La contribución de Edelma a la literatura colombiana es invaluable, con poemas que reflejan su conexión con sus raíces y su lucha contra la adversidad.
La obra del médico, escritor y antropólogo fue analizada en la Feria del Libro de Valledupar
Para despedir el Año Manuel Zapata Olivella, declarado por el Ministerio de Cultura, publicamos este reportaje, uno de los últimos que concedió el escritor en 2002, y que muestra a un Manuel que, a pesar de su avanzada edad, no pensaba en la muerte sino en la eternidad.
Carlos César Silva entrevistó al escritor Luis Mario Araújo Becerra a propósito del lanzamiento de su libro ‘Tras los pasos de un médico rural’.
El verbo y la pluma de este genial escritor fueron siempre un llamado a la justicia social, a la equidad y a la libertad del ser humano, ya que sin ellas, sea cual fuere el color de la piel, no puede haber equilibrio ni paz en la humanidad.
Para Zapata Olivella la literatura no era solo un instrumento de denuncia como han pretendido algunos críticos, era además un canal abierto por medio del cual los dioses dan mensajes a los hombres sobre la belleza, la filosofía, sobre la vida.
Manuel Zapata Olivella: trotamundos, más no turista, polifacético, médico y escritor controvertido. Su trasegar no iba en busca de diversión, sino tras algo indefinido, sin un derrotero, ni un centavo en los bolsillos.
En 1954 Zapata Olivella fija su residencia en Bogotá y con escasos recursos conforma otro grupo integrado por Juan Manuel Muegues, músico y compositor manaurero junto a Juan López, insuperable en la interpretación de la caja y el acordeón y como cantante y guacharaquero Dagoberto López Mieles, “El Clarín de la Paz”.
A Manuel Zapata Olivella en la centuria de su natalicio (marzo 17 de 1920)
Escritores de la región cuentan anécdotas y el aporte cultural del escritor que este año cumple su centenario.
El departamento del Cesar es una región parca en lectores y escritores, por eso celebramos con creces la presentación del primer libro“Palabras de amor” de Leonardo Maya; un oftalmólogo avizor de la policromía de las mariposas en los epigramas íntimos del corazón, y como todo escritor es un alquimista de palabras en la risa de los girasoles y en la penumbra matizada de nostalgia.