Luis Napoleón de Armas P.La humanidad, con su concepción religiosa, siempre ha mezclado lo real con lo esotérico, la ciencia con la adivinación, y los pronósticos astronómicos con la futurología del terror; siempre han existido pitonisas, oráculos y adivinadores; cualquier escritura cifrada en piedras, papiros o manifestación natural no comprendida, es materia para los agoreros […]
Luis Napoleón de Armas P.
La humanidad, con su concepción religiosa, siempre ha mezclado lo real con lo esotérico, la ciencia con la adivinación, y los pronósticos astronómicos con la futurología del terror; siempre han existido pitonisas, oráculos y adivinadores; cualquier escritura cifrada en piedras, papiros o manifestación natural no comprendida, es materia para los agoreros apocalípticos; esta es una falta de consideración con la gente. Las profecías siempre han estado al servicio de misterio y de la especulación. Nostradamusha sido, por mucho tiempo, el vademécum de los creadores del miedo; sus anuncios letales han sido acomodados a muchas situaciones: el atentado a un pontífice, una guerra mundial, una dictadura cruel, etc. Eso lo puede anticipar cualquiera, son hechos totalmente predecibles; los pastorcitos de Fátima también mantuvieron al mundo con un secreto trágico guardado; a Daniel y a otros personajes, la Biblia les atribuye capacidades proféticas pero siempre del desastre, nunca vaticinan cosas agradables.Ahora, a los mayas, también los quieren presentar como oráculo;aellos hay que reconocerles, por el calendario que nos dejaron, que conocían los movimientos siderales, que son cíclicos, y en eso se apoya la astronomía. Pero adivinos no eran; tan no lo eran que desaparecieron sin que se percataran de que esto les pasaría; pocos de ellos quedaron para contar su pasado científico; se dice que el cantautor Armando Manzanero es uno de ellos, que habla, incluso sus dialectos; no se sabe a ciencia cierta porqué desaparecieron, pero hay una teoría acerca de su capacidad para desforestar (o deforestar) con el fin de obtener materiales parala construcción de sus grandes pirámides. Pero, la verdad es que ellos no predicen el fin de los tiempos, solo anuncian cambios cualitativos en la especie humana. Pero, es el Apocalipsis el mayor tratado fatalista de la humanidad, y creo, que de este han sacado todos los anuncios sobre sucesos trágicos; nada ha pasado desde que lo escribieron. A la tierra le calculan 4.500 millones de años, haciendo parte un sistema planetario; en su evolución adaptativa ha tenido transformaciones de forma y contenido, y la vida en ella data desde hace millones de años. La ciencia, hasta el momento, no ha previsto, por cualquier causa posible, una debacle como la anuncian los terroristas cibernéticos. Pero, si es para cambios profundos en la humanidad, bienvenidos; ya es hora de hacer algunas revisiones. Por su puesto, la vida en la tierra algún día no será posible; la voracidad del hombre así lo determinará; será por autodestrucción; ese día llegará cuando las fuentes de agua se hayan agotado y/ola respiración no sea posible. Eso no está tan lejos pero no sería con cornetas ni caballos. Espero que esta no sea mi última columna.
Fe de erratas. En mi columna recién pasada apareció concejo municipal con “s”. Se perfectamente, desde niño, que este es el único “concejo” que se escribe con “c”. Creo que, el diccionario Google al guardar me hizo la trampa. También, el nombre Castillete, un pueblo guajiro, se fue con minúscula; eso si fue falta de revisión de mi parte; pido excusas a mis lectores.
Hasta luego.Por este año ya no voy más, nos veremos en enero 2013. Les deseo a todos mis lectores y comentaristas unas felices navidades y un próspero año nuevo que, ojalá, no sea de sustos cibernéticos y que más bien logremos la paz.
[email protected]
Luis Napoleón de Armas P.La humanidad, con su concepción religiosa, siempre ha mezclado lo real con lo esotérico, la ciencia con la adivinación, y los pronósticos astronómicos con la futurología del terror; siempre han existido pitonisas, oráculos y adivinadores; cualquier escritura cifrada en piedras, papiros o manifestación natural no comprendida, es materia para los agoreros […]
Luis Napoleón de Armas P.
La humanidad, con su concepción religiosa, siempre ha mezclado lo real con lo esotérico, la ciencia con la adivinación, y los pronósticos astronómicos con la futurología del terror; siempre han existido pitonisas, oráculos y adivinadores; cualquier escritura cifrada en piedras, papiros o manifestación natural no comprendida, es materia para los agoreros apocalípticos; esta es una falta de consideración con la gente. Las profecías siempre han estado al servicio de misterio y de la especulación. Nostradamusha sido, por mucho tiempo, el vademécum de los creadores del miedo; sus anuncios letales han sido acomodados a muchas situaciones: el atentado a un pontífice, una guerra mundial, una dictadura cruel, etc. Eso lo puede anticipar cualquiera, son hechos totalmente predecibles; los pastorcitos de Fátima también mantuvieron al mundo con un secreto trágico guardado; a Daniel y a otros personajes, la Biblia les atribuye capacidades proféticas pero siempre del desastre, nunca vaticinan cosas agradables.Ahora, a los mayas, también los quieren presentar como oráculo;aellos hay que reconocerles, por el calendario que nos dejaron, que conocían los movimientos siderales, que son cíclicos, y en eso se apoya la astronomía. Pero adivinos no eran; tan no lo eran que desaparecieron sin que se percataran de que esto les pasaría; pocos de ellos quedaron para contar su pasado científico; se dice que el cantautor Armando Manzanero es uno de ellos, que habla, incluso sus dialectos; no se sabe a ciencia cierta porqué desaparecieron, pero hay una teoría acerca de su capacidad para desforestar (o deforestar) con el fin de obtener materiales parala construcción de sus grandes pirámides. Pero, la verdad es que ellos no predicen el fin de los tiempos, solo anuncian cambios cualitativos en la especie humana. Pero, es el Apocalipsis el mayor tratado fatalista de la humanidad, y creo, que de este han sacado todos los anuncios sobre sucesos trágicos; nada ha pasado desde que lo escribieron. A la tierra le calculan 4.500 millones de años, haciendo parte un sistema planetario; en su evolución adaptativa ha tenido transformaciones de forma y contenido, y la vida en ella data desde hace millones de años. La ciencia, hasta el momento, no ha previsto, por cualquier causa posible, una debacle como la anuncian los terroristas cibernéticos. Pero, si es para cambios profundos en la humanidad, bienvenidos; ya es hora de hacer algunas revisiones. Por su puesto, la vida en la tierra algún día no será posible; la voracidad del hombre así lo determinará; será por autodestrucción; ese día llegará cuando las fuentes de agua se hayan agotado y/ola respiración no sea posible. Eso no está tan lejos pero no sería con cornetas ni caballos. Espero que esta no sea mi última columna.
Fe de erratas. En mi columna recién pasada apareció concejo municipal con “s”. Se perfectamente, desde niño, que este es el único “concejo” que se escribe con “c”. Creo que, el diccionario Google al guardar me hizo la trampa. También, el nombre Castillete, un pueblo guajiro, se fue con minúscula; eso si fue falta de revisión de mi parte; pido excusas a mis lectores.
Hasta luego.Por este año ya no voy más, nos veremos en enero 2013. Les deseo a todos mis lectores y comentaristas unas felices navidades y un próspero año nuevo que, ojalá, no sea de sustos cibernéticos y que más bien logremos la paz.
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