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Entrevista - 8 noviembre, 2021

“No vamos a expropiar a nadie, ni habrá reelección”: Roy Barreras

El precandidato presidencial por el Pacto Histórico y senador, Roy Barreras, habló sobre la fórmula de gobierno del pacto, estrategias para impulsar la agroindustria y disminuir la pobreza extrema en el Cesar.

El precandidato presidencial por el Pacto Histórico, Roy Barreras.
El precandidato presidencial por el Pacto Histórico, Roy Barreras.
Boton Wpp

En su visita a Valledupar, el precandidato presidencial por el Pacto Histórico y senador, Roy Barreras, dialogó con el diario EL PILÓN sobre la pobreza en el departamento del Cesar, la agroindustria para la generación de empleo y las políticas sociales y ambientalistas que constituyen al pacto.  

¿A qué se debe su visita a Valledupar?

Recorro el país contándole a los compatriotas cómo va a ser el gobierno del Pacto Histórico. Vamos a ganar la Presidencia de la República para garantizar un cambio real en el destino de esta patria, y el Cesar es quizás uno de los departamentos emblemáticos que puede mostrarle a Colombia su futuro inmediato. 

El pacto histórico es una coalición de centro-izquierda, donde el líder más caracterizado de la izquierda colombiana es mi compañero en el Senado, Gustavo Petro, y yo soy el centro. El 13 de marzo, el mismo día de la elección del Congreso, los cesarenses y colombianos tendrán un tarjetón de la consulta presidencial del pacto Histórico en donde estarán Gustavo, Francia, Arelis, Alex y yo, cinco precandidaturas. 

Hay dos cosas completamente inéditas en la historia política que vamos a cambiar con el pacto. La primera es que serán los ciudadanos del Cesar y de Colombia los que decidirán la fórmula presidencial-vicepresidencial, porque quien gane en esa consulta será el presidente o presidenta, y quien quede de segundo será el vicepresidente, es decir, el origen de la vicepresidencia no será un capricho del candidato, sino que será de origen popular. 

No elegiremos a un caudillo, sino a un equipo de gobierno ese día. La segunda cosa es que ese domingo le ofreceremos a las mujeres colombianas la única lista cerrada en cremallera que significa paridad de género real. 

¿En qué consistirá esa lista? 

La mitad de las curules del pacto serán mujeres. La mitad del Congreso será ocupado por mujeres. Las mujeres cesarenses como las colombianas trabajan el triple. Cuidan los niños, cuidan los adultos mayores, al hijo discapacitado, van a jornalear cuando están en el campo, van a la universidad cuando pueden estudiar, van a rebuscarse en el trabajo informal o van al trabajo formal después de dejar hecho el desayuno y el almuerzo, y nadie les paga por ese trabajo de cuidado. 

El gobierno del pacto le garantizará un ingreso mínimo vital para las mujeres cabeza de hogar y para los adultos mayores. Ese es un gobierno sensible que gobernará para la gente y no para los banqueros, más ricos y terratenientes. 

No vamos a expropiar a nadie, no va haber una constituyente, no va haber reelección, no nos vamos a quedar 12 años en el poder. Vamos a gobernar cuatro años para construir las bases del cambio social en Colombia. 

¿Cuál es su papel dentro del Pacto Histórico? 

Competir en la consulta presidencial para garantizar que el próximo gobierno sea estable, equilibrado y seguro, el cual respete la vida, el Acuerdo de Paz que yo firmé a nombre del Estado hace cinco años, la propiedad privada y el emprendimiento. 

Para nadie es un secreto que los principales líderes del mundo reconocieron hace 10 días en Glasgow, Escocia, que si no cambiamos de la economía petrolera de combustibles fósiles de carbón hacia otro tipo de energías limpias, el planeta, la vida humana, van a desaparecer. 

