Cuando se habla de una alimentación adecuada en menores de edad, se habla de llevar una dieta de alimentos sanos que ayuden a regular la salud en ellos.
Cuando se habla de una alimentación adecuada en menores de edad, se habla de llevar una dieta de alimentos sanos que ayuden a regular la salud en ellos.
Para conocer más sobre este tema, la nutricionista Antonia Carretero de la Secretaría de Salud Departamental, afirmó que “primero hay que enseñarles a los niños que el desayuno debe ser indispensable antes de salir de la casa ya sea para el colegio o jardín infantil, luego de eso se empieza a mirar lo que nosotros le llamamos el plan fraccionado que son las meriendas, onces o medias tardes”.
De acuerdo con la nutricionista, una lonchera preferiblemente debe estar constituida por un lácteo, una fruta y una proteína, bien sea un yogurt, una manzana y jamón ya que estos son vitales para su crecimiento; sin olvidar que las proteínas deben ir fortalecidas con la parte de vitamina.
Es importante que los padres elijan una fruta que no sea pelada por ejemplo un banano o una pera, para que al momento de consumirla no tenga una manipulación inadecuada.
Como merienda para las horas de la tarde se recomienda un jugo de fruta que no sea industrializado, acompañado de un carbohidrato como una galleta, en esto los padres se dan cuenta que los lácteos no son importantes como en las horas de la mañana.
La recomendación que la nutricionista Antonia Carretero les hace a los padres es que no se vayan a la parte más fácil de hacer las cosas como ir a una tienda y comprarles una gaseosa o un producto de paquete.
Las meriendas deben ser planificadas de acuerdo a la edad de cada niño, no es lo mismo una merienda para un niño de 2 años, que una para un niño de 8 o 9.
Los menores con frecuencia sufren de la parte gástrica, esto generalmente, según la nutricionista, se debe al incumplimiento de los horarios en la comida, hay que tener la disponibilidad, porque si se trata de un niño menor de dos años debe consumir alimentos cada dos horas, incluyendo leche materna, porque el niño necesita tener permanentemente en su estómago algún tipo de nutrientes que son los que previene las enfermedades como la gastritis o una úlcera gástrica.
Lo ideal es que los padres de familia hagan un menú en casa, sobre los alimentos y bebidas que deben consumir los niños en la escuela y en las jornadas fuera de clases, porque dependiendo de una buena alimentación, tendrá un satisfactorio crecimiento y una buena salud.
Por Pilar Peña Toloza
Cuando se habla de una alimentación adecuada en menores de edad, se habla de llevar una dieta de alimentos sanos que ayuden a regular la salud en ellos.
Cuando se habla de una alimentación adecuada en menores de edad, se habla de llevar una dieta de alimentos sanos que ayuden a regular la salud en ellos.
Para conocer más sobre este tema, la nutricionista Antonia Carretero de la Secretaría de Salud Departamental, afirmó que “primero hay que enseñarles a los niños que el desayuno debe ser indispensable antes de salir de la casa ya sea para el colegio o jardín infantil, luego de eso se empieza a mirar lo que nosotros le llamamos el plan fraccionado que son las meriendas, onces o medias tardes”.
De acuerdo con la nutricionista, una lonchera preferiblemente debe estar constituida por un lácteo, una fruta y una proteína, bien sea un yogurt, una manzana y jamón ya que estos son vitales para su crecimiento; sin olvidar que las proteínas deben ir fortalecidas con la parte de vitamina.
Es importante que los padres elijan una fruta que no sea pelada por ejemplo un banano o una pera, para que al momento de consumirla no tenga una manipulación inadecuada.
Como merienda para las horas de la tarde se recomienda un jugo de fruta que no sea industrializado, acompañado de un carbohidrato como una galleta, en esto los padres se dan cuenta que los lácteos no son importantes como en las horas de la mañana.
La recomendación que la nutricionista Antonia Carretero les hace a los padres es que no se vayan a la parte más fácil de hacer las cosas como ir a una tienda y comprarles una gaseosa o un producto de paquete.
Las meriendas deben ser planificadas de acuerdo a la edad de cada niño, no es lo mismo una merienda para un niño de 2 años, que una para un niño de 8 o 9.
Los menores con frecuencia sufren de la parte gástrica, esto generalmente, según la nutricionista, se debe al incumplimiento de los horarios en la comida, hay que tener la disponibilidad, porque si se trata de un niño menor de dos años debe consumir alimentos cada dos horas, incluyendo leche materna, porque el niño necesita tener permanentemente en su estómago algún tipo de nutrientes que son los que previene las enfermedades como la gastritis o una úlcera gástrica.
Lo ideal es que los padres de familia hagan un menú en casa, sobre los alimentos y bebidas que deben consumir los niños en la escuela y en las jornadas fuera de clases, porque dependiendo de una buena alimentación, tendrá un satisfactorio crecimiento y una buena salud.
Por Pilar Peña Toloza