El gremio de taxistas que reside en la ciudad de Valledupar se reunió recientemente para hacerle frente a la inseguridad debido a la vulnerabilidad de este gremio de transportistas frente a los atracos y actos vandálicos de los delincuentes que agreden a los conductores generalmente en las horas de la noches.

Los puntos críticos de los taxistas son los sectores de Mareigua, la carrera 27 y 44, el barrio Villa Castro, Álamos III, Nuevo Milenio, Las torres de Nando Marín y la margen derecha del río Guatapurí según Wainer Alfaro, presidente de la Asociación Transportista Terminal de Valledupar, Asotaterva.

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Alfaro aseguró que los conductores que trabajan en el turno de la noche son víctimas de agresiones verbales y de bandas delincuencias que engañan a los taxistas solicitando el servicio para luego robarlos y herirlos con arma blanca o algún tipo de objeto contundente en caso de que los trabajadores de la ‘franja amarilla’ se resistan.

En vista de esta problemática que durante años ha afectado a los más de 3.000 conductores que transitan por la ciudad, el gremio busca acciones contundentes que disminuya el número de atracos que ponen en peligro sus vidas, por parte de las autoridades.

El presidente de esta asociación asevera que desde las nueve de la noche en adelante la inseguridad para la prestación del servicio público es mayor porque los delincuentes se asocian en pequeños grupos para atracar a los taxistas en calles donde no hay presencia policial.

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Al respecto de la inseguridad que aseguran tener los transportistas, la Policía Nacional comentó que en las horas de las noches se distribuyen cuadrantes de hasta 12 unidades que cubren los sectores con mayores índices de hurto como: el barrio La Nevada, Mareigua, Ciudadela Los 450 años, Los Fundadores, 12 de Octubre, entre otros.

El periódico EL PILÓN conoció que existe una propuesta conjunta entre transportistas y autoridades para la implementación de un sistema de radio taxi con un botón de pánico que tenga una comunicación directa con la autoridad, en caso de que un conductor prevea una situación de peligro que atente contra su vida, la cual sería una solución para disminuir los atracos, porque los uniformados podrían actuar rápido y lograr frustrar el hecho ilícito según las fuentes consultadas.

Este proyecto no ha sido implementado porque se necesita la colaboración de la Alcaldía Municipal, la Gobernación del Cesar y el gremio afectado para que sea posible que este sistema brinde un mayor acompañamiento y seguridad a los taxistas.

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En lo que va corrido del año no ha habido muertes de taxistas producto de la delincuencia común al igual que el año pasado. Sin embargo, en el 2019 hubo 1.600 lesionados y se registraron 3.800 hurtos que ponen en evidencia los índices de delincuencias que han ido en aumento según la Policía Nacional.

El periódico EL PILÓN quiso conocer la posición de la Secretaría de Gobierno Municipal con respecto a las denuncias del gremio de taxistas pero no fue posible.

POR: NAMIEH BAUTE BARRIOS / EL PILÓN
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