El 2 de noviembre de 1995 fue asesinado. Un ejemplo para quienes hemos hecho política, un ejemplo para el país. Un referente de las derrotas.
Cuando ya estamos próximos a terminar este año 2022, empezamos a hacer balances de décadas de progreso y también de lunares y hasta retrocesos en la experiencia administrativa del departamento del Cesar.
“López se enfrentó a los grandes del liberalismo y del conservatismo, le quitó votos al comunismo y fue el creador del liberalismo socialista”.
Esto ha causado indignación en los vallenatos, debido a que, consideran, es un claro detrimento del patrimonio público y cultural del municipio.
La prioridad de López y sus amigos era hacer de Valledupar una ciudad igual o superior a Santa Marta. Tal idea competitiva con la antigua capital les impulsó a crear, incluso, un certamen festivo.
El nombre de Alfonso López se pasea como pedro por su casa, a través de los recuentos de hechos que más que anécdotas, sustentan su palabrerío que como una gran mecha revolucionaria, prendió el sentido de partencia que siempre ha acompañado a los cesarenses.
“No vi enterrar a mi padre. No vi enterrar a Isabel. No los lloré sino lánguidamente. Pero al enterrar a Consuelo he llorado mil veces copiosamente y todo me parece poco para aplacar en mi alma, el dolor que llevo eternamente”, Álvaro Araújo Noguera.