La transición energética hacia energías limpias no es un capricho del Pacto Histórico, es un mandato de la humanidad. Entonces yo le pregunto a la gente del Cesar, que lo va a entender con el corazón, si Colombia no puede seguir viviendo del petróleo, lo hará de dos cosas en la que somos insuperables: en la producción de comida para el mundo, es decir, la agroindustria y el turismo. 

En ese sentido, el Pacto Histórico va a reactivar esas dos grandes líneas, y aprovecho esta entrevista para compartir con el pueblo del Cesar lo que haremos. 

¿Cómo será ese proceso de reactivación? 

He dicho que en nuestro gobierno el eje fundamental será la reactivación del empleo y la agroindustria. No se hacen agroindustrias sin industriales, no se hace turismo a gran escala sin empresarios. Es con la propiedad privada y los empresarios que se genera empleo, pero es con el gobierno que se hace una sociedad justa porque no puede el gobierno cerrar los ojos ante la realidad vergonzosa que dijo el Banco Mundial hace dos semanas: Colombia sigue siendo el segundo país más inequitativo de América Latina.

Cuando hay inequidad no es lo mismo que miseria, lo que hay es mala distribución de la riqueza. Aquí mal contados hay un 1.300.000 habitantes, es absolutamente doloroso que de ese millón haya 400.000 víctimas. La tercera parte de la población del Cesar ha sido víctima de una u otra manera del conflicto; víctimas de la guerrilla, el secuestro,  del paramilitarismo y de los agentes del Estado. 

Esta no es la única cifra dolorosa que compromete al pacto con las víctimas; de ese millón de cesarenses, el 24 % está por debajo de la línea de pobreza extrema, es decir, la cuarta parte de los ciudadanos. Más de 250.000 personas están hoy en pobreza extrema teniendo tierra fértil, capacidad de trabajo, alegría, turismo y empresarios que son capaces de impulsar el empleo. Se necesita gobierno y Duque significa el desgobierno, el fracaso del gobierno. 

Hay quienes lo critican por la participación de su exesposa en las listas del pacto al Senado…

Lleva 30 años trabajando en derechos humanos desde el Comité Internacional de la Cruz Roja, abogada penalista, tiene cuatro especializaciones, dos maestrías en derecho internacional y 10 años trabajando en favor de la restitución de tierra, y la última década trabajando defendiendo desde la Fiscalía General las amenazas contra las víctimas y el asesinato de víctimas del conflicto, es decir, que esta es una mujer profesional que lleva muchos más años que yo dedicada a los derechos humanos y al trabajo político con la gente. 

Es fácil descalificar a quien no se conoce con el argumento machista de que las mujeres colombianas no tienen mérito propio, sino que son la ex de o la parienta de fulano. Es por supuesto fruto de la descalificación de sectores radicales que se llaman las bodeguitas y las hay en los dos extremos. 

¿Cómo conquistar el voto en aquellos territorios donde el petrismo y el Pacto Histórico no son favoritos? 

Yo le hablo a los cuatro millones de colombianos de origen liberal, santista, de centro, verdes y de voto en blanco, esos cuatro millones de colombianos que no votaron por Petro en el 2018, los invito a dar el paso que nosotros dimos. 

Yo no soy petrista, yo no soy de izquierda ni soy de la Colombia Humana, yo soy de centro-liberal, de origen liberal desde la cuna. Mi abuelo era un campesino liberal que está enterrado en una vereda que se llama El Palo, un campesino que lo mataron por reclamar un pedazo de tierra. Soy orgullosamente hijo de esa historia al igual que nueve millones de desplazados.  

A los liberales de Colombia los invito a acompañarnos en el pacto porque elegiremos a un gobierno estable y equilibrado en esa coalición centro-izquierda, pero por sobre todo, les digo no se dejen engañar. Nuestro eje fundamental de acuerdo con Gustavo Petro es la implementación del acuerdo de paz y el desarrollo de la agroindustria como el futuro de Colombia. 

