Carlos Marín Calderín, director de la Feria del Libro de Monteria, estuvo en Valledupar contando su experiencia, como preámbulo a la primera feria del libro que está organizando EL PILÓN en Valledupar para el segundo semestre del 2020.
Carlos Marín Calderín es un cronista y escritor colombiano que ha estado inmerso en el mundo de las letras desde hace muchos años. Es el director de la Feria del Libro de Montería, Córdoba, ‘Un río de libros’, que durante cuatro años ha logrado consolidarse como una de las más importantes del Caribe colombiano.
Ha tenido alrededor de 400 invitados entre novelistas, poetistas, cuentistas, personalidades de la farándula y personas vinculadas al mundo editorial en pro del desarrollo intelectual, educativo y cultural de la ciudadanía.
Carlos Marín Calderín estuvo en Valledupar contando su experiencia en estos eventos como preámbulo a la primera feria del libro que está organizando EL PILÓN en Valledupar para el segundo semestre del 2020, que será un espacio para lectores, escritores y colectivos culturales de la región y el país.
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Marín Calderín nos contó su experiencia como director de la Feria del Libro de Montería, la expectativa del evento en la capital del Cesar, entre otros temas.
Este es un proyecto gratis para todos los públicos que hace conversatorios, charlas, conferencias, exposiciones de pinturas, conciertos, recitales poéticos en colegios, instituciones públicas y privadas, instituciones públicas urbanas y rurales y lo que hacemos en una semana en Montería es ‘tomarnos’ desde el punto de vista cultural la ciudad y que se respire cultura con una alta participación de invitados locales, regionales del Caribe colombiano y del país.
El año pasado tuvimos a dos escritores internaciones: María Kodama, escritora Argentina y viuda de Jorge Luis Borges, uno de los escritores más importantes de la literatura universal y de los más importantes del siglo XX, y el nicaragüense Sergio Ramírez, ganador del premio Cervantes de Novela en el año 2017.
Eso ha emprendido allá una transformación cultural que ha tocado diferentes sectores de la ciudad, todos los estratos con una alta participación de invitados locales y la ciudad está feliz con eso.
En términos generales, es un poco de esa experiencia lo que queremos hacer en la ciudad de Valledupar, realizar la primera feria del libro de Valledupar con el auspicio y la organización del diario EL PILÓN con un apoyo del sector público y de la empresa privada y ‘tomarnos’ esta ciudad desde el punto de vista de las letras en diferentes sectores.
Aquí sería una feria en un principio descentralizada, es decir, que lo haríamos en diferentes sectores de la ciudad. Yo he conocido en estos tres días de estar aquí en la ciudad unos sitios muy importantes como Tlon Bar, Palenque, la plaza Alfonso López, la Casa de la Cultura, el auditorio Crispín Villazón de Armas, la biblioteca Rafael Carrillo Lúquez, Bellas Artes y la idea es hacerla en diferentes puntos con un elemento innovador que podría tener un youtuber para los públicos jóvenes, talleres de pintura para los niños, creación literaria, comics y temas diversos.
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La feria del libro es la gran excusa para reunirnos alrededor de la palabra, de la conversación, de temas educativos, culturales y académicos y en ese sentido no va a tener solamente temas literarios, si no que va a ser una feria incluyente desde la primera versión con temática relacionada a la novela, la poesía, el cuento, el ensayo, pero también al medio ambiente, a la ciudad, al patrimonio arquitectónico, a la diversidad de género y a todo lo que tiene que ver con el universo afro y étnico que en este caso es tan importante por los indígenas, y temas de ciudad y ciudadanía, por qué no traer un experto en temas económicos y patrimonio arquitectónico.
Hemos conversado con los organizadores de la primera Feria del Libro de Valledupar que si bien Valledupar tiene un evento que es de los más importantes en Colombia por su impacto en la cultura como lo es el Festival Vallenato, de todas maneras la feria no desconocería la importancia de un evento como ese y por supuesto programaría entre sus páginas y sus días eventos relacionados con el universo de la música vallenata y principalmente de la tradición y, por qué no, pensar también en las nuevas generaciones que nos acompañen en la programación.
La Red Nacional de las Ferias del Libro que dirige la Cámara Colombiana del Libro, que a su vez hace la Feria Internacional del Libro en Bogotá, es una asociación de directores de ferias que reúne en estos momentos a 19 ferias, pero en Colombia hay más de 40 ferias, pero no todas están reconocidas.
