En las viviendas de Guacoche, jurisdicción de Valledupar, comienza a notarse un gigantesco abanico de colores, gracias a una iniciativa conjunta entre Fundación Carboandes, Alcaldía, Pintuco y Fundación Mundial.
No es ganas de molestar, pero cada vez que se publican estadísticas nacionales de cualquier índole el Cesar y Valledupar ocupan los últimos lugares de las valoradas positivamente y los primeros en las negativas.
El pasado fin de semana visité mi región y especialmente a mi pueblo, La Loma, que realizaba la versión 23 del Festival de Canciones Samuel Martínez y, por supuesto, en plenas fiestas patronales de la Virgen del Carmen.
El estudio socioeconómico que contrató la alcaldía de Valledupar, advierte sobre 6 mil niños que han desertado de la educación.
En Valledupar cuesta alrededor de 40 mil pesos oscurecer los vidrios de un vehículo tipo taxi, o como se le llama popularmente, polarizar, y según los taxistas, el principal motivo para forrar los carros con este velo es el inclemente sol de la capital del Cesar.
El informe sobre el acuerdo rural de La Habana, deja inmensas inquietudes por las propuestas que revela y las amenazas que oculta.
Los empresarios agrícolas Jorge Eliécer Quintero y Abraham Romero fueron elegidos miembros de la Junta Directiva de Fedemango, según información de El Pilón del pasado 5 de este mes. Felicitaciones para ellos y los mejores deseos para su buen desempeño.
Debido a que el Cesar no tiene una política de producciones más limpias que se articulen con la nacional, Corpocesar, trabaja en este tema con el fin de hacer un diagnóstico que permita hacer una intervención.
Por allá por los años 70 en el folclor vallenato algunos compositores se autodenominaron cantores de sus respectivos pueblos; se habló del cantor de Fonseca, Carlos Huertas; del cantor de Valencia, Calixto Ochoa; del cantor de Villanueva, Fabio Zuleta y por supuesto del cantor del Valle, Alvaro Cabas Pumarejo; todos compusieron canciones con esos nombres y se adjudicaron para sí esos remoquetes.
La población económicamente activa es fuente de riqueza para toda sociedad; son las personas dispuestas a trabajar, a aplicar sus conocimientos, sus experiencias, su creatividad y sus talentos a la producción de los bienes y/o a la prestación de servicios que demanda la población en general.
Poco después de nacer vino a verme una mujer muy linda a quien yo no conocía. Recuerdo muy bien su perfume de jazmines y la suave melodía de su voz.
Los sonidos de la caja, guacharaca y acordeón se escucharán entre hoy y mañana en las instalaciones de la Universidad Santander de Valledupar, UDES, en el marco del II Festival Vallenato.