Se presume que el incidente fue provocado por celos mientras el niño jugaba cerca de otra mascota.
En una vivienda en el municipio de Tamalameque, Cesar, un niño de cinco años fue mordido en la cara por un perro criollo, dejándolo con heridas graves en el cachete y la boca. El incidente, que se presume fue provocado por celos mientras el niño jugaba cerca de otra mascota, ha generado preocupación en la comunidad local.
“Al parecer, el perro tuvo una reacción inusual y atacó al menor por celos”, declaró Leonardo Vega Sánchez, alcalde de Tamalameque.
El niño herido está recibiendo atención prioritaria en la clínica de Alta Complejidad en Santa Marta, donde los médicos están haciendo todo lo posible para evitar secuelas.
Las autoridades locales, junto con un equipo interdisciplinario de psicólogos y la secretaría de Salud municipal, están siguiendo de cerca la evolución del niño y brindando apoyo a la familia afectada. Además, se está llevando a cabo una campaña para concienciar sobre mascotas de alta peligrosidad y prevenir futuros incidentes similares.
La secretaría de Salud departamental tomó medidas para analizar el comportamiento del perro y verificar si tiene sus vacunas al día. A pesar del incidente, la mascota no fue sacrificada debido a la objeción de la familia del niño afectado.
Se presume que el incidente fue provocado por celos mientras el niño jugaba cerca de otra mascota.
En una vivienda en el municipio de Tamalameque, Cesar, un niño de cinco años fue mordido en la cara por un perro criollo, dejándolo con heridas graves en el cachete y la boca. El incidente, que se presume fue provocado por celos mientras el niño jugaba cerca de otra mascota, ha generado preocupación en la comunidad local.
“Al parecer, el perro tuvo una reacción inusual y atacó al menor por celos”, declaró Leonardo Vega Sánchez, alcalde de Tamalameque.
El niño herido está recibiendo atención prioritaria en la clínica de Alta Complejidad en Santa Marta, donde los médicos están haciendo todo lo posible para evitar secuelas.
Las autoridades locales, junto con un equipo interdisciplinario de psicólogos y la secretaría de Salud municipal, están siguiendo de cerca la evolución del niño y brindando apoyo a la familia afectada. Además, se está llevando a cabo una campaña para concienciar sobre mascotas de alta peligrosidad y prevenir futuros incidentes similares.
La secretaría de Salud departamental tomó medidas para analizar el comportamiento del perro y verificar si tiene sus vacunas al día. A pesar del incidente, la mascota no fue sacrificada debido a la objeción de la familia del niño afectado.