Es el alimento y el turismo el nuevo destino del país, y el Cesar tiene todo para desarrollar agroindustria y turismo. Es una de las zonas más bellas del país. Nos mintieron hace cinco años sembrando miedo, nos dijeron que si votaban por la paz los hijos se iban a volver gays, hasta hace poco decían que íbamos hacer una ley para quitarle la pensión a los jubilados y dárselas a los guerrilleros y le pusieron hasta mi nombre, pero nunca existió. 

¿Cómo son esas relaciones con el partido Liberal? 

Pues, los que tenemos origen liberal entendemos que lo que hay en esa historia es una defensa de los derechos individuales y de los colectivos. En ese orden, el liberalismo desde la Revolución Francesa defiende la libertad de prensa, opinión, el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo, la libertad de empresa que es libre mercado, ese es el liberalismo, estamos de acuerdo en esas ideas básicas. Yo invito al partido Liberal y a los liberales de Colombia a que participen con nosotros en la consulta, que no le tengan miedo a Petro. 

Yo no le tengo miedo a Petro, compito con él. Todos los demás hacen esfuerzos enormes para competir con Petro en la segunda vuelta, pues compitan de una vez como lo estoy haciendo yo en la consulta y garanticemos el triunfo en la primera vuelta. Invito al partido Liberal, con Alejandro Gaviria incluido, a que participe en la consulta del pacto, se mida, se cuente y enriquezca la respuesta equilibrada del liberalismo de centro-izquierda. 

¿Cómo está internamente el pacto? 

Sólido. Los colombianos han visto que las otras coaliciones están fracturadas, ‘la pelotera’ para decirlo en vallenato, es evidente. En el Centro Democrático seguramente se va a terminar imponiendo la más radical de todos, que es la senadora Cabal. 

Por otro lado, en el centro Verde, en donde son defensores de la paz, los he invitado e invito a que se sumen a competir en el pacto, en lugar de competir contra nosotros porque le tienen miedo a Petro. Lo que han hecho es agarrarse entre ellos. Acabamos de ver un intercambio de videos adolescentes entre Sergio Fajardo y Alejandro Gaviria haciéndose pequeños reclamos, eso no es serio para quien pretenda gobernar un país que tiene retos enormes. 

¿Cómo será su campaña política para la Presidencia? 

Estoy recorriendo el país hace apenas tres meses, Gustavo lleva tres campañas presidenciales. Denme tiempito, estamos creciendo e invitando a la gente que tiene como yo un pensamiento de origen liberal. Invitando y agradeciendo a los 140.000 cesarenses que me acompañaron con el voto por el sí a la paz hace cinco años. A ellos los invito a acompañarme en esa consulta presidencial y sumarse al pacto. 

Les aseguro que en el gobierno del pacto haré la paz completa. Yo sé parar las guerras, ya paramos una. Yo sé parar la violencia y la inseguridad, lo haremos. Yo sé reactivar la economía desde el agro colombiano. Necesitamos que esa fuerza de quienes votaron el sí a la paz nos acompañe garantizando que ese día tengamos la consulta más votada y equilibrada para el bien de los colombianos. 

¿Cómo ve al Pacto Histórico en las encuestas? 

Como lo ven todos los colombianos, imparable. El pacto es el cambio y el cambio es imparable.

¿Si ocupa el segundo lugar qué función desarrollaría? 

Apelo a los que me han acompañado en la defensa de la paz para que estén conmigo en la consulta presidencial del pacto para fortalecer esa fórmula. Lo que pueden tener claro es que ese domingo elegiremos a un equipo de gobierno y no un caudillo. El equipo será equilibrado, estable y seguro porque estaremos allí para defender la vida, la paz y el patrimonio de los colombianos.

¿Cómo ve al departamento del Cesar? 

Cuando Colombia decida, liderada por el gobierno del pacto, que su nueva vocación para ser competitiva ante el mundo es la producción de aire, agua, alimentos y turismo, todo el aparato del Estado se volcará a resolver los problemas de infraestructura que permitan que Colombia sea competitiva. 

