Por Claudia Patricia Núñez

Transitar por las calles de la ciudad se ha convertido en una verdadera tortura, ya que las mismas se encuentran llenas de huecos que no sólo afectan el desempeño de los vehículos sino que ponen en riesgo la vida tanto de conductores como de peatones. Creo que los vallenatos y los foráneos que por años han vivido en la ciudad, no habíamos tenido memoria de un deterioro semejante de toda la malla vial que se extiende no solamente a las vías principales sino a las vías internas de barrios y urbanizaciones, con razón se repite por todos los rincones del valle que desde la administración de Rodolfo Campo Soto y Aníbal Martínez aquí no se construye una vía nueva y que sólo ellos pudieron tener una visión de lo que sería la Valledupar del futuro. Pero si queremos transformar a Valledupar no podemos quedarnos en las añoranzas del pasado, debemos comenzar a  planificarla responsablemente con miras a convertirla en una ciudad de primer nivel. Valledupar no puede ser una ciudad competitiva y sostenible mientras no tenga un sistema vial adecuado, flexible, que facilite la circulación y evacuación rápida y sin traumas del parque automotor que circula por las calles y obviamente mientras no cuente con un sistema de transporte público que permita oxigenar las calles que se encuentran atestadas de carros, motos, bicicletas y aunque el proceso licitatorio del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP) ya comenzó,  se deben tomar acciones inmediatas a corto plazo para solucionar el problema de movilidad de la ciudad que está intrínsecamente ligado al mal estado de las vías. Hace cuánto no se le hace un verdadero mantenimiento a las principales vías y no un remedo de reparcheo?, creo que ya va siendo hora que la sectorial competente nos diga a todos los vallenatos qué estrategias ó acciones se implementarán, pero sobretodo con que recursos cuenta para la reparación de la malla vial de la ciudad que no aguanta más, como también cuáles son los proyectos para la nueva estructura vial que soporte el desarrollo desaforado, la expansión y el proceso migratorio tan fuerte que estamos viviendo.

Se requieren soluciones ya, pero no improvisadas, a futuro también, pero consignadas en un verdadero plan vial y de movilidad que marque la ruta de intervención de las vías, avenidas y calles de la ciudad, intervención que es un clamor a gritos de la ciudadanía y que debe tener un tratamiento prioritario, pues la problemática vial y de movilidad están incidiendo no sólo en la ocurrencia de accidentes de tránsito sino en el estado de ánimo de los vallenatos que ven con impotencia como cada día se deteriora más la estructura vial de nuestra ciudad.

POSDATA: y para ponerme a tono con la noticia de la semana, la renuncia del PAPA BENEDICTO XVI es un ejemplo de grandeza y humildad que deberían seguir el Vicepresidente Garzón, El Presidente Hugo Chávez, y muchos políticos que a cualquier precio quieren atornillarse en el poder, aún a costa de su salud.

[email protected]