Desde que inició la pandemia en marzo del 2020, actualmente el Cesar atraviesa la peor crisis sanitaria de su historia. Además del repunte de los casos para covid-19, 381 este martes, la ocupación de camas UCI alcanzó cifras nunca antes vistas.

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En el departamento, de las  451 camas UCI disponibles, 213 están ocupadas con pacientes positivos para covid, 82 sospechosos de la enfermedad y 80 con pacientes de otras patologías, para un total de 76 camas disponibles, de las cuales solo 35 camas son para atender a pacientes con covid-19. Por eso, el departamento continúa en alerta roja, con una tasa de ocupación de 84 %.

 En esa lucha para evitar el colapso, las autoridades departamentales han decretado medidas de orden público como toque de queda, pico y cédula y ley seca, además de seguir tomando pruebas para cortar la cadena de contagio. Sin embargo, asegura el secretario de Salud Departamental, Hernán Baquero, que del cuidado responsable de las personas depende evitar el colapso del sistema de salud del Cesar.

POR MUNICIPIO

Como capital del departamento, Valledupar es la ciudad con la mayor cantidad de camas disponibles. Según reportes de la Secretaría de Salud Local, la ocupación de camas de cuidados intensivos en la ciudad es del 92 %. De 289 camas habilitadas solo hay 22 disponibles. De esas, 12 están en el Centro de Especialidades Médicas del Cesar (Cemce); en el Hospital Rosario Pumarejo de López, 5; en la Clínica Santo Tomás, 2; en la Clínica Buenos Aires, 2; y 1 en la Clínica de Alta Complejidad.

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Por otro lado, en Aguachica, el segundo municipio más importante del departamento, hay 12 camas disponibles: 10 en el Hospital Regional José David Padilla Villafañe, y 2 en la sede de la Clínica Laura Daniela.

Una crisis aguda se vive en Bosconia, donde solo hay una cama UCI disponible en la  Clínica Sinais Vitais. Contrario, la buena noticia es que en Chiriguaná, este miércoles, se habilitarían 10 camas UCI en el Hospital Regional San Andrés, las cuales estaban a la espera del personal profesional.

EN ESTADO DE EMERGENCIA

A través de un comunicado, el Instituto Cardiovascular del Cesar se declaró en estado de emergencia hospitalaria, debido a que la demanda de servicios desbordó la máxima capacidad de atención en Hospitalización, Cuidados Intensivos y Urgencias.

“El Instituto Cardiovascular del Cesar decidió tomar las siguientes medidas: expandir sus camas de UCI y camillas de Observación de Urgencias a sus máximas capacidades; el cierre de un quirófano; restringir los servicios ambulatorios que se venían prestando según la Declaratoria de Alerta Roja y medidas para contener y mitigar el riesgo de nuevos casos; trasladar a todo el personal de los servicios suspendidos al apoyo de los servicios de Hospitalización, Urgencias y UCI”, señala el comunicado.

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Y agrega, que aún con todas las medidas descritas, “la demanda de los servicios hospitalarios de la clínica superó el 100 % de su capacidad”. “Hacemos un llamado al autocuidado; hemos llegado al límite de ocupación en nuestros servicios”, recomendó el instituto.

Por Redacción EL PILÓN.