Quienes recordamos aquella comedia, La jaula de las locas en 1996, o los programas venezolanos de Radio Rochela en la televisión por nuestra condición fronteriza, tenemos mucha claridad en el humor de tiempos pasados para el tema de la sexualidad, o mejor de la diversidad en el comportamiento de nuestra gente.

El tema es discutido, discutible, desconocido y aceptado casi a regañadientes por nuestra sociedad, tan violenta para algunas cosas y tan cobarde para aceptar la condición humana. Hoy cuando el director nacional del DANE (Departamento Alborotado de Nalgas Enamoradas) viene de nuevo el tema   sobre la condición sexual que por supuesto es diferente a la que vimos en nuestros años mozos. Solo había machorras y maricones. 

Todos los conocíamos y los aceptábamos con nuestra reserva producto del desconocimiento absoluto de los temas. Incluso, era motivo de burlas, desprecios, alejamientos y algo de vergüenza.

Pero la vaina fue in crescendo. Ya el tema de hoy es de orgullo. Familia que no tenga un loco, o un gay secreto o público no es familia. Día del Orgullo gay es una fiesta de color. Multicolor para ser más exactos, su bandera que excluye al color negro lo dice todo. 

Los negros alcanzaron a tener fama de fortaleza y potencia sexual, pero las cosas no resultaron tan ciertas, hoy esa comunidad tiene hilos muy delgados por todas partes. A nivel nacional, pensamos que con el tema Claudia/ Angélica alcaldesa y senadora que son parejas públicas, la cosa tomó una prominencia mayor, es decir la libertad de salir a la calle con tranquilidad y mover los copos del poder a su manera.

Para quienes no somos expertos en distinguir el grupo LGTBQ+ quedamos enredados. No sabemos distinguir una trans de una bisexual y nos volvemos un ovillo para saber cómo caminan las lesbianas y los no binarios. Como el símbolo (+) Significa que la lista sigue y  es larga, posiblemente todo el alfabeto en poco tiempo. Hay muchos escondidos en nuestro medio como periodistas, y hay mucho más entre los colegas de derecho, cuyo listado daré en el próximo chorro. 

Por ahora apenas publicaré las de los comunicadores sociales actuales, son tantos que no sé si queda espacio en este chorro del jueves.

Los padres son los primeros en recriminarlos, las madres en descubrirlos y encubrirlos hasta donde se pueda, salir de escaparate era y sigue siendo una tragedia, quitarse ese peso de encima no es cosa fácil en un país de machistas y feministas a morir. Entonces, ser o no ser al mismo tiempo, causa mucha confusión. Por pura intuición, los vallenatos aprendimos a saber quiénes eran los nuestros por el baile, los vestidos y las formas delicadas en el trato, pero algunos se hacían pasar por rudos y bizarros, cuando en el fondo eran una dulce bolsita de másmelos.

Los bailadores de cumbia por sus movimientos de hombros fueron los primeros sospechosos, pero no todos cogieron el camino, incluso unos se camuflaban en busca de chicas, tengo porque saberlo. Luego en los gustos musicales, fuimos descubriendo a los otros, como adoradores de Juan Gabriel, mientras los amantes de la ranchera eran de José Alfredo Jiménez y Vicente Fernández.

Incluso en las oficinas públicas se llevaba un registro anónimo de esos personajes, generalmente hombres casados son sus hogares públicos y sus viajes secretos. La gobernación siempre ganaba, incluso duplicaba a la alcaldía, hoy en esta última repartidos en sus secretarías hay 67, mientras la gobernación apenas participa con 34.

Esta semana se cumplieron 40 años de la primera marcha LGTBI en Bogotá, (nótese que faltaba el Q+) asistieron apenas tres decenas de hombres y mujeres con máscaras para esconderse, cuando al mismo tiempo querían que todo se supiera. 

En el Congreso que acaba de instalarse, 7 dijeron públicamente su condición, pero otras cifras serias dicen que la cosa pasa de 50, algo muy civilizado, pero muy ocultado todavía.

Congresista que no tenga entre sus UTL su pareja oculta sea hombre o mujer, es casi unos de los requisitos para perder curul, me aseguró un experto del tema. La película sobre la historia del vallenato tiene llenas las salas de cine del país, y el lleno de joven Elder Dayan al Parque de La Leyenda son la noticia, sobra decir también la lista de acordeoneros, cantantes y músicos vallenatos LGBTQ+,  es larga y secreta, pero  la publicare después, como les dije, el espacio se acabó y  no alcanzó para comunicadores sociales, Otro chorro será.