Lo importante es que comenzar con el reconocimiento de la Red Nacional de Ferias del Libro da un posicionamiento a nivel nacional, la incluye en la programación de la Feria del Libro que ellos mandan a todas las editoriales, a todas los escritores, a las editoriales nacionales, latinoamericanas, norteamericanas y en todas partes y ya empieza a formar parte como de la ruta de ferias y la gente que empieza a consultar esa programación se organiza y va a los eventos y lo importante es que la feria no coincidan para que la gente tenga la oportunidad en diferentes partes del país de asistir a la Feria del Libro de Valledupar.
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Así que el acompañamiento de la Red Nacional de Ferias es importante porque la pone en el panorama nacional. Además, Valledupar tiene un atractivo distinto a lo que tienen las otras regiones y es que aquí la parte cultural está muy sólida, muy fuerte, tiene un centro histórico maravilloso y es una ciudad que tiene casi 500 años y no hay que desconocer que la gente con la música vallenata también se siente muy atraída para poder venir y poder participar de esta programación.
Una feria del libro es importante porque se constituye en una excusa para reunirnos alrededor de la palabra y de los temas de tradición, cultura y de tradición lingüística. Una feria del libro es importante porque los estudiantes, los jóvenes y los autores locales tienen una comunicación permanente con los autores nacionales e internacionales, un espacio que solo se vive en ese momento porque el lector, que es lo más importante en una feria del libro, se le permite la posibilidad de tener una comunicación directa con los invitados: Héctor Abad Faciolince, Piedad Bonet, Alberto Salcedo Ramos, tanta gente que da conferencias y discursos y que tienen una visión diversa y democrática pluralista del mundo, se reúne en una feria del libro a decir que esto es una excusa para escucharnos, conversar y respetarnos en nuestras diferencias.
Las ferias del libro son importantes porque les permite a los escritores establecer un contacto directo con las editoriales como Grupo Planeta, y otras editoriales muy importantes. Así que traerlas a la ciudad es permitirles a las personas que aquí escriben desde hace mucho tiempo que tengan un contacto directo con los promotores de ferias y que se lleven sus contactos y propuestas.
Te permite el acceso directo con la editorial y los lectores van a tener la posibilidad de comprar muchísimos libros que no están en circulación en la ciudad y que vienen por cuatro o cinco días solamente.
Por: Carmen Lucía Mendoza Cuello / EL PILÓN
Carlos Marín Calderín, director de la Feria del Libro de Monteria, estuvo en Valledupar contando su experiencia, como preámbulo a la primera feria del libro que está organizando EL PILÓN en Valledupar para el segundo semestre del 2020.
Carlos Marín Calderín es un cronista y escritor colombiano que ha estado inmerso en el mundo de las letras desde hace muchos años. Es el director de la Feria del Libro de Montería, Córdoba, ‘Un río de libros’, que durante cuatro años ha logrado consolidarse como una de las más importantes del Caribe colombiano.
Ha tenido alrededor de 400 invitados entre novelistas, poetistas, cuentistas, personalidades de la farándula y personas vinculadas al mundo editorial en pro del desarrollo intelectual, educativo y cultural de la ciudadanía.
Carlos Marín Calderín estuvo en Valledupar contando su experiencia en estos eventos como preámbulo a la primera feria del libro que está organizando EL PILÓN en Valledupar para el segundo semestre del 2020, que será un espacio para lectores, escritores y colectivos culturales de la región y el país.
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Marín Calderín nos contó su experiencia como director de la Feria del Libro de Montería, la expectativa del evento en la capital del Cesar, entre otros temas.
Este es un proyecto gratis para todos los públicos que hace conversatorios, charlas, conferencias, exposiciones de pinturas, conciertos, recitales poéticos en colegios, instituciones públicas y privadas, instituciones públicas urbanas y rurales y lo que hacemos en una semana en Montería es ‘tomarnos’ desde el punto de vista cultural la ciudad y que se respire cultura con una alta participación de invitados locales, regionales del Caribe colombiano y del país.
El año pasado tuvimos a dos escritores internaciones: María Kodama, escritora Argentina y viuda de Jorge Luis Borges, uno de los escritores más importantes de la literatura universal y de los más importantes del siglo XX, y el nicaragüense Sergio Ramírez, ganador del premio Cervantes de Novela en el año 2017.
Eso ha emprendido allá una transformación cultural que ha tocado diferentes sectores de la ciudad, todos los estratos con una alta participación de invitados locales y la ciudad está feliz con eso.
