Hoy, en el Día de la Raza, EL PILÓN, destaca el trabajo de los indígenas y afrodescendientes, principales grupos étnicos en el Cesar, los cuales afrontan diferentes problemáticas, avances y desaciertos.
Datos entregados por la Oficina de Asuntos Étnicos de la Gobernación del Cesar revelaron que en el departamento existen alrededor de 60 mil indígenas y 120 mil afrodescendientes.
Hernán Gutiérrez Hernández, enlace étnico de la Secretaría de Gobierno Departamental, detalló la apertura social de la población étnica que en la actualidad hace presencia en el departamento.
“Dentro del actual Plan de Desarrollo se propuso darle sentido a la diversidad étnica en el Cesar el cual ocupa el segundo lugar a nivel nacional, es un tema que se habla de diversidad más no de cantidad”, reconoció el funcionario, miembro de la etnía kankuama.
En el Cesar existen siete pueblos indígenas, cuatro en la Sierra Nevada de Santa Marta (kankuamos, koguis, wiwa y arhuacos); uno en la Serranía del Perijá (Yukpas); otro en El Copey (Ette Ennaka) y en Curumaní (Barís), albergados en 12 resguardos, cada uno con su propia autonomía.
Con el paso del tiempo, algunos grupos indígenas sienten que han perdido injerencia en temas importantes a nivel nacional, sobre todo en los aspectos de participación política y muchos aseguran que solo son tenidos en cuenta.
Gutiérrez Hernández reconoció la problemática que afecta a la comunidad indígena asentada en el departamento del Cesar al asegurar que “la primera dificultad se registra precisamente en el entendimiento de esa diversidad, nos cuesta entender el lenguaje étnico. En el Cesar existen cinco ramas de esa diversidad”.
En esa misma línea de problemas aparecen otros que son de conocimiento público, como las falencias en salud y educación. “Hay zonas en donde los maestros no son indígenas. En el tema de salud, hay vulnerabilidad en la medicina tradicional que está siendo opacada por la medicina occidental, ese es uno de los temas que se está tratando a fondo, nos han dado la facultad para apoyarlos desde el gobierno departamental”, aseguró.
En la actualidad, la Oficina de Asuntos Étnicos atiende una problemática que afecta a la comunidad Kogui, cuyos animales de corral son devorados por ataques de felinos que abundan en la parte alta del corregimiento de Caracolí (El Copey) y la región Chetugua en el corregimiento de Guatapurí. “Nos dicen que son más de 40 animales que fueron víctimas de felinos, pero no solo afecta a los animales sino a la misma población, ya colocamos la queja en Corpocesar para que ellos tomen cartas en el asunto”, advirtió.
Paralelamente se inició un proceso de mediación para afrontar un conflicto interno en Codazzi entre los yukpas y una mínima población de los arhuacos que se han desplazado predios yukpas, hecho que tiene un tratamiento especial a través del Ministerio del Interior.
En el tema de los afros, el enlace étnico del Cesar, aseguró que esta población está incluida en la diversidad nacional en la que también pertenecen sectores como los indígenas, palenqueros, raizales y gitanos o rom, que en menor proporción está asentada en el municipio de Aguachica.
“En el departamento hay unos 30 Consejos Comunitarios constituidos y reconocidos por el Ministerio del Interior de comunidades afrodescendientes a las que le hemos hecho un acompañamiento en temas puntuales. En estos momentos hay una empresa de energía de Bogotá que adelanta trabajos de consulta a los pueblos afro de la zona carbonera de La Jagua de Ibirico en la elaboración de un proyecto de conducción energética que beneficiará a esta población sino al país en general”, reveló Hernán Gutiérrez.
La población afro está amparada en la ley 70 que normativiza el funcionamiento de la misma. “Nosotros tenemos una política pública aprobada por la Asamblea que nos permite respaldar cualquier acción a favor del sector afro”, acotó.
María Lidyalu Perea, líder de la comunidad afrodescendiente del departamento del Cesar reconoció que “hay un resurgimiento de esta población porque está llegando gente para darle otro aire a la estructura directiva y consientes de todo lo que se ha perdido por culpa de las roscas que antes había en el tema, la gente está despertando y exigiendo sus derechos. Por parte de los gobernantes nunca hemos tenido ese respaldo, hubo muchas promesas que no se han cumplido, en 2009 se creó una política pública con 17 artículos pero nunca hubo una voluntad para sacarla adelante”.
