I

El buen padre es un tutor
que premia la providencia,
y se colman de prudencia
las virtudes del amor.
La madre, hermoso primor,
de ternura en amasijo,
sueña siempre que los hijos
sean rosales de esperanza.
Feliz la dicha se alcanza
en un instante florido

           II

En ese instante florido
de amistad y simpatía,
el perfume es alegría
de jardín reverdecido.
Parece estar detenido
el tiempo de la emoción,
porque la misma canción
es más bonita que ayer,
motivo para entender
que hay fiesta en el corazón.

        III

Es un milagro la vida,
y Dios con su gran poder
hizo al hombre y la mujer
con las velas encendidas.
La memoria les fue ungida
con óleos de dignidad
y anhelos de libertad,
de trabajo y de justicia;
es un edén de delicias
vivir en honestidad.

        IV

Dice el sabio Salomón
en cantares de la Biblia:
Feliz vive la familia
cuando existe comprensión.
El hombre que tiene el don
de ser padre bondadoso
siempre disfruta dichoso
las delicias del hogar.
En todo padre ejemplar
los hijos son talentosos.

Por José Atuesta Mindiola