Con la apertura de la plaza Alfonso López empieza una nueva etapa donde se medirá el impacto de una de las obras reseñas de la actual administración, pero también más criticada.
Por: Deivis Caro / EL PILÓN
[email protected]
Desde las cuatro de la tarde empezaron a llegar las personas a la renovada plaza Alfonso López para ocupar las cinco mil sillas preparadas para los invitados. En algunos era notoria la sorpresa por los cambios en la plaza: el nuevo piso de mármol que dejó atrás la baldosa y la tierra, los jardines, el ‘Hall de la fama’ de los reyes vallenatos y sobre todo el cambio en la tarima ‘Francisco el Hombre’.
Entrada la noche, se dio apertura entre el discurso del alcalde de Valledupar, Augusto Ramírez Uhía, y la presencia de autoridades nacionales como la ministra de Cultura, Carmen Vásquez, Carlos Eduardo Campo, como gobernador encargado, y el grupo de secretarios municipales y departamentales.
La plaza luce diferente y tiene nuevos atractivos, y por supuesto retos. ¿Qué viene para la plaza Alfonso López luego de su reapertura? Lo primero y una de las razones de la apertura antes de finalizar el contrato es la celebración de la misa del Santo Ecce Homo este lunes 15 de abril en Valledupar.
Después la terminación de varios detalles en el interior de la plaza y obras que se desarrollarán a su alrededor, principalmente la renovación de las redes húmedas. Con un contrato inicial de $8.320 millones con el Consorcio Plaza Alfonso López, cuyo representante legal es Darío José Peinado, la renovación estuvo en el centro de la polémica por el monto invertido, con críticas intensificadas al conocerse la noticia de la adición de $1.550 millones. Así, la renovación de la plaza, más el evento de apertura este sábado, alcanzó la barrera de los 10.000 millones de pesos.
Esas obras no previstas inicialmente, comentó el primer mandatario municipal, fue una mayor cantidad de mármol, una red contra incendios y la modificación de los cárcamos que estaban previstos en rejillas de hierro pero que fueron cambiadas a cárcamos vestidos del mismo mármol, entre otras.
Sin embargo, el alcalde de Valledupar, argumentó que la inversión era una deuda con Valledupar. “No hicimos la renovación por capricho. Lo hicimos convencidos que el ADN de este territorio es que sea un destino turístico, natural y ecológico”, comentó el primer mandatario.
EN LA PLAZA SE SIGUE CONSTRUYENDO
A pesar del evento, la obra no ha sido terminada. Los funcionarios de la Alcaldía Municipal aseguran que solo restan detalles. “Se está haciendo apertura. Es susceptible a que se hagan cambios. Que es natural en todas las obras”, agregó José Juan Lechuga, secretario general, oficina sobre la que recaerá la administración de la plaza Alfonso López.
La obra va hasta el 13 de mayo, tiempo estipulado en la prórroga de 60 establecida entre la Alcaldía y el contratista. En el tiempo que queda se verán trabajadores en la plaza, por ejemplo, terminando las lijas del mármol porque el polvo que se ve en ellas es por falta de pulir. Eso sumado a la puesta en funcionamiento de la fuente detrás de la tarima, que por falta de una pieza, a pesar de estar llena, no entró en operación el día de la apertura.
Por otro lado, comentó el funcionario, se inició la contratación de un celador y un personal para atender el arborizado. Más allá del icónico árbol de mango, casi una decena de árboles que aún no dan sombra fueron sembrados y necesitan atención.
Pero en caso de que la plaza registre algún daño natural de su estructura, según comentó el secretario general, cuenta con una póliza de estabilidad de la obra por cinco años, es decir, el contratista deberá responder los daños que registre la infraestructura antes de mayo de 2024.
LAS OBRAS EXTERIORES
“Con este contrato nosotros terminamos del bordillo de la plaza hacia dentro. Pero ahora vienen obras de redes húmedas y espacio público”, explicó en su momento el asesor para proyectos estratégicos, Juan Pablo Morón.
En casi todo el centro histórico de Valledupar se iniciarán trabajos de reposición redes húmedas, de alcantarillado sanitario y pluvial, desde la carrera cuarta hasta la carrera novena, y aproximadamente desde la calle 14 a la 16. Lo planeado es que ese trabajo inicie recién se entregue la plaza.
“Las obras que se entregarán son las contempladas en el contrato. Quedan pendientes los remates sobre los principales ejes viales que rodean la plaza, es decir la calle 16, calle 15, carrera cuarta y quinta. Por medio de un proyecto que viene caminando para la intervención de estas calles”, manifestó el secretario general.
