En una carta enviada a la junta directiva de la Agencia Promotora del Desarrollo Económico Sostenible de Valledupar, Provalledupar, Diana Molina Carvajal presentó su renuncia “irrevocable” al cargo de directora ejecutiva.

El escrito, que conoció EL PILÓN, enviado al alcalde Augusto Ramírez Uhía y los otros miembros de la Agencia, deja ver el sinsabor que vivió Molina Carvajal desde su llegada al cargo el 28 de diciembre del 2016.

Dice la firmante que su renuncia “se basa, fundamentalmente, en motivos ajenos a mi voluntad, como la ausencia de las herramientas necesarias para realizar gestiones pertinentes para lograr los objetivos deseados”, además de “la nula remuneración económica de mis labores”.

Diana Molina destaca también que desde su llegada creó la vida jurídica de Provalledupar, sin embargo, “es inconcebible que aún no se haya girado los minúsculos aportes comprometidos para los gastos mínimos de funcionamiento”.

Recalcó que “es imposible trabajar sin recursos, imprescindibles para el cabal ejercicio de cualquier empresa, sobre todo en esta etapa principal, como es la fase de establecimiento, punto para generar confianza con la empresa privada, con el ciudadano, los gremios, las diferentes entidades gubernamentales y no gubernamentales, entre otros”.

Y en términos generales, la exdirectora ejecutiva advirtió sentirse “impotente y maniatada al no poder ejecutar nuestro plan de acción como se debe, teniendo en gente entusiasta y dispuesta a trabajar en una ambiciosa estrategia de ciudad con metas claras y definidas”.

Aclaró la nieta de la exministra de Cultura, Consuelo Araújo Noguera, que le es imposible “seguir en una entidad que no tiene músculo financiero, variable indispensable para desarrollar y ejecutar las múltiples actividades que se tenían previstas (…) No existió voluntad en la cooperación y el apoyo necesario para consolidar esta propuesta del señor alcalde”.

“Es imposible trabajar sin recursos, imprescindibles para el cabal ejercicio de cualquier empresa, sobre todo en esta etapa principal, como es la fase de establecimiento”: Diana Molina.

Por Carlos Mario Jiménez
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