El caucho cartagenero, algarrobillo, ceiba y roble son ejemplos de especies vegetales que no deben estar en espacios urbanos, así como se perciben en algunos separadores de Valledupar.
Esto obedece a un acto de la Secretaría de Educación Municipal de remitir la investigación al despacho del alcalde municipal, aplicando la norma más favorable al colegio. “Los cobros no autorizados” a esta institución educativa siguen en investigación.
La Fundación Universitaria del Área Andina nos presenta en menos de 24 horas dos elementos interesantes para analizar la situación actual de la juventud y el emprendimiento como dualidad del desarrollo de los países.
Todo comenzó en un día cualquiera con un hermoso cielo y una cálida temperatura, estaba caminando por el bosque admirando la naturaleza intentando hallar un lugar que era muy famoso, ya llevaba tiempo caminando y estaba muy cansado, sin duda asombrado por los bellos paisajes; entonces tropecé con una raíz de un gran árbol y caí dándome unos fuertes golpes en mi cuerpo, el dolor y las heridas ocasionadas eran muy graves y aunque comencé a sentir miedo, tomé una rama y me apoyé en ella para poder caminar, estaba tan perdido y mareado que no podía recordar cómo volver.
Desperté en una habitación en la que nunca había estado, pero me resultaba bastante familiar, así que en un tono fuerte dije - ¿hay alguien ahí? Me sentía seguro, era como una extraña sensación de Beja vu, en un instante me levanté de la cama y me dirigí hacia la puerta, mis pisadas se hacían sentir en toda la habitación, abrí cuidadosamente, al salir me encontré con un extenso pasillo lleno de puertas, era realmente escalofriante y parecía no tener fin.
Rosando con mis pies desnudos el sereno mañanero, sentí pasar muy cerca de mis oídos el zumbido de la brisa que golpea fuerte mi cuerpo asegurándose de que esté ahí, mi cabello se eriza moviéndose con prisa, mis poros destilan vapor con fragancia a café, rosadas están mis mejillas, pero no todo lo que veo son maravillas, siento cada vez más cerca, mi peor pesadilla.
1991, distritos de consuegra, Toledo. En un hogar humilde y acogedor vivía una feliz familia, conformada por los padres y su único hijo, llamado Adam, todos los días Adam y su madre salían a la calle a jugar al futbol, o se iban de paseo al parque junto a su padre, eran momentos inolvidables para Adam, tenía la familia perfecta, la que todos podrían desear.
Rosa era una joven que vivía en un Makumake y tenía muchos sueños de superación.
¡Érase una vez! Un día, llegó el alcalde con su esposa a prenderla, ya que ésta era de las farolas que se encendían con fósforos.
Un día me conto mi papá, que mi abuela tenía un mochilón donde ella transportaba todo lo que le regalaban cuando salía a visitar.
Despierto, me doy cuenta que algo hace falta en casa, me siento a la mesa, pero… - ¡qué soledad!
Había una vez un hombre llamado Juan, era un hombre alto de ojos claros y piel blanca, era agricultor le gustaba sembrar y cosechar sus sembrados y los salía a vender al pueblo.
En una colina muy lejana vivía un conejo aventurero que quería conocer un bosque encantando, pero sus amigos le decían que ere muy pequeño para su aventura.
En la infancia de Lisa hubo una persona muy especial para ella era su primer amor, Liam donde pasaron muchas cosas, hubo un momento donde sus padres se la llevaron a Estados Unidos, antes de irse ella y Lyam se juraron amor eterno.
Hace muchos años, existió una niña muy bonita y con una nobleza incomparable; era el sueño más anhelado de una pare de esposos que pedían a Dios que su sueño se hiciera realidad.
Había una vez una linda cascada donde nació una hermosa rosa de varios colores, que al verla la gente quedaba sorprendida al verla.
Érase una vez una familia que no era muy unida y que no le tenían miedo a nada ni a nadie.
Se reportaron ventas superiores a los 50 millones de pesos y la visita de más de dos mil personas en los dos días de feria, quienes recorrieron los lugares de los expositores.
El premio se otorgó en el marco de la primera versión de la Feria Gastronómica Nuestro Sabor.
Acércate al Centro de Convenciones Crispín Villazón de Armas y deleitate con los mejores platos y postres de la región.
Hoy se entregará el Fogón de Oro que entrega Gases del Caribe, para dar a reconocer el premio a los mejores platos y postres de Valledupar.