Bosconia fue fundada el 20 de agosto de 1958 y, según los habitantes, se inició con una invasión en cercanías de lo que es hoy es el paso del tren de Ferrocarriles del Norte de Colombia, Fenoco. Desde dicha fecha muchos asentamientos han sido parte de la historia de este pueblo, que es epicentro de desarrollo subregional.
Después de 56 años, las invasiones siguen siendo parte del tema cultural de este municipio que se ha caracterizado por ser el punto estratégico de encuentro de cuatro vías nacionales que comunican a la Costa Caribe con el resto del país, hecho que lo convierte en un lugar llamativo tanto para el comercio como para muchas personas que llegan en busca de oportunidades.
Alrededor de 12.000 desplazados habitan en Bosconia, por lo que, según el alcalde Jorge Patiño Gómez, la población ha venido de invasión en invasión, generando una gran preocupación en las autoridades municipales y dueños de terrenos, no sólo por la necesidad de vivienda, sino porque muchos de los invasores reinciden cada vez más.

 Un total de 10 invasiones hacen parte hoy de esta población, según Rafael Torrijo Martínez, técnico de la oficina de Planeación de Bosconia, quien aclaró que en cada administración sale un grupo de ocupantes de terrenos, por lo que existen algunas a punto de legalizar y otras no, entre las que se destacan Uribe Vélez, Veinte de Mayo, Villa Hermosa, Nueva Esperanza, Villa Campestre y demás.
“Esto es un tema cultural, pero ya el municipio no puede permitir más invasión porque ya los servicios públicos colapsaron, es un tema muy delicado. Uno ve con mucha preocupación que muchas personas han sido beneficiadas con subsidios, nosotros tenemos pruebas, hay cartas de escrituras y hoy, de nuevo, están metidos en los terrenos. Me estaban diciendo que a un hombre le dimos escrituras de un lote hace un mes, pero, al parecer, lo vendió y está reclamando otro, ¿cómo le parece?, esto ya lo tienen por negocio”, afirmó el alcalde de Bosconia, Jorge Patiño Gómez.
El mandatario agregó que los dueños de los predios cumplen con la orden de hacer el encerramiento de su terreno pero son los habitantes son los que quitan los cercos para ocuparlos.
Al preguntarle al mandatario Patiño Gómez sobre cuáles son las medidas que utilizaría la Alcaldía para controlar o erradicar las invasiones en la población, respondió: “estamos construyendo 380 casas: 300 en el barrio San Jorge y 80 en el barrio Altos de Selena, que serán para vulnerables, desplazados, madres cabeza de familia y discapacitados. Nosotros no teníamos una política de vivienda, esta es la primera vez que llegan estos proyectos. Como municipio no podemos dejar que las invasiones sigan prosperando porque tenemos muchos problemas”, aseguró.
De igual modo, indicó que tocaría realizar una sensibilización con la comunidad, para hacerles ver que no se pueden hacer las cosas por las malas, que es lo que ellos pretenden hacer, que tratan de tomarse unas tierras de personas con vocación ganadera y que pagan unos impuestos.

