El desempleo juvenil fue del 20,3 %, es decir, 1 de cada 4 jóvenes está desempleado.
Según el último Índice de competitividad, Valledupar debe trabajar en la innovación, educación media y superior, atraer empresas financieras y en fortalecer el mercado laboral.
La desocupación en la ciudad tuvo una disminución casi de un punto (-0,9) frente al trimestre junio-agosto del 2023. Aunque la informalidad también registra una leve caída, se mantiene sobre el 60 % como el segundo porcentaje más alto del país.
Valledupar no puede seguir dependiendo del rebusque. Es una situación que nos afecta a todos y que exige una acción conjunta.
A corte de marzo de este año, los datos señalan que el total de los trabajadores afiliados a Comfacesar era de 126.854 personas.
Aunque ha bajado la desocupación, la informalidad impera en el mercado laboral de la ciudad, la cual se mantiene en el segundo puesto a nivel nacional por su proporción de trabajadores sin garantías sociolaborales.
Desde Valledupar Cómo Vamos exhortamos a las autoridades locales, al sector privado y al sector académico a pensar maneras imaginativas de ampliar y cualificar el suministro de los factores de producción de la ciudad.
Seis de cada diez trabajadores en la capital cesarense trabajan de manera informal, de acuerdo a los datos representados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
El reto en materia laboral está en la alta proporción de vallenatos ocupados de manera informal. Con un 64 % la ciudad ocupó el segundo lugar en esta medición.
Pero el lunar en la capital mundial del vallenato es la informalidad. De cada 10 empleados, 6 son informales, lo cual debilita la lucha contra la pobreza.
En julio de 2020, con la tasa de desempleo por las nubes, 43.569 personas estaban desocupadas. A noviembre del 2023, la cifra bajó a 23.000. Es decir, ingresaron al mercado laboral en los últimos 3 años cerca de 20.000 vallenatos.
Aunque hubo una leve reducción en el último año, la ciudad ocupa el segundo lugar en informalidad laboral a nivel nacional, lo cual tiene múltiples implicaciones en la economía local.
Un poco más de 300 candidatos se movieron por Valledupar intentando llegar a las corporaciones. La mayoría invirtieron recursos y contrataron personal durante la campaña. ¿Incidió la campaña electoral en la reducción del desempleo?
La última encuesta de Pulso Social, publicada por el Dane, confirma el negativismo casi generalizado que se vive en Valledupar. Sobre todo en materia económica.
El problema es que el 64,6% de esos empleados lo hacen en la informalidad, es decir, independientes, vendiendo en las calles o sin las condiciones laborales como seguridad social.
Representantes de esta población exigen mayor educación para el trabajo, apoyo a los emprendedores y cerrar la brecha entre las oportunidades que tienen quienes viven en la zona rural y quienes residen en la urbe en materia de oportunidades laborales.
El convenio permitirá a los cien jóvenes inscritos capacitarse en los programas de formación técnica para la inserción laboral
Las actividades económicas que están “potenciando la generación de empleo” son el comercio, transporte, sectores salud y educación
Según el DANE, Valledupar ocupa el segundo lugar a nivel nacional en desempleo
Problemas como la inseguridad, el desempleo y el alto margen de informalidad comercial que se presentan en Valledupar urgen de soluciones conjuntas
Analistas apuntan a que es necesario que las entidades públicas y la academia se articulen para consolidar la pertinencia educativa de los jóvenes de Valledupar y la región.