Todo el aparato del Estado se volcará a proteger a las familias, mujeres cabezas de hogar y a ese 24 % de pobres extremos en el Cesar con el propósito de aliviar esa angustia, e incorporar esa pobreza abandonada por el Gobierno a la actividad productiva y la generación de empleo. 

El Cesar tiene todo lo que Colombia debe asumir como nuevo destino. No es la cocaína ni el petróleo, es la producción de alimentos y turismo. El Cesar sabe hacer las dos cosas, pero tiene que estar en ese proceso acompañado por el Gobierno nacional. 

Los gobiernos locales solos no pueden resolver la formalización de la tierra, el catastro multipropósito, el mecanismo de aseguramiento de las cosechas, los macrodistritos de riego y la seguridad en el territorio. Los gobiernos legítimos imponen la seguridad, los ilegítimos o ineptos como el gobierno Duque abandonan el territorio. 

Solo un gobierno comprometido con el agro, campesinado, turismo, con la nueva realidad del mundo, que es la transición energética, es capaz de darle al Cesar lo que necesita para volverlo el motor de la economía en el Caribe, puede serlo. El Caribe no es solo Barranquilla, el Caribe también es Cesar y La Guajira. 

En pocas palabras defina a estos personajes y términos: Congreso de la República… 

Abyecto y enmermelado 

¿Expresidente Juan Manuel Santos? 

Paz y buen gobierno. 

¿Expresidente Álvaro Uribe? 

Pasado y guerra. 

¿El senador Gustavo Petro? 

Cambio y Pacto Histórico. 

Alejandro Gaviria? 

(Silencio) Buen hombre. 

¿La senadora María Fernanda Cabal? 

Extrema derecha.

¿Sergio Fajardo? 

(Silencio) Nadie sabe. 

¿Federico Gutiérrez? 

Duque dos con cachumbos.

Por: Namieh Baute Barrios / EL PILÓN

@namiibb

Entrevista
8 noviembre, 2021

“No vamos a expropiar a nadie, ni habrá reelección”: Roy Barreras

El precandidato presidencial por el Pacto Histórico y senador, Roy Barreras, habló sobre la fórmula de gobierno del pacto, estrategias para impulsar la agroindustria y disminuir la pobreza extrema en el Cesar.


El precandidato presidencial por el Pacto Histórico, Roy Barreras.
El precandidato presidencial por el Pacto Histórico, Roy Barreras.
Boton Wpp

En su visita a Valledupar, el precandidato presidencial por el Pacto Histórico y senador, Roy Barreras, dialogó con el diario EL PILÓN sobre la pobreza en el departamento del Cesar, la agroindustria para la generación de empleo y las políticas sociales y ambientalistas que constituyen al pacto.  

¿A qué se debe su visita a Valledupar?

Recorro el país contándole a los compatriotas cómo va a ser el gobierno del Pacto Histórico. Vamos a ganar la Presidencia de la República para garantizar un cambio real en el destino de esta patria, y el Cesar es quizás uno de los departamentos emblemáticos que puede mostrarle a Colombia su futuro inmediato. 

El pacto histórico es una coalición de centro-izquierda, donde el líder más caracterizado de la izquierda colombiana es mi compañero en el Senado, Gustavo Petro, y yo soy el centro. El 13 de marzo, el mismo día de la elección del Congreso, los cesarenses y colombianos tendrán un tarjetón de la consulta presidencial del pacto Histórico en donde estarán Gustavo, Francia, Arelis, Alex y yo, cinco precandidaturas. 

Hay dos cosas completamente inéditas en la historia política que vamos a cambiar con el pacto. La primera es que serán los ciudadanos del Cesar y de Colombia los que decidirán la fórmula presidencial-vicepresidencial, porque quien gane en esa consulta será el presidente o presidenta, y quien quede de segundo será el vicepresidente, es decir, el origen de la vicepresidencia no será un capricho del candidato, sino que será de origen popular. 

