Iván Ricardo Gómez Rivera es un vallenato que impulsa y supervisa proyectos educativos en zonas de difícil acceso del país. Es ingeniero civil egresado de la Fundación Universitaria del Área Andina sede Valledupar y de la mano de Findeter y el Ministerio de Educación busca por medio de la reestructuración de centros educativos mejorar la calidad de vida de niños y jóvenes de estas regiones apartadas.

Tiene 24 años, ha recorrido la mayoría de las veredas de los departamentos de Chocó, Putumayo, La Guajira, Nariño y Cesar, ejecutando y supervisando proyectos licitados por Findeter, la entidad con la que labora desde hace dos años y con la que trabaja de la mano del Ministerio de Educación en la adecuación de instituciones educativas, buscando de esta manera promover la disminución de la deserción escolar.

Uno de los trabajos realizados fue en Putumayo, en el Plan de Reconstrucción de Mocoa, después de que muchos de los centros educativos se vieron destruidos por la avalancha que afectó a la población en 2017; allí ha realizado la ampliación de la sede Belén del Palmar de la Institución Educativa Bilingüe Inga y la creación de nuevos espacios académicos del colegio Alto Afán.

“Es gratificante trabajar con poblaciones que realmente necesitan que se atiendan sus necesidades; trabajamos con resguardos indígenas y con veredas que se encuentran totalmente apartadas, donde la ayuda del Estado muy difícilmente llega”, afirmó Gómez Rivera.

Iván participará en proyectos en el departamento del Cesar, donde se adecuarán centros educativos de veredas cercanas a los municipios de Atánquez, Mariangola y Aguas Blancas. “Estamos trabajando a un cliente oficial que es el Gobierno, pero hay un cliente final que son los niños y jóvenes que pueden disfrutar de mejores espacios en sus instituciones educativas, espacios agradables para ellos que los puedan motivar a que no se queden sin estudiar”, acotó.

Iván desea seguir trabajando en favor de las comunidades, es fiel creyente de que las profesiones deben ser estudiadas con el fin de mejorar la calidad de vida de las poblaciones más necesitadas y que la ingeniería debe desempeñarse prioritariamente con fines sociales.