Respecto a los Consejos Comunales, aseguró que “en el Cesar hay más de 40 y 20 organizaciones afro amparadas por la Constitución Nacional, al no encontrar respaldo por el gobierno local, se está trabajando con el Ministerio del Interior e Incoder para sacar adelante las propuestas que acá no han tenido eco. Nos reunimos una sola vez con el actual gobernador, pero lo que ahí se dijo no se ha hecho nada”.
Refutó el censo realizado hace dos años el cual arrojó una población de 107.500 afros en el Cesar. “Creo que son más porque el censo se hizo mal. Hay que conocer la historia del surgimiento afro en el departamento porque por aquí hubo un paso obligado entre esclavos y españoles que venían de Cartagena con destino a Venezuela, eso produjo una colonización de negros en el centro del Cesar”, puntualizó.
El 12 de octubre, día festivo en Colombia conocido como “Día de la raza”, es una fecha en la que se conmemora el día en el que Cristóbal Colón llegó al continente americano, en el año de 1492. Este memorable día recuerda el inicio del contacto entre las culturas de Europa y de América, en lo que se considera como el “encuentro de dos mundos”, que transformó las visiones del mundo y la manera de vivir tanto en los europeos como en los americanos.
La historia sobre el arribo de Colón a América es bastante particular ya que se sabe que murió sin siquiera conocer que había encontrado un continente nuevo debido a que siempre creyó que había llegado a la India dando la vuelta al mundo. Nunca supo que se topó ante el continente americano, y luego de él, navegantes como Núñez de Balboa, Francisco Hernández de Córdoba y Juan Grijalval lograron recorrer otras tierras del norte. Por su parte, el florentino Américo Vespucio fue quién recorrió toda la costa norte de Sudamérica.
Si bien la celebración es el 12 de octubre, en Colombia si no cae lunes para ese día por ley se traslada al lunes siguiente. La riqueza histórica que tiene este día hace que cada año se trate de una fiesta a nivel nacional en la que se celebra la llegada de Colón a tierras americanas. Entonces, el Día de la Raza hace un llamado al análisis, al pensamiento y la reflexión de la situación que se vivió hace muchos años y que permitió que tengamos la vida que hoy en día tenemos, con una mezcla de razas que intentan convivir en armonía, como debe ser aquí y en cualquier otra parte del mundo.
Los pueblos indígenas del Cesar tienen diferente organización dependiendo el pueblo. Es así como la organización de los Wiwa lleva por nombre Wiwa Yugumaiun Bunkwanarrwa Tayrona, los kankuamos hacen parte de la Organización Indígena Kankwama, los arhuacos hacen parte de la Organización Indígena Tayrona y los Kogui están en la Organización Gonawindua Tayrona. Estos cuatro grupos hacen parte del Consejo Territorial de Cabildos de la Sierra Nevada de Santa Marta, (CTC). Por su parte, los Yukpa y los Ette Ennaka, pertenecen a la organización Sekuime.
Colombia es un país multidiverso; cerca de la mitad de la población tiene origen ascendente de uno de los tres grupos étnicos legalmente reconocidos: indígena, negra y gitana.
La mayor parte de la población indígena colombiana habita en resguardos legalmente constituidos, ubicados en 27 departamentos y 228 municipios del país.
Los departamentos que tienen el mayor porcentaje indígena en el país son Guainía, Vaupés, La Guajira, Amazonas, Vichada, Cauca y Nariño. En La Guajira, Cauca y Nariño se concentran alrededor de la mitad de los indígenas de Colombia.
Los afrodescendientes son personas con ascendente familiar de países de África, quienes fueron traídas a América contra su voluntad y con motivo de la esclavitud en la época de la colonia española.
La mayor concentración de afrocolombianos se encuentran en las zonas costeras de la región del pacífico y del caribe (La Guajira, Magdalena, Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, Sucre y Antioquia).
Hoy son aproximadamente 5.340 gitanos y según el Dane el 94% de la población rom vive en Kumpanias en los departamentos de Atlántico, Bolívar, Valle del Cauca, Norte de Santander, Santander, Nariño y Bogotá.
En el Cesar existen siete pueblos indígenas, cuatro en la Sierra Nevada de Santa Marta; uno en la Serranía del Perijá; otro en El Copey y en Curumaní, albergados en 12 resguardos, cada uno con su propia autonomía.
En la actualidad, la Oficina de Asuntos Étnicos atiende una problemática que afecta a la comunidad Kogui, cuyos animales son devorados por ataques de felinos.