No elegiremos a un caudillo, sino a un equipo de gobierno ese día. La segunda cosa es que ese domingo le ofreceremos a las mujeres colombianas la única lista cerrada en cremallera que significa paridad de género real. 

¿En qué consistirá esa lista? 

La mitad de las curules del pacto serán mujeres. La mitad del Congreso será ocupado por mujeres. Las mujeres cesarenses como las colombianas trabajan el triple. Cuidan los niños, cuidan los adultos mayores, al hijo discapacitado, van a jornalear cuando están en el campo, van a la universidad cuando pueden estudiar, van a rebuscarse en el trabajo informal o van al trabajo formal después de dejar hecho el desayuno y el almuerzo, y nadie les paga por ese trabajo de cuidado. 

El gobierno del pacto le garantizará un ingreso mínimo vital para las mujeres cabeza de hogar y para los adultos mayores. Ese es un gobierno sensible que gobernará para la gente y no para los banqueros, más ricos y terratenientes. 

No vamos a expropiar a nadie, no va haber una constituyente, no va haber reelección, no nos vamos a quedar 12 años en el poder. Vamos a gobernar cuatro años para construir las bases del cambio social en Colombia. 

¿Cuál es su papel dentro del Pacto Histórico? 

Competir en la consulta presidencial para garantizar que el próximo gobierno sea estable, equilibrado y seguro, el cual respete la vida, el Acuerdo de Paz que yo firmé a nombre del Estado hace cinco años, la propiedad privada y el emprendimiento. 

Para nadie es un secreto que los principales líderes del mundo reconocieron hace 10 días en Glasgow, Escocia, que si no cambiamos de la economía petrolera de combustibles fósiles de carbón hacia otro tipo de energías limpias, el planeta, la vida humana, van a desaparecer. 

La transición energética hacia energías limpias no es un capricho del Pacto Histórico, es un mandato de la humanidad. Entonces yo le pregunto a la gente del Cesar, que lo va a entender con el corazón, si Colombia no puede seguir viviendo del petróleo, lo hará de dos cosas en la que somos insuperables: en la producción de comida para el mundo, es decir, la agroindustria y el turismo. 

En ese sentido, el Pacto Histórico va a reactivar esas dos grandes líneas, y aprovecho esta entrevista para compartir con el pueblo del Cesar lo que haremos. 

¿Cómo será ese proceso de reactivación? 

He dicho que en nuestro gobierno el eje fundamental será la reactivación del empleo y la agroindustria. No se hacen agroindustrias sin industriales, no se hace turismo a gran escala sin empresarios. Es con la propiedad privada y los empresarios que se genera empleo, pero es con el gobierno que se hace una sociedad justa porque no puede el gobierno cerrar los ojos ante la realidad vergonzosa que dijo el Banco Mundial hace dos semanas: Colombia sigue siendo el segundo país más inequitativo de América Latina.

Cuando hay inequidad no es lo mismo que miseria, lo que hay es mala distribución de la riqueza. Aquí mal contados hay un 1.300.000 habitantes, es absolutamente doloroso que de ese millón haya 400.000 víctimas. La tercera parte de la población del Cesar ha sido víctima de una u otra manera del conflicto; víctimas de la guerrilla, el secuestro,  del paramilitarismo y de los agentes del Estado. 

Esta no es la única cifra dolorosa que compromete al pacto con las víctimas; de ese millón de cesarenses, el 24 % está por debajo de la línea de pobreza extrema, es decir, la cuarta parte de los ciudadanos. Más de 250.000 personas están hoy en pobreza extrema teniendo tierra fértil, capacidad de trabajo, alegría, turismo y empresarios que son capaces de impulsar el empleo. Se necesita gobierno y Duque significa el desgobierno, el fracaso del gobierno. 

