Esta vez fue el reconocido compositor de música vallenata Franklin Moya, mañana o en cualquier momento podemos ser algunos de nosotros quienes resultemos víctimas de la delincuencia que está desatada en las carreteras del vecino departamento de La Guajira.

Esos angustiantes momentos que vivió nuestro elogiado artista en compañía de una hija y un pequeño nieto, circunstancia en la que fue despojado a mano armada de una suma de 18 millones de pesos, se repiten con mucha frecuencia en las vías intermunicipales de La Guajira, en especial en las carreteras que comunican a ese departamento con Valledupar y el Cesar.

La situación no es nueva, pero sí preocupa que cada vez se torna más reiterada y descarada, ya no importa si es de día o es de noche, a cualquier hora y sitio los asaltantes terrestres están al acecho, lo cual mantiene atemorizados a todos los que por necesidad necesitan viajar desde o hacia La Guajira.

También los bloqueos no cesan. Y son ya delincuenciales. Hasta al propio gobernador de la península le tocó convocar un foro la semana pasada sobre la incertidumbre de quienes transitan por las carreteras, haciendo un llamado a la ciudadanía en general y a sus diversos sectores, pues la situación es desesperante. Increíble: El alcalde de Maicao también amenazó con parar sus actividades en rechazo a los que llamó “benditos” bloqueos; “he tenido que postergar reuniones con empresarios que han querido invertir en el municipio. En días pasados se iba a presentar un proyecto importante que tiene que ver con temas de agua y no fue posible”, aseguró Miguel Aragón González.

Esa terrible sensación de inseguridad vial en La Guajira ha hecho que más de un plan de turismo o de negocio se haya venido al suelo después de haberse concebido como una posibilidad.

Se frena el desarrollo de un departamento que requiere con urgencia encontrar salidas a las muchas crisis sociales por las que atraviesa. Ese intercambio comercial y demás actividades tanto económicas como de cualquier otra índole entre ciudades y departamentos es indispensable para sincronizar todos los eslabones de la cadena productiva de una región, por ello en Valledupar y el Cesar también se siente el impacto negativo del accionar delincuencial en La Guajira.

Esto no puede seguir así, por eso EL PILÓN lanza un S.O.S por la seguridad vial de La Guajira, desde aquí proponemos que se realice una audiencia pública con participación de autoridades locales, de ambos departamentos y nacionales para buscarle una solución de peso a ese flagelo que tanto agobia a guajiros, cesarenses y demás habitantes de la región.

Insistimos en que es una crisis que no solo amenaza el bienestar de sus habitantes, sino también la viabilidad de su desarrollo económico y turístico, por ello urge acabar ese clima de temor y desconfianza que requiere una acción inmediata y coordinada.

De inmediato se debe reforzar la presencia policial y militar, hacer un esfuerzo de coordinación interinstitucional, incentivar la participación ciudadana, mejorar la infraestructura vial, desarrollar programas y estrategias de prevención, recurrir al uso de tecnología de punta, revisar el marco legal, entre otros aspectos relevancia.

Declaremos todos la lucha frontal contra la inseguridad y los bloqueos viales en la región.