Los escolares deben sacar sus pupitres a los pasillos de la institución educativa porque la oscuridad les dificulta tomar anotaciones en sus cuadernos y ver lo que sus profesores escriben en los tableros. Así mismo, las altas temperaturas los ahogan porque no funcionan los abanicos.
Los estudiantes recibieron intimidaciones físicas, verbales y golpes por parte de sujetos no identificados que ingresaron a la Institución Educativa de Valledupar.
EL PILÓN intentó conocer la versión de la secretaria de Salud municipal, Lina De Armas, pero resultó infructuoso.
Con la suspensión de las clases presenciales, sobresalió el atraso en materia tecnológica de cientos de familias del barrio 450 Años. Por eso, son más de 1.300 estudiantes del colegio Consuelo Araujo Noguera los que padecen por falta de equipos tecnológicos.