Representante artístico, compositor y folclorista, son las tres profesiones que ha ejercido Dagoberto Suárez Manjarrés a lo largo de su vida. Es conocido en el mundo vallenato por haber sido manager de Diomedes Díaz, Jorge Oñate y Poncho Zuleta. Además, por ser el compositor de la canción inédita ‘Judas Iscariote’, contestación de ‘La custodia de Badillo’ de Rafael Escalona.

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Suárez Manjarrés, fue el primer representante que tuvo el ‘Cacique de La Junta’, a quien conoció en una parranda en el corregimiento de Badillo, ubicado al norte de Valledupar, en la década de los años 70, cuando era guacharaquero del grupo conformado por Idelciro Zabaleta y Bolívar Urrutia.

“…Nunca pensamos que Diomedes fuera a ser más grande que Idelciro y ahí estaba yo. Él dijo que iba a ser cantante y lo logró. Desde 1978 somos amigos, a Diomedes le llevo siete años de edad”, dijo a EL PILÓN.

Se retiró de la agrupación en 1983 al recibir una mejor oferta laboral por parte de Jorge Oñate. Ya Diomedes había grabado once álbumes y era reconocido en el folclor.

En esa época, el ‘Jilguero de América’ estaba acompañado de Juancho Rois y eran conocidos sus éxitos ‘Paisaje de sol’, ‘Lirio rojo’, ‘La gordita’ y ‘El cariño de mi pueblo’, entre otros. Luego le siguieron los acordeoneros Álvaro López y Gonzalo Arturo ‘Cocha’ Molina, retirándose en la década de los 90.

Siguió su camino y llegó a la agrupación de Poncho Zuleta, donde estuvo por siete años. Actualmente Dagoberto Suárez sigue ejerciendo la profesión de manager, pero no tiene un grupo definido, como lo reveló a EL PILÓN.

De sus correrías con Diomedes Díaz recordó que un Viernes Santo formaron una parranda en Badillo que fue interrumpida por su tío Gregorio Díaz.

“Un Viernes Santo un tío, que era corregidor de Badillo, fue hasta la parranda que teníamos y me dijo: ‘Sobrino, usted viene de Valledupar a formarme desorden en Badillo’. Era malo parrandear los días santos, era un pecado y mi tío Gregorio Díaz Zabaleta nos acabó la parranda, pero por ahí no estaba Joaco Guillén, quizás dónde estaría”, dijo.

‘JUDAS ISCARIOTE’

Otra de sus pasiones es la composición, talento que brotó cuando era joven y lo llevó a escribir ‘Judas Iscariote’, canción de respuesta a ‘La custodia de Badillo’ de Rafael Escalona. Su anhelo era que Diomedes Díaz le grabara ese tema, sin embargo, pasaron los años y el sueño no pudo cumplirse. Sin embargo, le grabó ‘El palomo’ en el álbum Tu serenata con el acordeón de Nicolás ‘Colacho’ Mendoza’.

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“Le pedí a Diomedes que si algún día era grande me grabara esa canción. No se dieron las cosas, pasó un tiempo que no nos vimos, después nos encontramos cuando yo era asistente de Rafita Zuleta y pasé a ser manager de Diomedes, pero me dediqué a los negocios y contratos y dejé la composición”, dijo.

Ante la pregunta de por qué no continúo componiendo, Dagoberto Suárez respondió que no era un hombre que sufría de despecho y que afortunadamente era feliz en su matrimonio.

“Creo que no se me dio porque no era un hombre que sufría de despecho, ya estaba casado y era muy feliz. Los que componen son los que viven despechados y dejé la música, pero el compositor siempre hace música y quien no lo hace está en nada. Nosotros todos los días chiflamos y algo se nos viene a la cabeza”, concluyó.

Finalizó interpretando unos versos de ‘Judas Iscariote’ y refirió que se la ofreció a su amigo Iván Villazón cuando grabó ‘Los altares de Valencia’ de Calixto Ochoa, pero no ha vuelto a tocar el tema.

“Me dio tristeza y llanto cuando a Badillo llegué,
Al ver mi pueblo tan solo y arruinado,
Primero su custodia le robaron
Ahora su iglesia se les va a caer,
Primero su custodia le robaron
Ahora su iglesia se les va a caer”

COMPOSICIÓN VALLENATA

Dagoberto Suárez habló también a la composición actual en la música vallenata, criticando las canciones en las que hacen referencia a la mujer, en donde ya no las elogian, sino que las maltratan, por lo que pidió que las letras volvieran a sus raíces costumbristas.

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“‘La música es como el agua y no se puede estancar porque se pudre’, eso lo dijo Alfredo Gutiérrez. La música tiene que ir avanzando, pero se necesita que las raíces no se alejen y permitan componerle a un primo, compadre, pero las canciones ahora son es maltratando a la mujer: ‘Que me hizo esto, que aquello’, y nosotros no estamos para eso. Rafael Escalona nunca habló mal de una mujer, siempre la elogiaba, en cambio los compositores nuevos ahora dicen es que le pegó cacho”, concluyó.

POR: CARMEN LUCÍA MENDOZA CUELLO/ EL PILÓN

@luciamendozac