Nibaldo Bustamante/EL PILÓN
Hoy, en el Día de la Raza, EL PILÓN, destaca el trabajo de los indígenas y afrodescendientes, principales grupos étnicos en el Cesar, los cuales afrontan diferentes problemáticas, avances y desaciertos.
Datos entregados por la Oficina de Asuntos Étnicos de la Gobernación del Cesar revelaron que en el departamento existen alrededor de 60 mil indígenas y 120 mil afrodescendientes.
Hernán Gutiérrez Hernández, enlace étnico de la Secretaría de Gobierno Departamental, detalló la apertura social de la población étnica que en la actualidad hace presencia en el departamento.
“Dentro del actual Plan de Desarrollo se propuso darle sentido a la diversidad étnica en el Cesar el cual ocupa el segundo lugar a nivel nacional, es un tema que se habla de diversidad más no de cantidad”, reconoció el funcionario, miembro de la etnía kankuama.
En el Cesar existen siete pueblos indígenas, cuatro en la Sierra Nevada de Santa Marta (kankuamos, koguis, wiwa y arhuacos); uno en la Serranía del Perijá (Yukpas); otro en El Copey (Ette Ennaka) y en Curumaní (Barís), albergados en 12 resguardos, cada uno con su propia autonomía.
Con el paso del tiempo, algunos grupos indígenas sienten que han perdido injerencia en temas importantes a nivel nacional, sobre todo en los aspectos de participación política y muchos aseguran que solo son tenidos en cuenta.
Gutiérrez Hernández reconoció la problemática que afecta a la comunidad indígena asentada en el departamento del Cesar al asegurar que “la primera dificultad se registra precisamente en el entendimiento de esa diversidad, nos cuesta entender el lenguaje étnico. En el Cesar existen cinco ramas de esa diversidad”.
En esa misma línea de problemas aparecen otros que son de conocimiento público, como las falencias en salud y educación. “Hay zonas en donde los maestros no son indígenas. En el tema de salud, hay vulnerabilidad en la medicina tradicional que está siendo opacada por la medicina occidental, ese es uno de los temas que se está tratando a fondo, nos han dado la facultad para apoyarlos desde el gobierno departamental”, aseguró.
En la actualidad, la Oficina de Asuntos Étnicos atiende una problemática que afecta a la comunidad Kogui, cuyos animales de corral son devorados por ataques de felinos que abundan en la parte alta del corregimiento de Caracolí (El Copey) y la región Chetugua en el corregimiento de Guatapurí. “Nos dicen que son más de 40 animales que fueron víctimas de felinos, pero no solo afecta a los animales sino a la misma población, ya colocamos la queja en Corpocesar para que ellos tomen cartas en el asunto”, advirtió.
Paralelamente se inició un proceso de mediación para afrontar un conflicto interno en Codazzi entre los yukpas y una mínima población de los arhuacos que se han desplazado predios yukpas, hecho que tiene un tratamiento especial a través del Ministerio del Interior.
En el tema de los afros, el enlace étnico del Cesar, aseguró que esta población está incluida en la diversidad nacional en la que también pertenecen sectores como los indígenas, palenqueros, raizales y gitanos o rom, que en menor proporción está asentada en el municipio de Aguachica.
“En el departamento hay unos 30 Consejos Comunitarios constituidos y reconocidos por el Ministerio del Interior de comunidades afrodescendientes a las que le hemos hecho un acompañamiento en temas puntuales. En estos momentos hay una empresa de energía de Bogotá que adelanta trabajos de consulta a los pueblos afro de la zona carbonera de La Jagua de Ibirico en la elaboración de un proyecto de conducción energética que beneficiará a esta población sino al país en general”, reveló Hernán Gutiérrez.
La población afro está amparada en la ley 70 que normativiza el funcionamiento de la misma. “Nosotros tenemos una política pública aprobada por la Asamblea que nos permite respaldar cualquier acción a favor del sector afro”, acotó.
María Lidyalu Perea, líder de la comunidad afrodescendiente del departamento del Cesar reconoció que “hay un resurgimiento de esta población porque está llegando gente para darle otro aire a la estructura directiva y consientes de todo lo que se ha perdido por culpa de las roscas que antes había en el tema, la gente está despertando y exigiendo sus derechos. Por parte de los gobernantes nunca hemos tenido ese respaldo, hubo muchas promesas que no se han cumplido, en 2009 se creó una política pública con 17 artículos pero nunca hubo una voluntad para sacarla adelante”.