Hay quienes lo critican por la participación de su exesposa en las listas del pacto al Senado…

Lleva 30 años trabajando en derechos humanos desde el Comité Internacional de la Cruz Roja, abogada penalista, tiene cuatro especializaciones, dos maestrías en derecho internacional y 10 años trabajando en favor de la restitución de tierra, y la última década trabajando defendiendo desde la Fiscalía General las amenazas contra las víctimas y el asesinato de víctimas del conflicto, es decir, que esta es una mujer profesional que lleva muchos más años que yo dedicada a los derechos humanos y al trabajo político con la gente. 

Es fácil descalificar a quien no se conoce con el argumento machista de que las mujeres colombianas no tienen mérito propio, sino que son la ex de o la parienta de fulano. Es por supuesto fruto de la descalificación de sectores radicales que se llaman las bodeguitas y las hay en los dos extremos. 

¿Cómo conquistar el voto en aquellos territorios donde el petrismo y el Pacto Histórico no son favoritos? 

Yo le hablo a los cuatro millones de colombianos de origen liberal, santista, de centro, verdes y de voto en blanco, esos cuatro millones de colombianos que no votaron por Petro en el 2018, los invito a dar el paso que nosotros dimos. 

Yo no soy petrista, yo no soy de izquierda ni soy de la Colombia Humana, yo soy de centro-liberal, de origen liberal desde la cuna. Mi abuelo era un campesino liberal que está enterrado en una vereda que se llama El Palo, un campesino que lo mataron por reclamar un pedazo de tierra. Soy orgullosamente hijo de esa historia al igual que nueve millones de desplazados.  

A los liberales de Colombia los invito a acompañarnos en el pacto porque elegiremos a un gobierno estable y equilibrado en esa coalición centro-izquierda, pero por sobre todo, les digo no se dejen engañar. Nuestro eje fundamental de acuerdo con Gustavo Petro es la implementación del acuerdo de paz y el desarrollo de la agroindustria como el futuro de Colombia. 

Es el alimento y el turismo el nuevo destino del país, y el Cesar tiene todo para desarrollar agroindustria y turismo. Es una de las zonas más bellas del país. Nos mintieron hace cinco años sembrando miedo, nos dijeron que si votaban por la paz los hijos se iban a volver gays, hasta hace poco decían que íbamos hacer una ley para quitarle la pensión a los jubilados y dárselas a los guerrilleros y le pusieron hasta mi nombre, pero nunca existió. 

¿Cómo son esas relaciones con el partido Liberal? 

Pues, los que tenemos origen liberal entendemos que lo que hay en esa historia es una defensa de los derechos individuales y de los colectivos. En ese orden, el liberalismo desde la Revolución Francesa defiende la libertad de prensa, opinión, el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo, la libertad de empresa que es libre mercado, ese es el liberalismo, estamos de acuerdo en esas ideas básicas. Yo invito al partido Liberal y a los liberales de Colombia a que participen con nosotros en la consulta, que no le tengan miedo a Petro. 

Yo no le tengo miedo a Petro, compito con él. Todos los demás hacen esfuerzos enormes para competir con Petro en la segunda vuelta, pues compitan de una vez como lo estoy haciendo yo en la consulta y garanticemos el triunfo en la primera vuelta. Invito al partido Liberal, con Alejandro Gaviria incluido, a que participe en la consulta del pacto, se mida, se cuente y enriquezca la respuesta equilibrada del liberalismo de centro-izquierda. 

¿Cómo está internamente el pacto? 

Sólido. Los colombianos han visto que las otras coaliciones están fracturadas, ‘la pelotera’ para decirlo en vallenato, es evidente. En el Centro Democrático seguramente se va a terminar imponiendo la más radical de todos, que es la senadora Cabal. 

Por otro lado, en el centro Verde, en donde son defensores de la paz, los he invitado e invito a que se sumen a competir en el pacto, en lugar de competir contra nosotros porque le tienen miedo a Petro. Lo que han hecho es agarrarse entre ellos. Acabamos de ver un intercambio de videos adolescentes entre Sergio Fajardo y Alejandro Gaviria haciéndose pequeños reclamos, eso no es serio para quien pretenda gobernar un país que tiene retos enormes. 