MEDIR EL IMPACTO DE LA PLAZA
Con la apertura de la plaza al público se podrá empezar a medir el impacto de la renovación en la permanencia o aumento de visitantes locales o nacionales. Por eso, los debates seguramente se centrarán en el impacto de la obra en el centro histórico y para la economía vallenata.
Fernando Herrera, economista e investigador vallenato, señaló la necesidad de determinar los resultados de la formula costos-beneficios. “Para medir el impacto se debe analizar lo que costó contra lo que se hubiera podido hacer en inversión social. Los costos/ beneficios a futuro: costo de mantenimiento, mayor afluencia de visitantes. ¿Se hará algún aprovechamiento comercial?”, argumentó el economista.
Por otro lado, el jefe de la Oficina de Cultura Municipal, Tomás Darío Gutiérrez, centró su argumento en que todo material envejece y necesita renovación. “La ciudad gana todo: este es el nuevo rostro de la ciudad. La capital mundial del vallenato no puede tener una plaza envejecida”, explicó Gutiérrez, quien también es historiador.
Seguramente, el primer diagnóstico lo dictará la afluencia de personas durante el 52 Festival de la Leyenda Vallenata. Entre los expectantes al evento que concluyó con juegos pirotécnicos primaba la sorpresa. Es el caso de un comerciante de Valledupar que se identifica como ‘Goyo World’: “Era necesaria toda esta intervención. Es muy importante que se haya hecho el cambio en la tarima Francisco el hombre”.
¿SE AFECTÓ EL PATRIMONIO CULTURAL?
Además de los recursos, el debate se centró en la transformación del corazón del centro histórico y de la ciudad. “Hay un costo cultural y urbanístico: me parece un parche en medio de una zona histórica (no conozco ninguna caso de plaza “moderna” en centros históricos en el mundo)”, comentó Fernando Herrera.
En contravía, el jefe de la Oficina de Cultura aseguró que “la esencia permanece totalmente”.
La discusión no termina con la apertura, sin embargo, en Valledupar se abre un nuevo espacio para eventos trascendentales y como un atractivo turístico. Sin embargo, serán el tiempo y los organismos de control los encargados de determinar si fue correctamente priorizada la inversión de 10.000 millones de pesos.
Con la apertura de la plaza Alfonso López empieza una nueva etapa donde se medirá el impacto de una de las obras reseñas de la actual administración, pero también más criticada.
Por: Deivis Caro / EL PILÓN
[email protected]
Desde las cuatro de la tarde empezaron a llegar las personas a la renovada plaza Alfonso López para ocupar las cinco mil sillas preparadas para los invitados. En algunos era notoria la sorpresa por los cambios en la plaza: el nuevo piso de mármol que dejó atrás la baldosa y la tierra, los jardines, el ‘Hall de la fama’ de los reyes vallenatos y sobre todo el cambio en la tarima ‘Francisco el Hombre’.
Entrada la noche, se dio apertura entre el discurso del alcalde de Valledupar, Augusto Ramírez Uhía, y la presencia de autoridades nacionales como la ministra de Cultura, Carmen Vásquez, Carlos Eduardo Campo, como gobernador encargado, y el grupo de secretarios municipales y departamentales.
La plaza luce diferente y tiene nuevos atractivos, y por supuesto retos. ¿Qué viene para la plaza Alfonso López luego de su reapertura? Lo primero y una de las razones de la apertura antes de finalizar el contrato es la celebración de la misa del Santo Ecce Homo este lunes 15 de abril en Valledupar.
Después la terminación de varios detalles en el interior de la plaza y obras que se desarrollarán a su alrededor, principalmente la renovación de las redes húmedas. Con un contrato inicial de $8.320 millones con el Consorcio Plaza Alfonso López, cuyo representante legal es Darío José Peinado, la renovación estuvo en el centro de la polémica por el monto invertido, con críticas intensificadas al conocerse la noticia de la adición de $1.550 millones. Así, la renovación de la plaza, más el evento de apertura este sábado, alcanzó la barrera de los 10.000 millones de pesos.
Esas obras no previstas inicialmente, comentó el primer mandatario municipal, fue una mayor cantidad de mármol, una red contra incendios y la modificación de los cárcamos que estaban previstos en rejillas de hierro pero que fueron cambiadas a cárcamos vestidos del mismo mármol, entre otras.
Sin embargo, el alcalde de Valledupar, argumentó que la inversión era una deuda con Valledupar. “No hicimos la renovación por capricho. Lo hicimos convencidos que el ADN de este territorio es que sea un destino turístico, natural y ecológico”, comentó el primer mandatario.
