Había una vez en un reino una pareja que vivían felices por la noticia que le habían dado. La reina pronto tendría una bebe, pasaban los días y todos estaban muy felices hasta que por fin llego el día del nacimiento. La bebe nació el 9 de septiembre, en el parto la reina murió.

Cuando le dieron la noticia al rey, él estaba muy destrozado pero prometió cuidar a la princesa con su vida  Le puso de nombre  Amari que significa “Hija de la luna”. A la princesa no se le acercaba mucha gente le tenían miedo porque decían que las que nacían el nueve del noveno mes eran malas. Así fue creciendo la niña sin muchas personas alrededor de ella.

El rey quiso investigar más a fondo sobre eso y fue donde una bruja muy conocida por el reino por tener años de vivir ahí le pregunto sobre los que nacen del noveno mes que si le podía explicar eso.

Ella le dijo que si, con gusto, le dijo: rey hace muchos años nació una niña el nueve del noveno mes ella fue una novena, comía carne humana, mataba animales para comer, tenía instinto animal, pero seguía siendo humana. Le tenían miedo pero ella no era mala, ya sabe rey que lo que la humanidad no entiende le tiene miedo, la querían coger de experimento ella trato de huir lo más lejos de esos científicos pero al final la atraparon, experimentaron con ella, la mataron. Eso es lo que se rey.

El rey atónito procesando la información de aquella mujer, la miraba raro, quedo perplejo, lo único que dijo fue ¿puede ayudar a mi hija? Le doy todas las riquezas que quiera pero por favor ayúdeme ella es todo para mí, la bruja le dijo que no podía, que no se preocupara que ella no era la única novena en las personas del reino y que la otra persona la protegería pues habían nacido conectados y quería hacer cumplir un sueño de su hija que él no sabía, el rey no hizo más que darle las gracias y salir un poco melancólico.

El rey hizo una fiesta de cumpleaños a su hija sus 15 un evento muy grande, pero también era en busca del otro noveno. No pudo encontrarlo por más que lo buscaba . Al día siguiente el rey decidió hablar con su hija y contrale lo de los novenos la princesa reacciono mal, al saber sobre lo que estaba sucediendo entendía sus impulso, sus ganas de cazar, la atención a la sangre y lo mucho que le gustaba la carne.

En ese momento pensó en su madre y le pregunto a su padre si ella había matado a su madre por haber nacido el nueve del noveno mes, el padre no le respondió a ella se le inundaron los ojos de lágrimas al saber que había sido ella, anhelaba tener una madre y ahora al saber que ella le había ocasionado la muerte le dolía mucho.

Salió corriendo al bosque se adentró en los árboles, en lo oscuro, donde no pudieran encontrarla, se sentó en el pasto cerca de una laguna y se hizo un ovillo llorando al saber lo que era, de tanto llorar se había quedado dormida hasta que despertó y vio que alguien la observaba se asustó, pero esa persona no tenía intenciones de hacerle daño si no de ayudarla, le pregunto su nombre y ella dijo que se llamaba Amaris el enseguida dijo: ”hija de la luna” ella sorprendida le dijo que si, le pregunto su nombre y él le dijo que se llamaba luke howland hablaron toda la madrugada hasta que el pregunto qué porque estaba llorando ella le vio a los ojos y ella le dijo los motivos, él le brindo una sonrisa y un abrazo, ella le dijo solo nos conocemos hace unas pocas horas y siento como si te conociera desde mucho tiempo atrás.

El accedió a contarle la verdad, le dijo que si estuvieron cerca un tiempo de niños ya que él era el hijo del mayordomo pero que se tuvieron que ir del reino por que habían despedido a su padre pero que nunca dejo de estar pendiente de ella, al final le confeso que él también era noveno, ella sonrió hasta que decidió volver al reino.

El rey muy preocupado la vio entrando al reino, la abrazo, le dijo que la amaba que nunca se fuera de su lado, ella le dijo que había encontrado al noveno, él le dijo que lo invitara a cenar, ella sonrió muy a gusto con la propuesta de su padre.

Ella fue a la laguna y le aviso el accedió y fueron juntos al reino, el rey muy encantado de conocerlo, y feliz de su hija lloro de la felicidad. A los pocos días él le hablo sobre sus poderes de volverse invisible, traer un fantasma de un muerto por un corto tiempo, ella le conto que su sueño era poder abrazar a su madre, entonces el llamo a la madre ella, después de pasar el rato con su madre no sabía cómo agradecerle lloraba de la emoción de haber cumplido su sueño.

Pasaban los meses y ellos estaban muy felices hasta que un día llegaron brujos, científicos, y aldeanos de otros reinos a matar a la princesa por ser novena luke luchaba con ayuda de los caballeros del reino para que no lastimaran a la princesa, pero ella también se metió a la lucha al ver que luke estaba luchando ella quería ayudarlo, ya que eran muchas personas, un cuchillo de un aldeano sorprendió a la princesa perforando su pulmón, luke se dio cuenta por el grito de dolor fue enseguida, trato de ayudarla ,pero era muy difícil.

Los médicos decían que necesitaba unos pulmones nuevos para vivir con esos no podía respirara bien y que el cualquier momento le podía dar un paro respiratorio. Luke accedió a darle sus pulmones pero antes quiso despedirse diciéndole esto:” sé que estoy jodido porque no me enamore de tus virtudes, me enamore de tus defectos. ¿Quién dijo que después de la tormenta sale el sol cuando puede haber un rayo?.

Tengo miedo, porque tu significas todo para mí, y trato de ser lo mejor para ti, en serio que lo intento, pero a la vez no quiero que ames el desastre que soy y caigas conmigo, no quiero encerrarte en mi boulevard de los sueños rotos Amira.

Te dije que te amo y siempre lo hare, en esta vida y en mil más, Amira lo hago y no me arrepiento, y si eso implica dar mi vida por ti, lo haría, lo haría sin pensarlo porque mi vida siempre será la tuya, porque siempre se tratara de ti, siempre ha sido así.” Le dio un beso en los labios y accedió a la operación, cuando Amira ya había despertado pregunto por luke a su padre le salían lágrimas de sus ojos diciéndole que él le había regalado sus pulmones ella lloraba hasta hacer llenar su cama de lágrimas pero aprendió que la vida es un viaje. La vida es corta, y todos debemos partir un día. Así que podríamos ser más audaces, enamorarnos, trepar una montaña, ir por un sueño. Sí, no hace daño ser más audaz. Fin.

Autora: Stefany Marcela Larios Montes – Colegio Rafael Valle Meza