¿Cómo será su campaña política para la Presidencia? 

Estoy recorriendo el país hace apenas tres meses, Gustavo lleva tres campañas presidenciales. Denme tiempito, estamos creciendo e invitando a la gente que tiene como yo un pensamiento de origen liberal. Invitando y agradeciendo a los 140.000 cesarenses que me acompañaron con el voto por el sí a la paz hace cinco años. A ellos los invito a acompañarme en esa consulta presidencial y sumarse al pacto. 

Les aseguro que en el gobierno del pacto haré la paz completa. Yo sé parar las guerras, ya paramos una. Yo sé parar la violencia y la inseguridad, lo haremos. Yo sé reactivar la economía desde el agro colombiano. Necesitamos que esa fuerza de quienes votaron el sí a la paz nos acompañe garantizando que ese día tengamos la consulta más votada y equilibrada para el bien de los colombianos. 

¿Cómo ve al Pacto Histórico en las encuestas? 

Como lo ven todos los colombianos, imparable. El pacto es el cambio y el cambio es imparable.

¿Si ocupa el segundo lugar qué función desarrollaría? 

Apelo a los que me han acompañado en la defensa de la paz para que estén conmigo en la consulta presidencial del pacto para fortalecer esa fórmula. Lo que pueden tener claro es que ese domingo elegiremos a un equipo de gobierno y no un caudillo. El equipo será equilibrado, estable y seguro porque estaremos allí para defender la vida, la paz y el patrimonio de los colombianos.

¿Cómo ve al departamento del Cesar? 

Cuando Colombia decida, liderada por el gobierno del pacto, que su nueva vocación para ser competitiva ante el mundo es la producción de aire, agua, alimentos y turismo, todo el aparato del Estado se volcará a resolver los problemas de infraestructura que permitan que Colombia sea competitiva. 

Todo el aparato del Estado se volcará a proteger a las familias, mujeres cabezas de hogar y a ese 24 % de pobres extremos en el Cesar con el propósito de aliviar esa angustia, e incorporar esa pobreza abandonada por el Gobierno a la actividad productiva y la generación de empleo. 

El Cesar tiene todo lo que Colombia debe asumir como nuevo destino. No es la cocaína ni el petróleo, es la producción de alimentos y turismo. El Cesar sabe hacer las dos cosas, pero tiene que estar en ese proceso acompañado por el Gobierno nacional. 

Los gobiernos locales solos no pueden resolver la formalización de la tierra, el catastro multipropósito, el mecanismo de aseguramiento de las cosechas, los macrodistritos de riego y la seguridad en el territorio. Los gobiernos legítimos imponen la seguridad, los ilegítimos o ineptos como el gobierno Duque abandonan el territorio. 

Solo un gobierno comprometido con el agro, campesinado, turismo, con la nueva realidad del mundo, que es la transición energética, es capaz de darle al Cesar lo que necesita para volverlo el motor de la economía en el Caribe, puede serlo. El Caribe no es solo Barranquilla, el Caribe también es Cesar y La Guajira. 

En pocas palabras defina a estos personajes y términos: Congreso de la República… 

Abyecto y enmermelado 

¿Expresidente Juan Manuel Santos? 

Paz y buen gobierno. 

¿Expresidente Álvaro Uribe? 

Pasado y guerra. 

¿El senador Gustavo Petro? 

Cambio y Pacto Histórico. 

Alejandro Gaviria? 

(Silencio) Buen hombre. 

¿La senadora María Fernanda Cabal? 

Extrema derecha.

¿Sergio Fajardo? 

(Silencio) Nadie sabe. 

¿Federico Gutiérrez? 

Duque dos con cachumbos.

Por: Namieh Baute Barrios / EL PILÓN

@namiibb