Por Freddy Oñate Acevedo
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“Leandro Díaz”, ese será el nombre que más se repetirá en la ciudad de Valledupar y entre los amantes de la música vallenata en estos días. Su muerte, su legado, su historia serán los temas que rondarán en los distintos círculos sociales de la ciudad.

Mientras recibía condolencias de familiares y amigos, su hijo, quien lleva su mismo nombre, recordó un poco cómo era el juglar en su rol como padre, y dijo estar agradecido con la gente de Valledupar que ha acompañado a la familia en este momento. Habló además de las canciones favoritas compuestas por su padre.

EL PILÓN: ¿Cuál es el legado que deja su padre?

LEANDO DÍAZ RAMOS: El legado más grande que deja mi papá es su obra, su ejemplo de superación, que a pesar de ser una persona que nació ciega, se superó y superó las dificultades, no fue impedimento su discapacidad, su ceguera, le compuso a sus vivencias. 

E.P: ¿Qué es lo que más recordará de su padre?

L.D.R: Sus consejos, siempre nos daba, no le tenía temor a nada “vea en mi a pesar de ser ciego no le bajé la cabeza a nada”, decía. Fue un hombre que nos incitó a luchar, nos enseñó a ser rectos y un hombre que nos dio el mejor ejemplo.

E.P: Un fuerte golpe tanto para la familia como para los vallenatos…

L.D.R: La muerte de Leandro Díaz no solo ha sido dura para nosotros, será para toda Colombia y los vallenatos. El le devolvió el vallenato a Valledupar siendo guajiro, el haberlo recibido y acogerlo, y que mostrara su obra y se hiciera grande. Fue un hombre agradecido con Valledupar y el Cesar, donde nadie lo conocía y llegó a ser grande y seguirá siendo grande.

E.P: ¿Cómo fue su papel de padre?

L.D.R: Fue un gran hombre, siempre buenos consejos, buen ejemplo, un hombre recto, un gran hombre un gran padre. Me siento orgulloso de ser hijo de Leandro Díaz.

E.P: ¿Qué anécdotas recuerda que haya vivido con su padre?

L.D.R: De pequeño viajaba con él a presentaciones y parrandas, siempre, a pesar de las dificultades siempre sonreía, nunca llegue a ver a mi padre bravo, descontento. Cuando viajábamos que nos quedábamos sin transporte él siempre le sacaba chiste a todo, tenía unas salidas a esas dificultades, siempre le sacaba lo positivo de lo negativo.

E.P: De todas las composiciones de su padre, ¿cuál es su favorita?

L.D.R: Hay muchas canciones que me gustan de mi padre, Adelante, Dios no me deja, Historia de un niño, esas son las obras de todas las que él tiene, son las que más me llenan y las que más me gustan.