Es interesante y oportuna la intención demostrada por un representante a la Cámara al anunciar su irrestricta intención de modificar “los topes” con respecto a las desviaciones significativas que operan a la fecha, y que tanto disgusto causa a la comunidad usuaria de los servicios públicos domiciliarios, y además indica que se asignará este proceder a la Superintendencia de Servicios Públicos, porque al leer todo el extenso articulado de la ley que rige este accionar, están a cargo de las empresas prestadoras e incluidas en el respectivo contrato de servicios públicos.
Las comunidades de los barrios populares, en algunas ventas de comidas callejeras y en algunas tiendas de Valledupar, están adquiriendo carne de res en condiciones antihigiénicas, toda vez que ese producto la mayoría de las veces proviene de los mataderos clandestinos.