EL PILÓN 

Indígenas arhuacos y campesinos de Pueblo Bello sostuvieron una reunión con la Secretaría de Infraestructura del departamento del Cesar, debido a que tenían inconformidad frente a la construcción de la vía Jimaín- Minas de Iracal, la cual está proyectada para 5.76 kilómetros de pavimentación. 

Los líderes indígenas y la comunidad en general se quejaban porque no se ha dado la socialización y consulta previa para el inicio de la obra, según señaló José Peralta, líder campesino e integrante del Ordenamiento Social, Rural y Uso del Suelo. 

Explicó que, la Corte Constitucional a través del Auto 004 estableció que al iniciar cualquier tipo de inversión en territorio indígena debe existir una consulta previa, en este caso con las autoridades arhuacas, lo cual no se había dado. 

“Este paso no se había podido realizar porque la comunidad arhuaca estaba exigiendo un compromiso que se hizo con la vigencia anterior de la Gobernación del Cesar cuando se realizó la obra El Zanjón- Pueblo Bello, que no le cumplieron y esto consistía en un plan de manejo ambiental para evitar afectaciones en el ecosistema y se debía conservar cuencas hidrográficas y por ello este territorio se afectó por encima de la construcción de la vía”, explicó Peralta. 

En este sentido añadió que para la realización de la pavimentación se debía cumplir principalmente con la conservación del medio ambiente. 

“Los compromisos fueron realizar una reunión en que la Gobernación, junto con el operador que se encarga de ejecutar la obra, harán una exposición del componente técnico de la vía con las comunidades.  Se arranca con la ejecución de la obra, pero simultáneamente las comunidades indígenas y los campesinos solicitarán a la administración departamental buscar alternativas para dar cumplimiento de los compromisos pactados con los indígenas como el plan de manejo ambiental”, dijo Peralta. 

Igualmente quedó pactado que se realice una planificación para que se eviten accidentes de tránsito en esta nueva vía ya que la circulación de vehículos aumentará y hay un asentamiento indígena con numerosos niños que al salir a la carretera podrían estar en riesgo. 

“Hay otra exigencia, pero se sale del resorte de la Gobernación, es de la Alcaldía de Pueblo Bello. Y es un cerro que las comunidades indígenas piden sea respetado porque es sagrado donde realizan pagamentos y ritos de sus costumbres y tradiciones”, puntualizó José Peralta. 

Esta vía tendrá una inversión de $9.840 millones y hace parte del Plan Vial Departamental del Cesar con recursos entre el Gobierno nacional con el 70 % y el departamental con 30 %.