El ama de casa Erika López Galán, pereció de tres puñaladas, mientras que su hija, de 11 años, sufrió dos y se salvó de morir porque salió corriendo del sitio de la tragedia.
El saldo de víctimas fatales aumentó a cinco, la madrugada de ayer, con el fallecimiento de Liliana Patricia Montes García, de 35 años, en una clínica de Bosconia.