El alcalde de Chiriguaná y el rector de la UPC, firmaron un contrato de comodato que oficializó la llegada de esta universidad al municipio cesarense.
Por: Pepe Morón Reales
[email protected]
Con la firma del contrato de comodato entre la administración de Chiriguaná, en cabeza del alcalde Gustavo Aroca, y el rector de la Universidad Popular del Cesar UPC, Jesualdo Hernández, se confirmó la llegada de esta institución académica a este municipio cesarense.
Mediante este contrato de comodato, suscrito por cinco años prorrogables a otros cinco años más, sobre el bien inmueble denominado Biblioteca Pública Municipal de Chiriguaná, se abren las puertas para que entre en funcionamiento esta nueva etapa de la educación en esa región del Cesar.
El acto de firma del contrato, se dio en el recinto del Concejo Municipal, que sesionó con el fin de concluir este tema. En el evento, estuvieron presentes, además del alcalde, el rector y los concejales, los dos diputados que representan a este municipio en la asamblea: Eduardo Esquivel López y el presidente de la Duma, Manuel Guillermo Mejía Pallares. Junto a ellos, los estudiantes de grado 11 de las instituciones educativas de la población y los profesores de las mismas. Además del apoyo del Concejo Superior Universitario de la UPC, que estuvo representado por Jorge Manjarrez García y el equipo de trabajo de la rectoría.
“Hoy comienza una nueva era para el municipio de Chiriguaná. Hay que tener claro que la locomotora del desarrollo está representada en la educación y ya llegó a este municipio”, resaltó el Rector.
El comienzo de las actividades de la UPC en Chiriguaná, es casi inmediato. Para el próximo mes de junio, se piensa iniciar con las capacitaciones a los docentes que integrarán la nómina. En julio, con el inicio del nuevo semestre, comenzarán los preuniversitarios para los estudiantes que inicien actividad académica el año entrante.
Estas primeras jornadas de trabajo académico, no se harán en el edificio recibido en comodato, sino en un colegio localizado al frente del mismo. Eso, mientras el Alcalde termina las adecuaciones que le fueron entregadas durante la firma del contrato.
El alcalde de Chiriguaná y el rector de la UPC, firmaron un contrato de comodato que oficializó la llegada de esta universidad al municipio cesarense.
Por: Pepe Morón Reales
[email protected]
Con la firma del contrato de comodato entre la administración de Chiriguaná, en cabeza del alcalde Gustavo Aroca, y el rector de la Universidad Popular del Cesar UPC, Jesualdo Hernández, se confirmó la llegada de esta institución académica a este municipio cesarense.
Mediante este contrato de comodato, suscrito por cinco años prorrogables a otros cinco años más, sobre el bien inmueble denominado Biblioteca Pública Municipal de Chiriguaná, se abren las puertas para que entre en funcionamiento esta nueva etapa de la educación en esa región del Cesar.
El acto de firma del contrato, se dio en el recinto del Concejo Municipal, que sesionó con el fin de concluir este tema. En el evento, estuvieron presentes, además del alcalde, el rector y los concejales, los dos diputados que representan a este municipio en la asamblea: Eduardo Esquivel López y el presidente de la Duma, Manuel Guillermo Mejía Pallares. Junto a ellos, los estudiantes de grado 11 de las instituciones educativas de la población y los profesores de las mismas. Además del apoyo del Concejo Superior Universitario de la UPC, que estuvo representado por Jorge Manjarrez García y el equipo de trabajo de la rectoría.
“Hoy comienza una nueva era para el municipio de Chiriguaná. Hay que tener claro que la locomotora del desarrollo está representada en la educación y ya llegó a este municipio”, resaltó el Rector.
El comienzo de las actividades de la UPC en Chiriguaná, es casi inmediato. Para el próximo mes de junio, se piensa iniciar con las capacitaciones a los docentes que integrarán la nómina. En julio, con el inicio del nuevo semestre, comenzarán los preuniversitarios para los estudiantes que inicien actividad académica el año entrante.
Estas primeras jornadas de trabajo académico, no se harán en el edificio recibido en comodato, sino en un colegio localizado al frente del mismo. Eso, mientras el Alcalde termina las adecuaciones que le fueron entregadas durante la firma del contrato.