta de la empresa Stewart &-Stevenson que presentó problemas el jueves anterior.
“La empresa trajo el software para mirar con un computador las posibles fallas o deficiencias de la planta. Stewart &-Stevenson es una empresa conocida, no es de garaje y por eso están aquí. Ellos dieron unas recomendaciones de tipo constructivo y técnico; el interventor ha pedido una prueba de 24 horas para la planta que se hará este sábado con presencia de los medios de comunicación y la comunidad”, indicó Maestre Vélez.
El funcionario además explicó que los operarios advirtieron un “atrapamiento de gases mecánicos” que generaba recalentamiento en la planta eléctrica y por eso instalaran un ducto de ventilación. En caso de no tener respuesta positiva, Maestre afirmó que no recibirán el aparato electrónico.
Con respecto al avance de las obras, el funcionario aseguró que están terminadas en un cien por ciento y el lunes 8 de agosto comenzarán a recibir la primera fase que financiada con recursos provenientes de las regalías del carbón.
“Las prórrogas ya vencieron, estamos en el proceso de sincronización y revisión, hay otros detalles como el de la cubierta y por eso la administración departamental decidió no recibirla hasta tanto ellos (contratista) no hagan los ajustes pertinentes del caso. Cuando tengamos la satisfacción al cien por ciento entraremos a recibirla”, argumentó Omar Maestre.
El secretario de Infraestructura tocó también el tema de un posible saboteo en la parte del contratista. “Ellos deben aclarar esa situación porque cuando el río suena algo trae”.
Agregó que el proyecto está blindado por pólizas de cumplimiento, calidad, prestaciones, anticipo y de estabilidad, esta última tiene un tiempo determinado de cinco años desde el recibido de la obra y hasta ahora la Gobernación no la ha recibido.
“La obra está terminada, ahora iniciará la entrega y los ajustes, es una obra muy compleja con casi 70.000 millones de pesos invertidos, son recursos públicos y tenemos que garantizar la inversión, existen pólizas de por medio. La ciudadanía puede estar tranquila porque la Gobernación no va a recibir una obra que no cumpla con los estándares de calidad y las especificaciones del caso”, concluyó.
El representante de la empresa Stewart & Stevenson, Antonio De la Hoz, dijo a EL PILÓN que un técnico especialista estudiaba la planta eléctrica para determinar las causas de los apagones el pasado jueves 30 de julio.
“Hemos mirado que hay un ambiente de encerramiento que no estaba cuando llegó el equipo a Valledupar, hemos analizado la opción de hacer un direccionamiento de aire caliente hacia las afueras del estadio porque el equipo se protege cuando tiene una falla pequeña (…) Venimos a dar soluciones, Stewart &-Stevenson vende equipos nuevos, por ningún motivo los que comercializamos son de segunda o repontecializados. Estamos haciendo las revisiones y si el problema lo tiene la planta la compañía responde. Estamos aquí el tiempo que se necesite”, indicó De la Hoz quien recalcó que la compañía tiene 110 años en el mercado y 35 de ellos en Colombia.
24 de septiembre de 2013
27 de diciembre de 2013 (Consorcio GMP construcciones y grupo Capitol)
29 de octubre de 2014
Tres = tres meses
$50.016.816.967 pesos
Por Carlos Mario Jiménez
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