Al parecer, una red busca a niños de entre 10 y 15 años que visitan con frecuencia el balneario Hurtado de Valledupar para llevarlos a otras ciudades a pedir dinero.
Esta acción fue realizada por agentes de la Policía de Infancia y Adolescencia, quienes lo rescataron y dejaron a disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).
Habitantes de Valledupar manifiestan haber tenido problemas con estas personas.
Las autoridades de Policía Infancia y Adolescencia, indagando preliminarmente notaron los hechos y trasladaron al infante al Instituto de Bienestar Familiar, ICBF, para la reparación de sus derechos.
Paulatinamente Valledupar ha reactivado su economía, lo que ha permitido que menores de edad regresen a los semáforos a pedir dinero y vender dulces. Lo peor es que la crisis económica podría aumentar el número de niños explotados ilegalmente.