Por: Darío Arregocés

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Hace dos meses el mundo conoció el nombre del cardenal Jorge Mario Bergoglio,  elegido Vicario de Cristo, quien asume su papado con el nombre de Francisco. De entrada causó buena impresión, por su humildad. El pueblo  hispano, acogió su nombre con alborozo. No obstante dadas las circunstancias actuales, son muchos los interrogantes que surgen en torno a temas que resultan ser muy delicados y de los cuales va a depender el futuro de nuestra Iglesia Católica, entre los que se encuentran: El fundamentalismo, el aborto y  el celibato.

A ese respecto tuve la dicha de encontrar el libro: “Sobre el Cielo y la Tierra”, fruto de un diálogo inter-religioso, que no ecuménico, habido entre el rabino AbahamSkorka y el entonces cardenal Bergoglio, quienes hablaron de manera abierta y sincera,  sobre lo divino y lo humano.  Un diálogo enriquecedor, donde afloran más las  coincidencias  entre ambas visiones religiosas,que las  diferencias existentes.

Es tan ambiciosa la temática que no puede abarcarse en tan corto espacio, por lo que desde ya anuncio que será también tema de mi próxima columna.

Empecemos con el tema del fundamentalismo, sobre el cual el cardenal Bergoglio, estáen desacuerdo, pues considera que no se debe  suplir la voluntad de otra persona, pues  el maestro propone verdades de Dios, pero  deja a su discípulo en libertad de decidir. Hallamos en el judaísmo líderes que anulan la religiosidad y dictaminan sobre la vida del otro. Skorka, señala que  el fundamentalismo no es solo una cuestión religiosa se da en todos los órdenes incluso en el político solo que duele más cuando se mata en nombre de Dios y concluye diciendo: “El fundamentalismo no es lo que Dios quiere”.

En cuanto al aborto, el cardenal Bergoglio expresa tajantemente: “El aborto es matar a quien no puede defenderse,es interrumpir la vida de un ser humano que ya tiene código genético y eso no es ético”. El judaísmo, expresa el rabino Skorka, condena el aborto, pero lo permite en circunstancias tales como cuando la vida de la madre corre peligro.

Pasando al celibato, el cardenalBergoglio expresa que está de acuerdo en que se mantenga  con su pro y su contra, porque son diez siglos de buenas experiencias más que de fallas. “Si un cura embaraza a una mujer, debe dejar el sacerdocio y hacerse cargo de su hijo”.Skorka manifiesta que la visión judía  enseña que no hay que meterse con lo mundano, pues busca la vida momentánea del ahora, dejando de lado la vida eterna.Continuará.