En términos generales, es un poco de esa experiencia lo que queremos hacer en la ciudad de Valledupar, realizar la primera feria del libro de Valledupar con el auspicio y la organización del diario EL PILÓN con un apoyo del sector público y de la empresa privada y ‘tomarnos’ esta ciudad desde el punto de vista de las letras en diferentes sectores.
Aquí sería una feria en un principio descentralizada, es decir, que lo haríamos en diferentes sectores de la ciudad. Yo he conocido en estos tres días de estar aquí en la ciudad unos sitios muy importantes como Tlon Bar, Palenque, la plaza Alfonso López, la Casa de la Cultura, el auditorio Crispín Villazón de Armas, la biblioteca Rafael Carrillo Lúquez, Bellas Artes y la idea es hacerla en diferentes puntos con un elemento innovador que podría tener un youtuber para los públicos jóvenes, talleres de pintura para los niños, creación literaria, comics y temas diversos.
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La feria del libro es la gran excusa para reunirnos alrededor de la palabra, de la conversación, de temas educativos, culturales y académicos y en ese sentido no va a tener solamente temas literarios, si no que va a ser una feria incluyente desde la primera versión con temática relacionada a la novela, la poesía, el cuento, el ensayo, pero también al medio ambiente, a la ciudad, al patrimonio arquitectónico, a la diversidad de género y a todo lo que tiene que ver con el universo afro y étnico que en este caso es tan importante por los indígenas, y temas de ciudad y ciudadanía, por qué no traer un experto en temas económicos y patrimonio arquitectónico.
Hemos conversado con los organizadores de la primera Feria del Libro de Valledupar que si bien Valledupar tiene un evento que es de los más importantes en Colombia por su impacto en la cultura como lo es el Festival Vallenato, de todas maneras la feria no desconocería la importancia de un evento como ese y por supuesto programaría entre sus páginas y sus días eventos relacionados con el universo de la música vallenata y principalmente de la tradición y, por qué no, pensar también en las nuevas generaciones que nos acompañen en la programación.
La Red Nacional de las Ferias del Libro que dirige la Cámara Colombiana del Libro, que a su vez hace la Feria Internacional del Libro en Bogotá, es una asociación de directores de ferias que reúne en estos momentos a 19 ferias, pero en Colombia hay más de 40 ferias, pero no todas están reconocidas.
Lo importante es que comenzar con el reconocimiento de la Red Nacional de Ferias del Libro da un posicionamiento a nivel nacional, la incluye en la programación de la Feria del Libro que ellos mandan a todas las editoriales, a todas los escritores, a las editoriales nacionales, latinoamericanas, norteamericanas y en todas partes y ya empieza a formar parte como de la ruta de ferias y la gente que empieza a consultar esa programación se organiza y va a los eventos y lo importante es que la feria no coincidan para que la gente tenga la oportunidad en diferentes partes del país de asistir a la Feria del Libro de Valledupar.
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Así que el acompañamiento de la Red Nacional de Ferias es importante porque la pone en el panorama nacional. Además, Valledupar tiene un atractivo distinto a lo que tienen las otras regiones y es que aquí la parte cultural está muy sólida, muy fuerte, tiene un centro histórico maravilloso y es una ciudad que tiene casi 500 años y no hay que desconocer que la gente con la música vallenata también se siente muy atraída para poder venir y poder participar de esta programación.
Una feria del libro es importante porque se constituye en una excusa para reunirnos alrededor de la palabra y de los temas de tradición, cultura y de tradición lingüística. Una feria del libro es importante porque los estudiantes, los jóvenes y los autores locales tienen una comunicación permanente con los autores nacionales e internacionales, un espacio que solo se vive en ese momento porque el lector, que es lo más importante en una feria del libro, se le permite la posibilidad de tener una comunicación directa con los invitados: Héctor Abad Faciolince, Piedad Bonet, Alberto Salcedo Ramos, tanta gente que da conferencias y discursos y que tienen una visión diversa y democrática pluralista del mundo, se reúne en una feria del libro a decir que esto es una excusa para escucharnos, conversar y respetarnos en nuestras diferencias.
Las ferias del libro son importantes porque les permite a los escritores establecer un contacto directo con las editoriales como Grupo Planeta, y otras editoriales muy importantes. Así que traerlas a la ciudad es permitirles a las personas que aquí escriben desde hace mucho tiempo que tengan un contacto directo con los promotores de ferias y que se lleven sus contactos y propuestas.
Te permite el acceso directo con la editorial y los lectores van a tener la posibilidad de comprar muchísimos libros que no están en circulación en la ciudad y que vienen por cuatro o cinco días solamente.
Por: Carmen Lucía Mendoza Cuello / EL PILÓN