El periodista hizo un llamado a la Policía Nacional y al alcalde de Valledupar, Mello Castro, para que refuerce la seguridad en la capital del Cesar.
El hecho sucedió la mañana de este sábado 26 de agosto.
La mayoría de locales comerciales no exigen el uso del tapabocas, pero por prevención muchas personas los usan.
Además de los asaltos, hay quejas porque algunos conductores de mulas y buses persisten en transitar por este corredor vial a pesar de la restricción para vehículos pesados.
El diagnóstico final post mortem de muchos de los negocios que han muerto, tras perder en la fatídica lucha del abrir y cerrar de puertas en la ciudad de Valledupar, es una ya muy famosa y lamentable negación: la inseguridad.
A raíz del reciente acto delictivo cometido por delincuentes a un conductor de taxi, la agremiación manifestó que no es necesario que haya más muertos para que implementen un sistema de seguridad que los respalde.
Es la nueva modalidad delincuencial en “Valledupar en orden”, y es común atribuir a la pobreza las causas del delito. La necesidad tiene cara de hereje, pero esta a su vez la equivalencia de delito, y la necesidad no tiene ley.
En el último hecho, registrado en la capital cesarense, el conductor arrolló a los delincuentes.
Ante esta situación los habitantes del sector han solicitado mayor presencia de las autoridades para evitar que las personas que circulan por el lugar sean víctimas de hurto.
De acuerdo con la comunidad la avenida Los Militares que colinda con un lote del exalcalde de Valledupar Rubén Carvajal es el corredor de ladrones que delinquen en el sector aprovechando las zonas con poca iluminación.