Dentro de la campaña ‘Soy guardián del río Guatapurí’, EL PILÓN resalta el trabajo de ciudadanos que se han dedicado a proteger la principal corriente hídrica de los vallenatos. En esta oportunidad hablamos con Luis Maestre, ambientalista y defensor del río.
Cuando se pregunte cómo definir la palabra guardián del río Guatapurí, la mejor respuesta es el trabajo de Luis Maestre, un profesional en salud ambiental que se ha dedicado a pelear en favor del río.
Desde el 2017, su labor es reconocida en redes sociales, en las entidades ambientales y de control, municipales y departamentales, porque ha sido la voz del río Guatapurí, principalmente de la margen derecha, un sector amenazado por los asentamientos humanos.
En conversación con EL PILÓN, el vigía ambiental señaló que la mano del hombre es la principal amenaza para el emblemático río de los vallenatos. Sin embargo, agrega, el problema se agudiza porque las autoridades se han olvidado del río.
Del acueducto para arriba pertenece al territorio de la comunidad indígena. Nosotros hemos trabajado desde el puente Hurtado hasta su desembocadura. Desde el 2017 hemos realizado un monitoreo de todos los impactos antropogénicos.
En ese sentido, la principal amenaza es la pérdida de la ronda hídrica, por eso los asentamientos humanos son el principal riesgo del río, porque cortan árboles, disponen aguas residuales y destruyen la biodiversidad.
Para los asentamientos de la margen derecha, el río funciona como un botadero de basura: llegan a la orilla y allí botan todo; el río es como un contenedor para botar basuras y un alcantarillado para los desechos personales.
Pero también uno denota el abandono institucional, de Corpocesar, el Municipio, porque son dos caras: una es el Balneario Hurtado y otra la margen derecha.
Desidia institucional, principalmente de la autoridad ambiental, Corpocesar. Está la normativa, hay un Pomca para el río Guatapurí, pero no se ha implementado. Las autoridades están fallando en su misión institucional.
La principal salida es la recuperación de la ronda hídrica con la reubicación de los asentamientos. Hay un proyecto del arquitecto Santander Beleño que plantea, dentro del Ecoparque Lineal del río Guatapurí, enviar a las comunidades de esos asentamientos a urbanizaciones del centro de la ciudad, y no al otro lado de Valledupar, como ya se hizo con Nando Marín. ¡Hay que recuperar la ronda hídrica de la margen derecha!
Primero fue a través de redes sociales, con un celular. Tomaba fotografías, hacía videos, para llamar la atención de los vallenatos en favor de la defensa del río. Luego acudimos a los medios de comunicación, y por supuesto, acudimos a las normas, a través de derecho de petición, para conocer qué estaban haciendo las autoridades. Ellos siempre nos dicen que tienen planes de restauración, pero se quedan en eso, en buenos planes.
Durante los 5 años que llevo trabajando en el río he notado la degradación ambiental, la pérdida de suelo, de la biodiversidad. Es que el río no es solo el agua, hacen parte los árboles, animales, un ecosistema que se ha visto afectado al punto que es difícil observar un conejo o una iguana en esa zona del río donde hay asentamientos humanos. Ellos (asentamientos) ponen en riesgo la sostenibilidad del río y en 10 años tendremos, en el peor de los casos, una cloaca, un basurero a cielo abierto, si no cambiamos el rumbo. Necesitamos tomar decisiones.
El primer compromiso de los vallenatos debe ser un uso racional del agua, no olvidemos que Emdupar es la continuidad del río Guatapurí, es quien lleva el río a nuestras casas. Seguidamente, debemos presionar: las administraciones ignoran las presiones de los ambientalistas, por eso es necesario que participe toda la comunidad.
Creemos que siempre llegará el chorro de agua a nuestras casas, pero la pregunta es: ¿hasta cuándo tendremos agua si seguimos con el despilfarro y tomando al río como un basurero? En algún momento la naturaleza nos pasará factura por violar los ciclos naturales.
REDACCIÓN EL PILÓN.
