Luego de avances interrumpidos, e incluso creer que el proyecto quedaría en el olvido, el Gobierno nacional anunció este 16 de diciembre la adjudicación de las obras con las que se realizará ese nuevo eje vial entre Valledupar y La Paz.
Desde la década de los 80 en la zona norte del departamento del Cesar se está hablando sobre la necesidad de construir una vía alterna para viajar entre los municipios de Valledupar y La Paz. Luego de avances interrumpidos, e incluso creer que el proyecto quedaría en el olvido, el Gobierno nacional anunció este 16 de diciembre la adjudicación de las obras con las que se realizará ese nuevo eje vial entre Valledupar y La Paz. Ganó el Consorcio MP, quien presentó una oferta por $102.100 millones.
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Actualmente, el corredor vial que conecta las ciudades de Valledupar y La Paz, vía perteneciente al Instituto Nacional de Vías, tiene una longitud aproximada de 13.4 kilómetros totalmente pavimentados, que se desarrollan principalmente sobre una topografía plana. Con la construcción de una doble calzada, el recorrido no superará los 9 kilómetros, reduciendo el tiempo de viaje entre ambos municipios.
Además de reducir el tiempo, esta obra que iniciaría a construirse en enero y que demoraría 18 meses, ayudaría a reducir el tráfico vehicular del actual tramo.
Según estudios previos, la vía Valledupar-La Paz registró durante el 2018 un Transito Promedio Diario de 12.879 vehículos, 90 % de ellos autos, buses: 2%, y camiones: 8%, convirtiéndose en el sector vial del departamento del Cesar con mayor circulación vehicular y sobre el cual se proyecta un flujo cercano a los 19.000 vehículos diarios para el año 2030.
Por eso, se recomienda que desde el punto de vista de tráfico, “se tiene la necesidad de realizarse la construcción de una segunda calzada en el mencionado corredor”.
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Esas condiciones de capacidad y niveles de servicio de la vía actual “representan un alto potencial de accidentalidad que pone en riesgo la seguridad de los usuarios”.
“Hay una conurbación permanente entre los municipios del Área Metropolitana que tienen a Valledupar como su polo de desarrollo. Esto tendrá unos beneficios del orden económico para la región. Cuando pasas de 17.6 kilómetros a 8.9 kilómetros que tiene la recta, habrá menor consumo de combustible, lubricante, aceite, llantas. Se reducen los costos”, explicó Álvaro José Soto, quien participó como profesional del Invías en la creación del convenio con el departamento del Cesar.
Una de las responsabilidades del contratista será realizar la auscultación y patología de las obras existentes del ‘Puente Rafael Escalona’ sobre el río Cesar, “a fin de que se permita evaluar y definir las intervenciones necesarias para su funcionamiento en condiciones de seguridad”. ¿Por qué? La entidad señaló que desde el año de construcción hasta la fecha, la estructura ha estado sometida y expuesta a factores ambientales y climáticos que pueden haber provocado “deterioros que afecten su estado físico y/o su condición de funcionamiento”.
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“En los años 80 no se pudo culminar porque algunos propietarios entre Valledupar y el río Cesar tenían diferencias. Y por eso no se concretó. Después llegaron otras dificultades. Estamos en el proceso de perfeccionamiento del contrato. Esperamos que en el mes de enero se dé la orden de inicio. En enero una vez se firme el acta de inicio, el contratista tiene un plazo para realizar revisión y actualización de los estudios. Una vez se aprueben esos estudios arranca la obra”, agregó Soto.
POR REDACCIÓN EL PILÓN.
Luego de avances interrumpidos, e incluso creer que el proyecto quedaría en el olvido, el Gobierno nacional anunció este 16 de diciembre la adjudicación de las obras con las que se realizará ese nuevo eje vial entre Valledupar y La Paz.
Desde la década de los 80 en la zona norte del departamento del Cesar se está hablando sobre la necesidad de construir una vía alterna para viajar entre los municipios de Valledupar y La Paz. Luego de avances interrumpidos, e incluso creer que el proyecto quedaría en el olvido, el Gobierno nacional anunció este 16 de diciembre la adjudicación de las obras con las que se realizará ese nuevo eje vial entre Valledupar y La Paz. Ganó el Consorcio MP, quien presentó una oferta por $102.100 millones.
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Actualmente, el corredor vial que conecta las ciudades de Valledupar y La Paz, vía perteneciente al Instituto Nacional de Vías, tiene una longitud aproximada de 13.4 kilómetros totalmente pavimentados, que se desarrollan principalmente sobre una topografía plana. Con la construcción de una doble calzada, el recorrido no superará los 9 kilómetros, reduciendo el tiempo de viaje entre ambos municipios.
Además de reducir el tiempo, esta obra que iniciaría a construirse en enero y que demoraría 18 meses, ayudaría a reducir el tráfico vehicular del actual tramo.
Según estudios previos, la vía Valledupar-La Paz registró durante el 2018 un Transito Promedio Diario de 12.879 vehículos, 90 % de ellos autos, buses: 2%, y camiones: 8%, convirtiéndose en el sector vial del departamento del Cesar con mayor circulación vehicular y sobre el cual se proyecta un flujo cercano a los 19.000 vehículos diarios para el año 2030.
Por eso, se recomienda que desde el punto de vista de tráfico, “se tiene la necesidad de realizarse la construcción de una segunda calzada en el mencionado corredor”.
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Esas condiciones de capacidad y niveles de servicio de la vía actual “representan un alto potencial de accidentalidad que pone en riesgo la seguridad de los usuarios”.
“Hay una conurbación permanente entre los municipios del Área Metropolitana que tienen a Valledupar como su polo de desarrollo. Esto tendrá unos beneficios del orden económico para la región. Cuando pasas de 17.6 kilómetros a 8.9 kilómetros que tiene la recta, habrá menor consumo de combustible, lubricante, aceite, llantas. Se reducen los costos”, explicó Álvaro José Soto, quien participó como profesional del Invías en la creación del convenio con el departamento del Cesar.
Una de las responsabilidades del contratista será realizar la auscultación y patología de las obras existentes del ‘Puente Rafael Escalona’ sobre el río Cesar, “a fin de que se permita evaluar y definir las intervenciones necesarias para su funcionamiento en condiciones de seguridad”. ¿Por qué? La entidad señaló que desde el año de construcción hasta la fecha, la estructura ha estado sometida y expuesta a factores ambientales y climáticos que pueden haber provocado “deterioros que afecten su estado físico y/o su condición de funcionamiento”.
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“En los años 80 no se pudo culminar porque algunos propietarios entre Valledupar y el río Cesar tenían diferencias. Y por eso no se concretó. Después llegaron otras dificultades. Estamos en el proceso de perfeccionamiento del contrato. Esperamos que en el mes de enero se dé la orden de inicio. En enero una vez se firme el acta de inicio, el contratista tiene un plazo para realizar revisión y actualización de los estudios. Una vez se aprueben esos estudios arranca la obra”, agregó Soto.
POR REDACCIÓN EL PILÓN.