El problema de las invasiones
A parte de la problemática social que generan las invasiones en los pueblos, las más de 10 que hacen parte de Bosconia, que tiene un promedio de más de cinco mil personas, los vulnerables y desplazados le exigen al gobierno municipal el acceso a los servicios públicos.
“Esto es un tema de nunca acabar, porque por la posición geográfica de Bosconia, en donde también se habla mucho del boom de la Ruta del Sol, del minero, entonces la gente nos llega de todas partes de Colombia y el tema de las invasiones atrae más gente necesitada de otros municipios. La gente se viene creándonos unos cordones de miseria impresionante”, aseguró el Alcalde.
El intenso verano, según la máxima autoridad, también está desplazando hacia el pueblo de Bosconia a los campesinos.
Entre las situaciones que ponen en aprieto a la Alcaldía está: que no cuenta con Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad. Los dueños de las tierras son los que deben aportar los recursos necesarios para tener a este personal.
Un desalojo revolucionario
EL PILÓN llegó a varias de las invasiones de Bosconia y en una de ellas encontró a las personas revolucionadas por el desalojo que haría la fuerza pública en presencia de los propietarios de los predios, situación que hizo paralizar el paso del tren de Fenoco.
En el lugar se encontraban alrededor de 300 personas, de las 480 que, al parecer, querían hacer parte de la invasión que se denominarían ‘Silvestre Dangond’ en honor a su propietario, que no es el cantante vallenato, pero según los habitantes es un familiar del artista.
Carlos Enrique Acevedo hizo parte de los pobladores que delimitaron los predios para ubicar sus casuchas y comenzar a edificar lo que será su vivienda por el momento, sin embargo, la rápida acción de los dueños de los terrenos se lo prohibió.
Ellos afirman “no tenemos una casa dónde vivir, estamos pobres, llevaos”, agregaron que decidieron ingresar al terreno porque estas tierras estaban llenas de maleza, abandonadas, sin cerramiento y porque se prestaban para actos delictivos.
Por su parte, el alcalde Patiño Gómez se refirió a las ayudas que solicitaba la comunidad y dijo “el Estado no puede garantizarle casa a todo el mundo y más cuando hay mucha gente que lo hace por negocio. En el Cesar hay pocos municipios que cuentan con programa de vivienda, afortunadamente Bosconia está dentro de ellos”.
Las legalizaciones
Torrijo Martínez aclaró que una de las invasiones que fue legalizada, lleva por nombre Uribe Vélez, allí se hizo una negociación con los propietarios del terreno y se logró comprar. Los habitantes de este sector de la ciudad tienen escritura. Así mismo sucedería con la del Veinte de Mayo, pero que por conflicto laboral no se ha podido finiquitar el negocio.
El funcionario aclaró que la creación de invasiones también se ocasiona por el olvido de los propietarios de los terrenos. Por tal motivo, muchas de las invasiones han sido legalizadas, como sucedió con los barrios El Carmen, Enrique Aarón, que tiene más de 40 años, el Dieciocho de Febrero, que tiene 18 años, entre otros.
Pero ¿Cuáles son los problemas que generan las invasiones? ¿Cuánto gastan para comprar los terrenos?, aunque EL PILÓN fue insistente en el tema con los funcionarios, no se pudo obtener una respuesta exacta de cuánto gastaba la administración en la legalización de las invasiones.
Sin embargo, contó que “lo que es el mero título en el barrio Uribe Vélez costó más de 100 millones de pesos”.
“De la forma que hemos logrado recuperar los terrenos es cuando los propietarios le solicitan al alcalde la restitución de sus terrenos, pero una vez desalojan automáticamente las personas vuelven”, aseguró el funcionario.
¿Promotor de las invasiones?
Algunos de los habitantes de Bosconia se atrevieron a contar lo que para ellos es casi que una confidencia. Algunos de los pobladores contaron que el alcalde Jorge Patiño Gómez está ‘recibiendo de su propia medicina’, porque según ellos él sería el promotor de las invasiones, porque antes de ser posicionado prometió ayudarlos a tener viviendas gratis si lo apoyaban en la política.
Esa misma afirmación la hizo uno de los propietarios de los terrenos invadidos quien aseguró “el alcalde ha promovido las invasiones, porque según varios habitantes en el momento que se adjudicara el predio a él tenían que darle la mitad del terreno. El negocio es terrible”.
El dueño de uno de los predios informó que varios han sido las quejas presentadas ante las autoridades para que su terreno le sea devuelto.
“Hemos denunciado en la Procuraduría Provincial, pero es impresionante la corrupción. Estuve en Bogotá averiguando el tema, he hecho bastantes derechos de petición, he enviado oficios al Defensor del Pueblo y demanda por daños y prejuicios, tengo más de 100 documentos donde hemos solicitado el predio”, aseguró.

Puntos de vista:
Álvaro Fonseca, invasor
“El señor alcalde nunca nos ha ayudado en nada, en ayudas que corresponden a vías administrativas, al contrario nos atropella, con una sola pelea que se presenta trae a los antimotines”.
Juan Dávila, invasor
“La Fiscalía, Policía y Alcalde lo sabe, que después de la tarde roban y meten vicio hasta decir ya no más y ahí si no actúa el Alcalde. Munchos desplazados y vulnerables ingresamos aquí porque tenemos la necesidad de un lote”.
Evelia Bolaños, vulnerable
“Yo no soy desplazada, pero tampoco tengo recursos para comprar una vivienda, no tengo dos millones de pesos, y el trabajo que tenemos nos da para mantenernos, mas no para pagar arriendo, necesitamos ayuda”.

Por Merlin Duarte García/El Pilón
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