Desde hace un semana las autoridades, campesinos y un grupo de voluntarios atiende un voraz incendio que ha afectado a gran parte del ecosistema de los páramos del Parque Regional Serranía del Perijá (Codazzi y Manaure).

Según la jefa de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y Desastres del Cesar, Ungrd, María José Páez, se ha mitigado el 60 % del incendio aunque por la fuerte velocidad del viento, el difícil acceso y las características del aeronave de la Fuerza Aérea el porcentaje restante se ha propagado en diferentes zonas de los municipios de Agustín Codazzi y Manaure.

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El alcalde de Manaure, Henry Oñate, por su parte, precisó que el páramo de Sabana Rubia es el que mayor afectación tiene y que por la intensidad del fuego y la ruta que lleva ya está cruzando los límites con Venezuela.

En Manaure, uno de los municipios donde ha habido mayor impacto que actualmente se combate desde tierra y aire, el incendio no ha podido ser interceptado, la trayectoria del fuego acaba a su paso con parte de la fauna y la flora porque la capacidad de respuesta del helicóptero usado no da para subir el agua a la zona afectada que supera entre los 3.000 y 3.500 metros de altitud.

“La capacidad del aeronave de la Fuerza Aérea Colombiana no da para llegar al punto del incendio, la decisión es seguir trabajando manualmente con las personas que están arriba y tratar de subir más brigadistas”, informó la jefa de la Ungrd.

Con la participación de 50 personas sorteando altas temperaturas, uno de los sectores más afectados y donde se concentra la mayor atención de las autoridades es Sabana Rubia.

El alcalde del municipio de Manaure Henry Oñate dijo: “Hemos intentado mitigar este incendio pero no ha sido fácil controlarlo y todavía está en estas condiciones”.

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El alcalde señaló que dos de las limitantes han sido el nivel de la temperatura y la falta de oxígeno que ha impedido la fácil movilidad de las cuadrillas en el perímetro del incendio, generando un foco de riesgo para los socorristas.

En total han sido más de 4.000 hectáreas las afectadas, situación que conllevó a la declaratoria de calamidad pública ambiental por parte de la alcaldía de Manaure. “Esto amerita esa calificación porque los daños que hay son incuantificables”, mencionó Oñate.

La autoridad municipal manifestó con preocupación que la única manera de atender de forma efectiva el incendio es por vía aérea ya que por tierra es muy complejo mitigar y suspender la trayectoria del fuego.

“Las cuadrillas están trabajando en apagar lo que humanamente pueden pero no es suficiente, estamos es tratando de conservar lo que es el páramo pero como es en montañas para nosotros es casi imposible hacerlo manual”. Oñate comentó que una de las estrategias que están permitiendo disipar el fuego son las brechas guardarrayas.

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La Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, programó la siembra de 320 mil frailejones determinantes para el desarrollo ecosistémico de la región y conservación de la serranía de Perijá, lugar donde se originan cuatro afluentes hídricos el Majiraimo, el Manaure, el Chiriamo y el Pereira.

El alcalde Henry Oñate concluyó que la afectación de estos espacios naturales conllevará a la deficiencia en la producción del agua generando un estado crítico en el provisionamiento del recurso a las comunidades de los municipios impactados.

POR: JORGE LÓPEZ / EL PILÓN
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