Dentro de la campaña ‘Soy guardián del río Guatapurí’, EL PILÓN resalta el trabajo de ciudadanos que se han dedicado a proteger la principal corriente hídrica de los vallenatos. En esta oportunidad hablamos con Luis Maestre, ambientalista y defensor del río.
Cuando se pregunte cómo definir la palabra guardián del río Guatapurí, la mejor respuesta es el trabajo de Luis Maestre, un profesional en salud ambiental que se ha dedicado a pelear en favor del río.
Desde el 2017, su labor es reconocida en redes sociales, en las entidades ambientales y de control, municipales y departamentales, porque ha sido la voz del río Guatapurí, principalmente de la margen derecha, un sector amenazado por los asentamientos humanos.
En conversación con EL PILÓN, el vigía ambiental señaló que la mano del hombre es la principal amenaza para el emblemático río de los vallenatos. Sin embargo, agrega, el problema se agudiza porque las autoridades se han olvidado del río.
Del acueducto para arriba pertenece al territorio de la comunidad indígena. Nosotros hemos trabajado desde el puente Hurtado hasta su desembocadura. Desde el 2017 hemos realizado un monitoreo de todos los impactos antropogénicos.
En ese sentido, la principal amenaza es la pérdida de la ronda hídrica, por eso los asentamientos humanos son el principal riesgo del río, porque cortan árboles, disponen aguas residuales y destruyen la biodiversidad.
Para los asentamientos de la margen derecha, el río funciona como un botadero de basura: llegan a la orilla y allí botan todo; el río es como un contenedor para botar basuras y un alcantarillado para los desechos personales.
Pero también uno denota el abandono institucional, de Corpocesar, el Municipio, porque son dos caras: una es el Balneario Hurtado y otra la margen derecha.
Desidia institucional, principalmente de la autoridad ambiental, Corpocesar. Está la normativa, hay un Pomca para el río Guatapurí, pero no se ha implementado. Las autoridades están fallando en su misión institucional.
La principal salida es la recuperación de la ronda hídrica con la reubicación de los asentamientos. Hay un proyecto del arquitecto Santander Beleño que plantea, dentro del Ecoparque Lineal del río Guatapurí, enviar a las comunidades de esos asentamientos a urbanizaciones del centro de la ciudad, y no al otro lado de Valledupar, como ya se hizo con Nando Marín. ¡Hay que recuperar la ronda hídrica de la margen derecha!
Primero fue a través de redes sociales, con un celular. Tomaba fotografías, hacía videos, para llamar la atención de los vallenatos en favor de la defensa del río. Luego acudimos a los medios de comunicación, y por supuesto, acudimos a las normas, a través de derecho de petición, para conocer qué estaban haciendo las autoridades. Ellos siempre nos dicen que tienen planes de restauración, pero se quedan en eso, en buenos planes.
Durante los 5 años que llevo trabajando en el río he notado la degradación ambiental, la pérdida de suelo, de la biodiversidad. Es que el río no es solo el agua, hacen parte los árboles, animales, un ecosistema que se ha visto afectado al punto que es difícil observar un conejo o una iguana en esa zona del río donde hay asentamientos humanos. Ellos (asentamientos) ponen en riesgo la sostenibilidad del río y en 10 años tendremos, en el peor de los casos, una cloaca, un basurero a cielo abierto, si no cambiamos el rumbo. Necesitamos tomar decisiones.
El primer compromiso de los vallenatos debe ser un uso racional del agua, no olvidemos que Emdupar es la continuidad del río Guatapurí, es quien lleva el río a nuestras casas. Seguidamente, debemos presionar: las administraciones ignoran las presiones de los ambientalistas, por eso es necesario que participe toda la comunidad.
Creemos que siempre llegará el chorro de agua a nuestras casas, pero la pregunta es: ¿hasta cuándo tendremos agua si seguimos con el despilfarro y tomando al río como un basurero? En algún momento la naturaleza nos pasará factura por violar los ciclos naturales.
REDACCIÓN EL PILÓN.