EN LA PLAZA SE SIGUE CONSTRUYENDO
A pesar del evento, la obra no ha sido terminada. Los funcionarios de la Alcaldía Municipal aseguran que solo restan detalles. “Se está haciendo apertura. Es susceptible a que se hagan cambios. Que es natural en todas las obras”, agregó José Juan Lechuga, secretario general, oficina sobre la que recaerá la administración de la plaza Alfonso López.
La obra va hasta el 13 de mayo, tiempo estipulado en la prórroga de 60 establecida entre la Alcaldía y el contratista. En el tiempo que queda se verán trabajadores en la plaza, por ejemplo, terminando las lijas del mármol porque el polvo que se ve en ellas es por falta de pulir. Eso sumado a la puesta en funcionamiento de la fuente detrás de la tarima, que por falta de una pieza, a pesar de estar llena, no entró en operación el día de la apertura.
Por otro lado, comentó el funcionario, se inició la contratación de un celador y un personal para atender el arborizado. Más allá del icónico árbol de mango, casi una decena de árboles que aún no dan sombra fueron sembrados y necesitan atención.
Pero en caso de que la plaza registre algún daño natural de su estructura, según comentó el secretario general, cuenta con una póliza de estabilidad de la obra por cinco años, es decir, el contratista deberá responder los daños que registre la infraestructura antes de mayo de 2024.
LAS OBRAS EXTERIORES
“Con este contrato nosotros terminamos del bordillo de la plaza hacia dentro. Pero ahora vienen obras de redes húmedas y espacio público”, explicó en su momento el asesor para proyectos estratégicos, Juan Pablo Morón.
En casi todo el centro histórico de Valledupar se iniciarán trabajos de reposición redes húmedas, de alcantarillado sanitario y pluvial, desde la carrera cuarta hasta la carrera novena, y aproximadamente desde la calle 14 a la 16. Lo planeado es que ese trabajo inicie recién se entregue la plaza.
“Las obras que se entregarán son las contempladas en el contrato. Quedan pendientes los remates sobre los principales ejes viales que rodean la plaza, es decir la calle 16, calle 15, carrera cuarta y quinta. Por medio de un proyecto que viene caminando para la intervención de estas calles”, manifestó el secretario general.
MEDIR EL IMPACTO DE LA PLAZA
Con la apertura de la plaza al público se podrá empezar a medir el impacto de la renovación en la permanencia o aumento de visitantes locales o nacionales. Por eso, los debates seguramente se centrarán en el impacto de la obra en el centro histórico y para la economía vallenata.
Fernando Herrera, economista e investigador vallenato, señaló la necesidad de determinar los resultados de la formula costos-beneficios. “Para medir el impacto se debe analizar lo que costó contra lo que se hubiera podido hacer en inversión social. Los costos/ beneficios a futuro: costo de mantenimiento, mayor afluencia de visitantes. ¿Se hará algún aprovechamiento comercial?”, argumentó el economista.
Por otro lado, el jefe de la Oficina de Cultura Municipal, Tomás Darío Gutiérrez, centró su argumento en que todo material envejece y necesita renovación. “La ciudad gana todo: este es el nuevo rostro de la ciudad. La capital mundial del vallenato no puede tener una plaza envejecida”, explicó Gutiérrez, quien también es historiador.
Seguramente, el primer diagnóstico lo dictará la afluencia de personas durante el 52 Festival de la Leyenda Vallenata. Entre los expectantes al evento que concluyó con juegos pirotécnicos primaba la sorpresa. Es el caso de un comerciante de Valledupar que se identifica como ‘Goyo World’: “Era necesaria toda esta intervención. Es muy importante que se haya hecho el cambio en la tarima Francisco el hombre”.
¿SE AFECTÓ EL PATRIMONIO CULTURAL?
Además de los recursos, el debate se centró en la transformación del corazón del centro histórico y de la ciudad. “Hay un costo cultural y urbanístico: me parece un parche en medio de una zona histórica (no conozco ninguna caso de plaza “moderna” en centros históricos en el mundo)”, comentó Fernando Herrera.
En contravía, el jefe de la Oficina de Cultura aseguró que “la esencia permanece totalmente”.
La discusión no termina con la apertura, sin embargo, en Valledupar se abre un nuevo espacio para eventos trascendentales y como un atractivo turístico. Sin embargo, serán el tiempo y los organismos de control los encargados de determinar si fue correctamente priorizada la inversión de 10.000 millones de pesos.