EL PILÓN entrevistó a Carlos Alberto Vega, director del Instituto Departamental de Tránsito del Cesar. El funcionario habló sobre las estrategias para reducir la accidentalidad en el departamento y las víctimas fatales.
EL PILÓN entrevistó a Carlos Alberto Vega, director del Instituto Departamental de Tránsito del Cesar. El funcionario habló sobre las estrategias para reducir la accidentalidad en el departamento y las víctimas fatales.
Tenemos dos años en los que diciembre ha sido uno de los meses más favorables, por el trabajo que se ha hecho articuladamente. El año pasado tuvimos una reducción del 50% en la accidentalidad en diciembre.
Hay un fenómeno: posterior a la pandemia, la accidentalidad en Colombia ha aumentado de forma constante. Pero el departamento tuvo un pico en el 2021, con un aumento del 32%, pero luego el Cesar fue uno de los 6 departamentos del país que tuvo una reducción. Aunque fue leve, es significativa.
En Colombia hay 8.900 víctimas de siniestros viales al año, de acuerdo a las cifras del 2022. El año pasado el Cesar tuvo más de 320 víctimas mortales.
Hasta noviembre, en el departamento hay 259 víctimas. Para este mismo periodo, el año pasado teníamos 270 víctimas, lo que marca una reducción. Y en este diciembre hemos tenido un comportamiento relativamente adecuado.
Una de las acciones del Instituto fue el control de velocidad, lo cual genera pánico por la satanización de la tecnología. La velocidad es un factor fundamental porque aumenta la letalidad del accidente.
Como instituto introdujimos dos puntos de control en San Alberto. La fotodetección funciona 24 horas al día. En ese tramo San Alberto-La Mata el límite es 100 kilómetros por hora. Y tenemos otro autorizado en Pailitas. Ese punto busca reducir la velocidad antes de ingresar a la zona urbana.
Los otros puntos de fotodetección son los de Aguachica, que pertenece a la sectorial de Tránsito. Codazzi tiene dos puntos autorizados en la variante. A pesar de todas las críticas, la presencia de los equipos ha disminuido la accidentalidad.
Personalmente creo que el control debería ser total, porque uno no puede regular solo una parte. He notado que cuando uno viaja a Barranquilla hay muchos puntos de control. Eso genera 2 efectos. Primero, la sobre atención del ciudadano a la señalización. Y segundo, una vez pasa el control y bajas la velocidad, volver a subir la velocidad toma tiempo. Esos dos efectos han reducido la accidentalidad.
La Agencia Nacional de Seguridad Vial es la que autoriza la instalación de controles de velocidad a solicitud de los organismos de tránsito. Hemos presentado casi 200 solicitudes de controles pero solamente nos han aprobado 4.
EL PILÓN entrevistó a Carlos Alberto Vega, director del Instituto Departamental de Tránsito del Cesar. El funcionario habló sobre las estrategias para reducir la accidentalidad en el departamento y las víctimas fatales.
EL PILÓN entrevistó a Carlos Alberto Vega, director del Instituto Departamental de Tránsito del Cesar. El funcionario habló sobre las estrategias para reducir la accidentalidad en el departamento y las víctimas fatales.
Tenemos dos años en los que diciembre ha sido uno de los meses más favorables, por el trabajo que se ha hecho articuladamente. El año pasado tuvimos una reducción del 50% en la accidentalidad en diciembre.
Hay un fenómeno: posterior a la pandemia, la accidentalidad en Colombia ha aumentado de forma constante. Pero el departamento tuvo un pico en el 2021, con un aumento del 32%, pero luego el Cesar fue uno de los 6 departamentos del país que tuvo una reducción. Aunque fue leve, es significativa.
En Colombia hay 8.900 víctimas de siniestros viales al año, de acuerdo a las cifras del 2022. El año pasado el Cesar tuvo más de 320 víctimas mortales.
Hasta noviembre, en el departamento hay 259 víctimas. Para este mismo periodo, el año pasado teníamos 270 víctimas, lo que marca una reducción. Y en este diciembre hemos tenido un comportamiento relativamente adecuado.
Una de las acciones del Instituto fue el control de velocidad, lo cual genera pánico por la satanización de la tecnología. La velocidad es un factor fundamental porque aumenta la letalidad del accidente.
Como instituto introdujimos dos puntos de control en San Alberto. La fotodetección funciona 24 horas al día. En ese tramo San Alberto-La Mata el límite es 100 kilómetros por hora. Y tenemos otro autorizado en Pailitas. Ese punto busca reducir la velocidad antes de ingresar a la zona urbana.
Los otros puntos de fotodetección son los de Aguachica, que pertenece a la sectorial de Tránsito. Codazzi tiene dos puntos autorizados en la variante. A pesar de todas las críticas, la presencia de los equipos ha disminuido la accidentalidad.
Personalmente creo que el control debería ser total, porque uno no puede regular solo una parte. He notado que cuando uno viaja a Barranquilla hay muchos puntos de control. Eso genera 2 efectos. Primero, la sobre atención del ciudadano a la señalización. Y segundo, una vez pasa el control y bajas la velocidad, volver a subir la velocidad toma tiempo. Esos dos efectos han reducido la accidentalidad.
La Agencia Nacional de Seguridad Vial es la que autoriza la instalación de controles de velocidad a solicitud de los organismos de tránsito. Hemos presentado casi 200 solicitudes de controles pero solamente nos han aprobado 4.