Respecto a los Consejos Comunales, aseguró que “en el Cesar hay más de 40 y 20 organizaciones afro amparadas por la Constitución Nacional, al no encontrar respaldo por el gobierno local, se está trabajando con el Ministerio del Interior e Incoder para sacar adelante las propuestas que acá no han tenido eco. Nos reunimos una sola vez con el actual gobernador, pero lo que ahí se dijo no se ha hecho nada”.
Refutó el censo realizado hace dos años el cual arrojó una población de 107.500 afros en el Cesar. “Creo que son más porque el censo se hizo mal. Hay que conocer la historia del surgimiento afro en el departamento porque por aquí hubo un paso obligado entre esclavos y españoles que venían de Cartagena con destino a Venezuela, eso produjo una colonización de negros en el centro del Cesar”, puntualizó.
El 12 de octubre, día festivo en Colombia conocido como “Día de la raza”, es una fecha en la que se conmemora el día en el que Cristóbal Colón llegó al continente americano, en el año de 1492. Este memorable día recuerda el inicio del contacto entre las culturas de Europa y de América, en lo que se considera como el “encuentro de dos mundos”, que transformó las visiones del mundo y la manera de vivir tanto en los europeos como en los americanos.
La historia sobre el arribo de Colón a América es bastante particular ya que se sabe que murió sin siquiera conocer que había encontrado un continente nuevo debido a que siempre creyó que había llegado a la India dando la vuelta al mundo. Nunca supo que se topó ante el continente americano, y luego de él, navegantes como Núñez de Balboa, Francisco Hernández de Córdoba y Juan Grijalval lograron recorrer otras tierras del norte. Por su parte, el florentino Américo Vespucio fue quién recorrió toda la costa norte de Sudamérica.
Si bien la celebración es el 12 de octubre, en Colombia si no cae lunes para ese día por ley se traslada al lunes siguiente. La riqueza histórica que tiene este día hace que cada año se trate de una fiesta a nivel nacional en la que se celebra la llegada de Colón a tierras americanas. Entonces, el Día de la Raza hace un llamado al análisis, al pensamiento y la reflexión de la situación que se vivió hace muchos años y que permitió que tengamos la vida que hoy en día tenemos, con una mezcla de razas que intentan convivir en armonía, como debe ser aquí y en cualquier otra parte del mundo.
Los pueblos indígenas del Cesar tienen diferente organización dependiendo el pueblo. Es así como la organización de los Wiwa lleva por nombre Wiwa Yugumaiun Bunkwanarrwa Tayrona, los kankuamos hacen parte de la Organización Indígena Kankwama, los arhuacos hacen parte de la Organización Indígena Tayrona y los Kogui están en la Organización Gonawindua Tayrona. Estos cuatro grupos hacen parte del Consejo Territorial de Cabildos de la Sierra Nevada de Santa Marta, (CTC). Por su parte, los Yukpa y los Ette Ennaka, pertenecen a la organización Sekuime.
Colombia es un país multidiverso; cerca de la mitad de la población tiene origen ascendente de uno de los tres grupos étnicos legalmente reconocidos: indígena, negra y gitana.
La mayor parte de la población indígena colombiana habita en resguardos legalmente constituidos, ubicados en 27 departamentos y 228 municipios del país.
Los departamentos que tienen el mayor porcentaje indígena en el país son Guainía, Vaupés, La Guajira, Amazonas, Vichada, Cauca y Nariño. En La Guajira, Cauca y Nariño se concentran alrededor de la mitad de los indígenas de Colombia.
Los afrodescendientes son personas con ascendente familiar de países de África, quienes fueron traídas a América contra su voluntad y con motivo de la esclavitud en la época de la colonia española.
La mayor concentración de afrocolombianos se encuentran en las zonas costeras de la región del pacífico y del caribe (La Guajira, Magdalena, Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, Sucre y Antioquia).
Hoy son aproximadamente 5.340 gitanos y según el Dane el 94% de la población rom vive en Kumpanias en los departamentos de Atlántico, Bolívar, Valle del Cauca, Norte de Santander, Santander, Nariño y Bogotá.
En el Cesar existen siete pueblos indígenas, cuatro en la Sierra Nevada de Santa Marta; uno en la Serranía del Perijá; otro en El Copey y en Curumaní, albergados en 12 resguardos, cada uno con su propia autonomía.
En la actualidad, la Oficina de Asuntos Étnicos atiende una problemática que afecta a la comunidad Kogui, cuyos animales son devorados por ataques de felinos.
Nibaldo Bustamante/EL PILÓN