Lo que ha hecho el Pacto Histórico con este país es el colmo. Además de padecerlo en el gobierno, de tener al país inundado en cultivos de coca, poca gestión, aumento desmesurado de la burocracia, desmejora en servicios de salud, mentiras en el manejo de las deudas de los jóvenes con el ICETEX, de tener a Petro, a su familia y a Benedetti en Lista Clinton, etc., etc., la consulta que se llevó a cabo el domingo pasado nos costó a los colombianos, por ahora, 200 mil millones de pesos. Se instalaron 20 mil mesas de votación a lo largo de Colombia para que la gente eligiera al candidato del Pacto a la presidencia en 2026; ganó Iván Cepeda, sobrado, sobre Carolina Corcho y, además, eligieron sus candidatos al congreso, a Cámara y Senado. Si divido 200 mil millones de pesos entre 20 mil mesas, el resultado arroja que cada una nos costó 10 millones. ¡Qué locura! El partido que supuestamente protege los derechos del pueblo, el que defiende al Estado, el que se autodenominó “del cambio”, despilfarró 200 mil millones que pudieron servir para tantas cosas importantes y verdaderamente necesarias. Definitivamente, no hay derecho.
¿Y de los resultados de la Consulta qué? Pues el fracaso es total. Los periodistas y bodegueros afines al petrismo, pagados por él, han tratado de disfrazar lo sucedido y han manifestado que el ejercicio democrático del domingo anterior fue exitoso, que al Pacto le fue muy bien… ¿Muy bien? ¿Qué no saben que hace 4 años, cuando Petro y Francia Márquez se enfrentaron en una contienda igual, se lograron 5.800.000 votos? ¿Y que ahora fueron 2.700.000? Menos de la mitad, del 50 %. Fracaso, inmenso fracaso. Uno no puede perder más de la mitad de los votos, teniendo el ejecutivo y la platica del Estado en sus bolsillos; con cientos de miles de funcionarios, de sus familias, con millones de colombianos recibiendo subsidios, obtuvieron el apoyo de menos de 3 millones de personas. ¡Fatal! Colombia ya no come cuento, la gente se cansó, la afectación a la nación es de tal envergadura, que el mismo pueblo que eligió a Petro hace más de 3 años, ahora le dio la espalda. Bien hecho, merecido, menos mal el control social existe en Colombia.
La situación es tan compleja para el Pacto, minado completamente por Daniel Quintero -este señor logró lo impensable: la implosión del Pacto y su consecuente división-, que la todo poderosa María José Pizarro, líder de las bancadas del Pacto Histórico en el Congreso, tuvo que bajar los brazos, cederle el número 1 en la lista al Senado a Corcho y comprometerse con el gobierno Petro, a salir a las calles del país, para volver a conquistar al electorado que ahora está desencantado. Van a salir a caminar, a hablar con su otrora electorado, para seguirle metiendo mentiras y culpando a la derecha -que no gobierna por obvias razones-, de sus errores e incapacidad para gobernar. Más mentiras y más absurdos. Tienen el agua al cuello y hasta ahora se dan cuenta de ello. Pensaron que la burocracia y los subsidios, desbordados ambos, serían su salvoconducto para mantenerse en el poder y la gente los usó y les hizo pistola.
Afirmamos que por ahora la consulta popular nos ha costado 200 mil millones, porque cada voto obtenido por los candidatos, Cepeda y Corcho, les permitirá recibir del Estado, $2.555 por voto como reposición. Así las cosas, Cepeda recibirá cerca de 4 mil millones de pesos, mientras que Corcho recibirá un poco más de 1.700 millones. Tenaz, les seguimos pagando por sus sinvergüencerías. Esto ya llegó a su límite. Estamos hablando de 206 mil millones de pesos, producto de nuestros impuestos, del esfuerzo de todos.
Cada día que pasa es uno menos de caos y de burlas, de tragedia; ánimo, tranquilos que falta poco, ya llega diciembre con su alegría, las novenas, los buñuelos, la natilla, el año nuevo; llega enero, campañas al Congreso, elecciones en marzo para el legislativo y, luego, primera vuelta en mayo, la segunda vuelta sería en junio y la posesión del nuevo presidente el 7 de agosto. Final, este partido ya no da más. ¡Chao Petro!
Por: Jorge Eduardo Ávila





