Actualmente las personas viven sumidas en sus rutinas y en el estrés diario, sin darse cuenta han dejado de lado el descanso e invierten más tiempo en el trabajo o los compromisos que van adquiriendo. Frente a esta situación se debe tener control y disponer de momentos tanto para el descanso como el esparcimiento, que […]
Actualmente las personas viven sumidas en sus rutinas y en el estrés diario, sin darse cuenta han dejado de lado el descanso e invierten más tiempo en el trabajo o los compromisos que van adquiriendo.
Frente a esta situación se debe tener control y disponer de momentos tanto para el descanso como el esparcimiento, que generan sensaciones de recuperación y distracción a la vez que dan un nueva energía.
Para tener un mejor dominio del tiempo y evitar la carga de estrés, la clave está en la organización, según Maira Ropero, psicóloga clínica y coach certificada. Para esto, la profesional hace las siguientes recomendaciones:
1. Haz una lista de las actividades que quieres o debes hacer. Posteriormente jerarquiza, según la importancia, todas las actividades de la lista.
2. Es mejor planear que improvisar y remendar. Planea semanalmente y lleva agenda.
3. Revisa tus prioridades: Ordena tu planeación por prioridades. Hay cosas importantes que no se pueden dejar de hacer y hay otras urgentes, que no admiten demora.
4. Incluye en tu agenda todas las áreas de tu vida que sean importantes para ti y a las cuales les quieres dedicar tiempo: pareja, hijos, padres, amigos, estudios, ocio, recreación, hobbies… etc.
5. Respeta el tiempo dedicados en cada rol y no los mezcles. Si estás en casa es el tiempo de la familia, si estás en el trabajo es el tiempo de lo laboral.
6. Di no y sé firme: “Me encantaría ir, pero ya tengo un compromiso para este fin de semana”, “Suena tentador, pero tengo mucho trabajo por hacer. Sería irresponsable de mi parte aceptar”.
7. Deja de hacer cosas innecesarias: De todas las cosas que debemos hacer en un día, aquello que no es importante ni urgente, acaba siendo una pérdida de tiempo y, por tanto, deberíamos dejar de hacerlas. Analiza a qué actividades dedicas tu tiempo a lo largo de un día normal y si podrías dedicarlo a actividades más importantes.
8. Evita hacer varias cosas a la vez, ya que esto afecta negativamente la productividad. Es mejor terminar de hacer alguna determinada tarea, aunque tome mucho tiempo, antes de iniciar otra.
9. Regálate mínimo 20 minutos al día para hacer relajación y silenciar tu mente. Esto te permitirá aumentar los niveles de concentración y productividad.
Aunque no hay una metodología exacta, estos son algunas claves que da la experta para generar un balance que aporte bienestar a cada persona.
Actualmente las personas viven sumidas en sus rutinas y en el estrés diario, sin darse cuenta han dejado de lado el descanso e invierten más tiempo en el trabajo o los compromisos que van adquiriendo. Frente a esta situación se debe tener control y disponer de momentos tanto para el descanso como el esparcimiento, que […]
Actualmente las personas viven sumidas en sus rutinas y en el estrés diario, sin darse cuenta han dejado de lado el descanso e invierten más tiempo en el trabajo o los compromisos que van adquiriendo.
Frente a esta situación se debe tener control y disponer de momentos tanto para el descanso como el esparcimiento, que generan sensaciones de recuperación y distracción a la vez que dan un nueva energía.
Para tener un mejor dominio del tiempo y evitar la carga de estrés, la clave está en la organización, según Maira Ropero, psicóloga clínica y coach certificada. Para esto, la profesional hace las siguientes recomendaciones:
1. Haz una lista de las actividades que quieres o debes hacer. Posteriormente jerarquiza, según la importancia, todas las actividades de la lista.
2. Es mejor planear que improvisar y remendar. Planea semanalmente y lleva agenda.
3. Revisa tus prioridades: Ordena tu planeación por prioridades. Hay cosas importantes que no se pueden dejar de hacer y hay otras urgentes, que no admiten demora.
4. Incluye en tu agenda todas las áreas de tu vida que sean importantes para ti y a las cuales les quieres dedicar tiempo: pareja, hijos, padres, amigos, estudios, ocio, recreación, hobbies… etc.
5. Respeta el tiempo dedicados en cada rol y no los mezcles. Si estás en casa es el tiempo de la familia, si estás en el trabajo es el tiempo de lo laboral.
6. Di no y sé firme: “Me encantaría ir, pero ya tengo un compromiso para este fin de semana”, “Suena tentador, pero tengo mucho trabajo por hacer. Sería irresponsable de mi parte aceptar”.
7. Deja de hacer cosas innecesarias: De todas las cosas que debemos hacer en un día, aquello que no es importante ni urgente, acaba siendo una pérdida de tiempo y, por tanto, deberíamos dejar de hacerlas. Analiza a qué actividades dedicas tu tiempo a lo largo de un día normal y si podrías dedicarlo a actividades más importantes.
8. Evita hacer varias cosas a la vez, ya que esto afecta negativamente la productividad. Es mejor terminar de hacer alguna determinada tarea, aunque tome mucho tiempo, antes de iniciar otra.
9. Regálate mínimo 20 minutos al día para hacer relajación y silenciar tu mente. Esto te permitirá aumentar los niveles de concentración y productividad.
Aunque no hay una metodología exacta, estos son algunas claves que da la experta para generar un balance que aporte bienestar a cada persona.